Mucho se está discutiendo en estos últimos meses sobre si estamos en las etapas finales del actual ciclo económico o si la desaceleración económica iniciada a principios de 2018 (y que aparentemente está llegando a su fin) es una simple pausa al estilo 2012 o 2016 para seguir subiendo. Hay posturas para todos los gustos, pero lo que parece evidente es que tras diez años de mercado alcista, las buenas oportunidades de inversión son cada vez menores. Quizás sí que existen oportunidades interesantes en sectores muy deprimidos como las materias primas o el sector bancario europeo, pero en términos globales las valoraciones bursátiles están bastante ajustadas (calificar de “burbuja” la situación actual de la renta variable no es el término más adecuado).
Una buena muestra de esta “sobrevaloración” del mercado la vemos reflejada en la ingente cantidad de efectivo acumulada desde el año 2009 por Berkshire Hathaway, el brazo inversor de Warren Buffett. Según los últimos datos ofrecidos por la compañía, a finales del tercer trimestre de este año, Berkshire Hathaway acumulaba 128.200 millones de dólares en efectivo, cifra que como vemos en el gráfico superior no ha parado de aumentar desde el año 2009 y especialmente desde el año 2016. El efectivo acumulado por Buffett se ha duplicado en estos últimos tres años pasando de unos 60.000 millones de dólares a más de 128.000 millones.
(Fuente: CNBC)
Los analistas no encuentran explicaciones claras que justifiquen tal acumulación de “cash”, ya que la compañía apenas está recomprando sus propias acciones y tampoco está haciendo adquisiciones significativas. Es por ello que los analistas de UBS se muestran muy sorprendidos de que la compañía no haya sido más agresiva recomprando sus propias acciones dado el descuento con respecto al valor intrínseco con el que cotizan actualmente. Sin embargo, es justo apuntar que Buffett nunca ha sido muy partidario de esta práctica, por lo cual este bajo ritmo de recompras podría estar justificado desde el punto de vista de la política de inversión de Berkshire Hathaway.
Pero este comportamiento tampoco debería sorprendernos en exceso si hacemos caso a lo que decía el propio Buffett en la carta anual a sus inversores del pasado año 2018, cuando señalaba que “los precios son altísimos para las empresas que poseen perspectivas decentes a largo plazo”. Una idea que ha repetido en diversas ocasiones, señalando que la prima que hay que pagar a la hora de comprar compañías se ha vuelto demasiado exigente, hecho motivado en parte por la competencia de las compañías de capital riesgo.
(Fuente: CNBC)
Por lo tanto, no es de extrañar que las especulaciones se hayan disparado y mucha gente vea en esta enorme acumulación de efectivo una señal clara e inequívoca de que el mercado está muy sobrevalorado. Sea como fuere, lo que sí parece bastante claro es que los niveles actuales no invitan a hacer fuertes adquisiciones, teniendo en cuenta que el PER del S&P 500 (esperado para los doce próximos meses) se encuentra en uno de los niveles más elevados de la última década.
Otros artículos relacionados publicados por el equipo de inBestia: