El pasado 17 de marzo cerré mi PUT DAX 7000 Diciembre, recomprándola por 129,5 puntos (después de venderla un mes antes por 297 puntos). El DAX estaba entonces en los 9.800 puntos, y como ejemplo del impacto que tiene el paso del tiempo, resulta que 20 días después, con el DAX más de 200 puntos más abajo, esa PUT 7000 cotiza prácticamente al mismo precio, en torno a 130 puntos. Dicho de otra manera, 20 días transcurridos equivalen a 200 puntos de caída del DAX, considerando que la volatilidad implícita casi no se ha movido.
Si no hubiera recomprado esa PUT vendida, (es decir, si no hubiera cerrado mi posición lateral-alcista) y me la hubiera quedado en cartera, no estaría perdiendo nada a pesar del movimiento en contra del DAX de unos 220 puntos. Este es el poder del paso del tiempo, y podemos verlo al revés, desde el punto de vista del comprador: si alguien hubiera comprado una PUT DAX 7000 diciembre el pasado día 17 de marzo, con el DAX en los 9.800 puntos, no estaría ganando nada después de una caída de 220 puntos del DAX.
Durante todo este tiempo, he preferido estar al margen del mercado, esperando una mejor "ventana de trading", siempre bajo el punto de vista de la gestión de una cuenta hiper-conservadora, cuyo objetivo no es ganar, sino no perder (con una elevada probabilidad), dejando la puerta abierta a oportunidades puntuales. Aquí tenemos, una vez más, un ejemplo de la diferencia entre el análisis y la gestión. El análisis de medio plazo nos dice que seguimos alcistas; pero la gestión táctica de corto plazo, y estratégica de medio-largo plazo, nos lleva por senderos más complicados, surfeando las olas del mercado.
Mi escenario de fondo sigue siendo alcista, y por lo tanto considero que hay que buscar puntos de entrada. Pero como siempre, no tengo prisa. Soy metódico y lento en mis decisiones, porque es lo que mejor me va. Esa lentitud es una característica que encaja muy bien con las opciones, por eso me gustan tanto.
Escenario técnico.
Lo que más me llama la atención, semana tras semana, es la tremenda fortaleza de la bolsa USA, tanto el SP500 como el Nasdaq, mientras Europa se sigue descolgando. Con este rebote que hemos visto desde mediados de febrero, el SP500 se ha puesto en positivo desde el 1-enero, mientras que Europa todavía pierde entre un -8% para el CAC y un -19% para el MIB Italiano, pasando por un -11% para el Eurostoxx50 o el Ibex. Esto es lo que se conoce como debilidad relativa, y es una señal de debilidad de Europa frente a EEUU.
Y globalmente, a pesar del fuerte rebote en EEUU, no da la sensación de que las bolsas hayan reencontrado el rumbo alcista de fondo, así que no descarto una recaída, quizá en un entorno de ruido y volatilidad de medio plazo, es decir, una sucesión de sustos y amagos que al final del año no nos lleven a ninguna parte. Un escenario así sería ideal para las estrategias de venta de opciones. Los mercados se encuentran aprisionados entre la falta de potencial alcista a medio-largo plazo, como comenté en este post muy reciente, y la falta de detonantes bajistas potentes, gracias a una macro expansiva (=crecimiento), y a la intervención de los bancos centrales.
Tanto el banco de Japón como el BCE se empiezan a enfrentar a una realidad preocupante: sus intervenciones no consiguen debilitar a sus divisas. Así que, la situación muy resumida es esta:
- La intervención del BCE ha cortado la hemorragia en el sector del crédito, y ha provocado compras en deudas corporativas que tumban los tipos. Paradójicamente, el euro se está fortaleciendo.
- La actitud ahora ya claramente acomodaticia de Janet Yellen, ha permitido que el dólar se debilite.
- Dólar débil es bueno para divisas y países emergentes, y para materias primas...pero todo tiene un límite, y la recaída del petróleo (ver siguiente gráfico) ha sido precursora del giro bajista de corto plazo en las bolsas.
Observen por cierto el fallo alcista del Brent (círculo rojo), al superar la directriz bajista antes de volver a girarse a la baja. Es lo propio de los rebotes en tendencias bajistas. ¿Hemos tocado suelo? Yo apostaría que sí, pero eso no es sinónimo de un petróleo alcista. Lo que hemos tenido hasta aquí es un rebote "normal", del que hablé aquí. Y en realidad es mucho mejor que el rebote no vaya más lejos, porque una subida demasiado vertical en las materias primas podría tener efectos negativos en los países desarrollados, siguiente la tesis de Juan Ignacio Crespo de la que hablé en este post.
En realidad, por mucho que busquemos explicaciones más o menos complejas, a menudo lo sencillo se impone: ¿quién va a tomar el relevo en el SP500 después del rally alcista que acumula desde mediados de febrero? La situación de sobrecompra en el SP500 significaba simplemente que la ecuación riesgo-recompensa a estos niveles no era favorable. Aunque claro, esa sobrecompra se puede ajustar en cuestión de días a poco que el SP corrija levemente.
Lo difícil como siempre es el timing. Hace un par de semanas que muchos avisaban de esa sobrecompra. Fíjense en la vela blanca del día 1 de abril: parece que el trimestre cerró arriba, y como nos dice la pauta estacional de los días del mes, los días más fuertes son los últimos y primeros de mes. Así que tras los reajustes iniciales de los gestores el día 1, han llegado las primeras dos velas negras consecutivas en el SP500 desde finales de febrero.
No obstante, los máximos y mínimos locales (de corto plazo) siguen siendo crecientes, así que la tendencia sigue alcista. Pero estas dos velas negras, a la espera de ver cómo cierra la sesión hoy miércoles, son para mí la primera indicación seria (técnicamente) del inicio de esa esperada consolidación. Así que ahora se trata de observar, manteniendo siempre en mente que el fondo sigue siendo alcista...y buscando indicios, señales, pistas, de que podamos estar equivocados.
El primer retroceso de Fibonacci (23%) para el tramo alcista iniciado en los mínimos de febrero nos llevaría hasta los 2013 puntos. El segundo retroceso (38%) hacia los 1975 puntos. El último mínimo local relevante está en torno a los 2030 puntos, y su pérdida sería la confirmación de la entrada en fase de consolidación de corto plazo.
No pierdan de vista tampoco el gráfico del SP500 en velas semanales (a continuación), donde se aprecia un banderín de libro, que confirma una fase de consolidación desde el verano, con un rebote que se ha frenado en la directriz bajista de ese banderín. Bajo este horizonte temporal, es normal por tanto plantear un alto en el camino, pero sin perder de vista que lo más probable es una ruptura de continuación alcista.
Como siempre, Europa está más débil, y la incógnita es qué puede pasar si el SP500 corrige un 38% del último tramo alcista, porque eso podría provocar que la situación técnica se complique mucho en Europa, incluso en el DAX, normalmente un índice fuerte. Vean el gráfico del DAX en velas semanales: una caída por debajo de los 9.370 puntos supondría la pérdida del último gap-soporte, y sería una señal relevante a vigilar.
Entramos pues en fase de consolidación de corto plazo, a observar. En principio, supondrá un nuevo punto de entrada (oportunidad), y ese es el enfoque con el que afronto este mes de abril. Pero estoy igualmente pendiente de un posible cambio de escenario o giro de acontecimientos, para lo cual esperaré (como siempre), que hablen primero los gráficos.