"Markets are constantly in a state of uncertainty and flux and money is made by discounting the obvious and betting on the unexpected." George Soros
No se puede decir mucho que no explicara ya en el artículo que publiqué en la mañana siguiente al Brexit. En el precio no está descontado todo, solo la opinión media.
Los mercados, sean financieros o de apuestas, aciertan, pero también se equivocan en sus previsiones. Es una lucha constante donde se mezclan manos fuertes con grandes faroles. Igual que el jugador de póquer no espera ganar todas las manos, el inversor o especulador no puede ganar en todas las circunstancias de mercado, sino que ha de contar en el largo plazo con una ventaja suficiente para batir a ese mercado.
Ayer y hoy mismo a medida que finalizaba el día de votación, casi nadie daba la victoria al indescriptible Trump. Un conocido estadístico de la Universidad de Princeton, en un ejercicio de altanería intelectual declaraba que Clinton ganaría con un 99% de probabilidades y se peleaba con otros conocido estadístico, Nate Silver, porque era muy conservador al solo otorgarle éste un 71% de probabilidades de victoria a la ex primera dama.
Pero ha ocurrido, el mercado se equivocó y las encuestas no acertaron de forma agregada (excepto la que ha sido más precisa en las últimas elecciones).
Los ciudadanos, expertos y en especial las personas con mayor nivel educativo tanto de la costa pacífica como atlántica de los Estados Unidos, no entendían al votante de Trump. Tan poco los entendían que hacían especiales sobre ellos como quien va a África a averiguar como fluyen las neuronas dentro de un distante indígena mozambiqueño.
Ha ocurrido, es un hecho. Buscarle el porqué es importante en términos políticos y sociales, aunque la respuesta es muy sencilla: amplias capas de la población se ven ignoradas y han ido albergando unas perspectiva cada vez más negativas sobre sí mismos y el futuro.
Da igual si tienen mejor cobertura médica, si viven más tiempo o si pueden viajar a sitios que antes parecían impensables a precios ridículos. Las sociedades cuando sienten que han dado un paso atrás, se sienten mal. ¿Como te sentirías si tuvieras un chef, un masajista y un chófer a tu disposición y de repente te lo quitan? Te sientes mal porque te habías acostumbrado, aunque tu estado actual fuera mejor que antes de tener todo eso.
Los futuros del S&P 500 caen a esta hora cerca de un 4%. Todos los activos y instrumentos de riesgo se repliegan y los defensivos se revalorizan.
¿Qué ocurrirá a partir de ahora? Muchos piensan que es el fin del mundo, pero si nos dejamos guiar por la opinión media podemos encontrarnos con sorpresas desagradable como la de esta noche por aceptar ciegamente esa opinión.
Tal vez los mercados asciendan mucho con Trump ¿por qué no? de momento la perspectiva de subida de tipos se aleja y se acerca la de endeudarse aún más para estimular la economía en el corto plazo. Y a los mercados les encantan los estímulos, la liquidez porque es lo que los mueve.
Es una buena oportunidad para que Estados Unidos demuestre si es verdad que eso del contrapeso de poderes funciona. Mientras tanto, el mundo sigue siendo tan loco como siempre y todo puede ocurrir.
Descargo de responsabilidad por conflicto de interés: el autor de este análisis está o puede estar invertido en los subyacentes e instrumentos mencionados a través del compartimento del fondo de inversión Renta 4 Multigestión / Ítaca Global Macro que asesora a través de su sociedad Ferrer Capital Management.
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