Ayer hablábamos de la crisis de Turquía y la exposición del BBVA al país a través de la propiedad de casi el 50% de uno de los mayores bancos turcos. Pero curiosamente la evolución en bolsa en 2018 de los dos grandes bancos españoles había sido muy similar. Algo que por otro lado no deja ver cómo estarían las cosas de no existir el riesgo turco en BBVA… Normalmente lo que se ve fácilmente es solo la superficie, siempre hay que rascar algo más.
De cualquier manera, hoy @Marangus77, un estratega y gestor en emergentes que se presenta como anónimo en Twitter, ha publicado este interesante gráfico que muestra la exposición del sector bancario de diferentes países europeos a Turquía. Claramente España es el país más expuesto con mucha diferencia, por BBVA. El resto de países tienen una exposición de menos del 5% del capital y reservas de sus respectivos sectores bancarios. El mismo tuitero también dice que Europa tiene poca exposición a Turquía en términos de comercio.
Hoy la lira turca sigue en caída libre, depreciándose entre un 6-7% respecto al dólar (dependiendo en qué minuto se mire). Esta es la foto a 1 año...
¿Qué ha llevado a Turquía a la situación tan delicada en la que se encuentra hoy?
Paul McNamara, gestor de RF emergente en GAM, lo resumía esta mañana en un hilo en Twitter. Básicamente, podríamos hablar de los factores comunes en este tipo de crisis: crecimiento impulsado por fuerte expansión de crédito (siguiente gráfico) que se financia mayoritariamente del exterior (aumento deuda externa) y se filtra especialmente en el sector construcción/inmobiliario...
Fuente: Paul McNamara.
Ello genera un boom en la demanda doméstica con unas exportaciones que no crecen en consonancia, lo que aumenta el déficit por cuenta corriente que debe ser financiado con entradas de capital extranjero (no es lo mismo que EEUU tenga déficit por cuenta corriente que lo tenga Turquía, por cierto). Eso hace muy vulnerable al país ante problemas económicos o políticos adicionales, como está pasando ahora...
Fuente: Paul McNamara.
Pero obviamente los problemas también son para quienes han prestado a Turquía... y ahí entra en juego el BCE, cuyas preocupaciones están aumentando.
A todo esto, por supuesto, hay que añadir, o incluso ha sido parcialmente causado, por Erdogan. Pero recordemos que España vivió un ciclo que compartió características similares a las que hemos descrito. No solo pasa en países con gobiernos dictatoriales.
El mismo McNamara ya en enero 2017 advertía de que Turquía era un candidato a sufrir una crisis como la que está sufriendo ahora.
