No sé a donde irán los siguientes 500 puntos, pero sí los siguientes 3000

Ayer me comentaba un amigo que cómo era posible que diga que Grecia está descontando por los mercados si estos días los mercados parecen caer por Grecia.

En primer lugar, lo que está descontando es una crisis sistémica que hunda los mercados de forma profunda y sostenida. Todos los agentes han tenido 5 años para adaptarse a esta "noticia" y por tanto ya no hay efecto sorpresa, no hay novedades. El "riesgo Grecia" ha sido aislado.

Cuando Grecia debía dinero al sector privado, eso era una bomba de relojería, un potencial Lehman Brothers. Hoy se lo debe al sector público (a todos nosotros) y a especialistas como los hedge funds que saben qué están arriesgando y soportan todo el riesgo. 

Desde que la crisis Griega se destapó, las bolsas europeas han subido un 43,50% y eso que han tenido que sufrir una recesión entre 2011 y 2012 que nada -o casi nada- tenía que ver con Grecia. 

Si tu análisis durante los últimos 5 años era que Grecia te iba a procurar pérdidas, eso ha sido un error. Y, desde mi punto de vista, pensar que Grecia puede provocar pérdidas en los próximos 12 meses es otro error. Grecia puede y será motivo de volatilidad a corto plazo. Pero nada más. Importan mucho más otras cosas como el tipo de cambio, el precio del petróleo y la marcha de las economías americanas y europeas. 

Pero decir que EEUU ha creado más empleo en lo que va de 2015 que en cualquier otro año del siglo XXI no vende tantos periódicos como decir que el Grexit hundirá los mercados. 

Luego, como siempre ocurre, cada vez que alguien tiene que pactar o decidir algo la volatilidad regresa porque los bajistas se hacen fuerte en el corto plazo. Eso ocurre con la excusa de Grecia y con cualquier otra. Es parte de la dinámica de los mercados.

Pero recordemos que el año pasado tuvimos dos correcciones potentes y una especialmente potente en octubre que más bien tenía que ver con las dudas sobre el conjunto de la economía europea (ver ¡Es Alemania estúpido! ¿Estamos en 2005 o en 2007?). Y en 2013 tuvimos otra corrección de mayor magnitud que la actual y que nada tenía que ver con Grecia.

Las correcciones se producen por un giro del sentimiento. A veces se encuentra una buena excusa, como ahora ocurre con Grecia, pero otras veces a falta de excusa los mercados corrigen igualmente y entonces los analistas y los periodistas se tienen que sacar de la chistera la fórmula de "la bolsa corrige por varios factores", cuando la mejor descripción sería "la bolsa cae porque sí". Pero eso no vende e intelectualmente te haría parecer un débil aunque sea lo más verdadero la mayoría de las veces.

Los mercados reflejan el crecimiento a medio plazo (1 año y más)  pero fluctúan en el corto plazo. A veces muchísimo como ocurrió en EEUU en el año 2011 cuando el S&P 500 declinó un 20% por la falacia del riesgo de recesión y el catalizador de la ridícula rebaja de la calificación crediticia de EEUU por parte de una de sus agencias.

Hacer caso a las cotizaciones cuando se basan en argumentos falaces, como ocurre ahora con la idea de que Grecia puede parar el crecimiento en Europa, es una mala política. 

Admitir que las cotizaciones están en lo cierto y que están señalando "el camino de la verdad bajista", es intercambiar la verdad más probable por factores cortoplacistas y en gran medida aleatorios. Es intercambiar el camino del medio plazo por el ruido de unos días.

Hay veces en la que los precios confirman la verdad y hay otras veces en los que niegan la verdad. Como ahora, por eso hay que contradecirlos.

Parece que Grecia y sus locos dirigentes se encaminan al peor escenario posible. Y sin duda eso puede provocar que los mercados profundicen su caída, incluyendo un día negro y feo lleno de pesimismo y "apocaliptismo". Pero tras esa caída, si se produce, los mercados volverán al alza para "seguir" al crecimiento económico del que hoy disfrutamos. Como siempre, a pesar de todo.

Por eso no sé donde estarán los próximos 500 puntos, abajo o arriba, pero todos los datos -no mis creencias- me señalan que los próximos 3.000 (DAX o IBEX) los registrarán las bolsas al alza. 

El pesimismo no paga más que cuando todos son optimistas y los datos son malos. Hoy, no hay optimistas y los datos son buenos.