Viendo las sorpresas que ha deparado la victoria de Donald Trump en
los mercados bursátiles, hemos considerado oportuno realizar un análisis
sector por sector en Estados Unidos, analizando las consecuencias
económicas ligadas al nuevo presidente electo de la 1ª potencia mundial,
que afectará de forma importante al resto de economías.
Respecto a
los índices generales, el 9 de noviembre amanecíamos con una
preapertura de fuerte volatilidad cayendo con fuerza en un primer
momento los mercados de renta variable tras la sorprendente victoria de
Donald Trump.
Sin embargo a primera hora de la mañana (como se puede ver en el siguiente gráfico) se
daba la vuelta y no solo recuperaba las pérdidas, sino que tras la
primera rueda de prensa del candidato ganador se iniciaba una tendencia
alcista que rompería los máximos históricos de los índices
norteamericanos más importantes.
En
los siguientes gráficos observamos cómo antes de la superación de
máximos históricos, estos índices venían padeciendo el miedo inversor
ante las elecciones, con movimientos bajistas que hacían perder
importantes soportes de corto plazo como el 2.120 del S&P 500:
Mientras
el S&P 500 y el Dow Jones 30 aun tienen algo de recorrido desde el
punto de vista técnico, estamos viendo como el Nasdaq ya habiendo
alcanzado ese objetivo antes de las elecciones se está comportando de
forma algo más errática, rompiendo los máximos históricos el Nasdaq
“Composite” con más de 5.000 activos, pero no habiéndolo hecho por el
momento el Nasdaq “100” con las compañías tecnológicas más importantes
de EEUU como Google o Facebook:
A
nivel de expectativas económicas la reacción positiva de los índices
menos tecnológicos la consideramos racional, ya que con la llegada de
Donald Trump se está dando por supuesto que los sectores industriales y
de construcción podrían verse beneficiados por las primeras medidas
políticas llevadas a cabo a principio del próximo año.
Cabe
destacar el comportamiento del sector financiero, que si bien esta
beneficiado por las próximas subidas de tipos, también se espera que con
la llegada del nuevo presidente la inflación se incremente conduciendo a
la FED a nuevas subidas de tipos con mayor frecuencia de la esperada
hasta ahora:
En
este caso nuestra opinión es que una subida tan vertical suele venir
seguida de un cierto retroceso, y que por tanto la mejor oportunidad de
inversión en estos sectores podría darse en las próximas semanas y no
tanto en este momento.
Otros sector que se está comportando de
forma positiva desde las elecciones son es el de “Consumo Discrecional”,
superando también sus máximos históricos, y el sector
“Telecomunicaciones”, que intenta recuperar la senda alcista tras haber
iniciado una tendencia bajista de corto plazo a finales del pasado
verano:
Los
sectores defensivos no se están comportando bien desde la llegada de
Trump, algo que puede entenderse como positivo para el futuro cercano de
la renta variable, siendo los sectores “Utilities”, “Consumo No
Discrecional”, “Salud” y “Real Estate” los que peor comportamiento
acumulan este mes:
En
los sectores Salud y Real State es en los que más oportunidades
podríamos encontrar en estos momentos, sin haber reflejado un buen
comportamiento como otros sectores pero con perspectivas económicas en
principio positivas para ambos sectores.
Concretamente en el caso
del sector salud se ha evitado la presidencia de Clinton, con ideas
políticas más encaminadas a reducir los beneficios en las empresas de
este sector, aunque la subida de tipos encarecerá en el futuro cercano
la importante financiación que necesitan muchas de estas compañías.
En
Real Estate, el mercado puede entender como negativo una mayor
permisividad en la construcción, aumentando con ello la oferta
inmobiliaria y reduciendo valor a lo existente, sin embargo las
progresivas subidas de tipos favorecerán una mayor permisividad en las
hipotecas, con lo que se facilitará la compra de inmuebles.
Como sectores más desmarcados de las políticas “Trump” por el momento, tendríamos el sector tecnológico (más marcado por las posibles novedades que puedan anunciar en el futuro y sus márgenes en beneficios), y el Energético (más
determinado por el volátil precio del crudo y al que podría sentarle
mal el apoyo de Trump a un posible aumento de la producción en EEUU).
En
este último sector estamos viendo un incremento de volatilidad por los
rumores sobre un posible recorte o congelación de la producción de
petroleo en los paises miembros de la OPEP, con la ultima noticia
procedente de Rusia indicando que aceptaría la congelación si en la
próxima reunion de la Organización se llegara a un acuerdo, lo que a
efectos netos supondría un recorte de 300.000 barriles al día previstos
para 2017.
Un
aspecto que nos gustaría destacar es la situación de la divisa china
que provocó las caídas más fuertes del verano pasado, y que en los
últimos días se esta volviendo a comentar.
Desde el 11 de agosto
de 2015 el Yuan fue devaluado un 3% de forma rápida e inesperada, lo que
provocó miedo a la situación que pudiese estar atravesando el gigante
asiático. Esto hacía retroceder al Dow Jones 30 hasta un -12% en los
días posteriores, lo que suponía la mayor caída bursátil desde la crisis
de deuda en 2011.
Lo que podemos destacar con el siguiente gráfico es la que parece fuerte depreciación del Yuan desde entonces, de más de un 7% frente al dólar, y la poca importancia que se le ha dado como causa de las caídas bursátiles en el último año. Sin embargo contra el Euro no ha sufrido más que un 1,50% de devaluación, lo que realmente se ha revalorizado es el Dólar.
Dada
la ideología de nuestra empresa, desde Aspain 11 Asesores Financieros
no recomendamos a perfiles que no sean muy arriesgados intentar
aprovechar las sorpresas macroeconómicas en el corto plazo, donde existe
mucha incertidumbre, y centrarse más en un modelo de inversión a medio
plazo que aproveche estas circunstancias políticas, cambiando el asset
allocation fijándose más en las consecuencias macroeconómicas que puedan
traer consigo, como la inversión en sectores como el Industrial (ponderando un poco más en infraestructuras) o el Financiero norteamericano para el próximo año.
Un cordial saludo.