No hay ninguna duda de la genialidad de Warren Buffett. Pero seamos rigurosos: en los últimos años la cotización de Berkshire Hathaway no ha subido (principalmente al menos) por la brillantez de Buffett, sino simplemente porque el mercado en general ha subido como la espuma.
Los siguientes gráficos son muy ilustrativos, ya que muestran la elevadísima correlación de la cotización de las acciones de clase B de Berkshire, y el ETF de más peso del S&P 500:
Correlación de .98. Y esto no es solo cosa del último año...
Como alguna vez me ha comentado Pablo Martínez Bernal, las rentabilidades de Buffett, pese a seguir siendo notables, han perdido el brillo a medida que pasaba el tiempo. Su primera década fue la mejor, su segunda la segunda mejor, y así sucesivamente. Uno de los factores importantes en este sentido es que la cantidad de activos gestionados ha crecido muy considerablemente, lo que presenta limitaciones, además de que le hace más difícil descorrelacionarse y batir al mercado.
Fuente: Video semanal de All Star Charts.
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