Como cada año por estas fechas, llegan los anuncios publicitarios que se repiten más que el bolero de Ravel, como los de la Lotería de Navidad, los de los perfumes, los de los turrones y los de los planes de pensiones. En consecuencia en www.Zonadebolsa.es nos hemos acordado de refrescar la memoria a nuestros lectores, pero sin asustar a nadie de que no vayan a cobrar las pensiones públicas o llevando a nadie a la mesa de un banco a suscribir un plan, solo queremos ayudar a tengáis en cuenta varias ideas sobre el tema.
Las aportaciones a los planes de pensiones privados se pueden hacer durante todo el año, y de hecho muchos suscriptores de los planes de pensiones fijan una cuota mensual, y van haciendo sus aportaciones poco a poco a lo largo del año, con lo que el efecto sacrificio se diluye y parece que son menos gravosa las aportaciones.
No obstante cuando llegan estas fechas las entidades bancarias y las gestoras independientes de fondos de pensiones, hacen las campañas publicitarias porque hay muchas personas que no hacen aportaciones regulares y precisamente antes de 31 de diciembre hacen su aportación puntual. Pero también las hay dentro del grupo de las que aportan periódicamente, las que a la vista de los ingresos previstos para el año, complementan hasta las aportaciones máximas que legalmente les corresponde aportar. Pensemos en muchos profesionales libres que tienen unos ingresos netos con bastante variación de unos años a otros y las aportaciones las hacen lo más ajustado que pueden a la máxima desgravación fiscal.
Pero concretemos algo sobre lo que es un fondo de pensiones, por si alguien lo desconoce. Los fondos de pensiones son patrimonios constituidos por muchos planes de pensiones. Los aportantes suscriben participaciones el fondo, con el fin de realizar una inversión financiera y mantener ese patrimonio y sacar una ganancia para que cuando llegue la hora de su jubilación complemente la pensión pública que les corresponda. Aclaramos que antes de la jubilación se pueden rescatar los planes de pensiones, pero esas aclaraciones las dejamos para los que venden los citados planes, que no queremos hacerles todo el trabajo.
Si nos fijamos en la definición que acabamos de dar de los fondos de pensiones es muy parecida a la de los fondos de inversión mobiliaria, pero hay varias diferencias que conviene aclarar, pues habrá personas que les sea indiferentes invertir en uno u otro fondo, pero otras personas no.
Resaltemos los parecidos y diferencias con los FIM. Por ejemplo, un parecido es que se pueden elegir el tipo de riesgoen los que invierta el fondo de pensiones. Así los hay que invierten su patrimonio en renta variable en su totalidad, en renta fija, mixtos de todas las proporciones y en el mercado monetario. Con lo que cada inversor se arriesga según quiere y consecuentemente la rentabilidad será muy diferente según el tipo de riesgo elegido, como en cualquier otra inversión.
Otro parecido es que se pueden traspasar de unos a otros, no solo dentro de la entidad gestora, sino también a otras entidades bancarias o gestoras, salvo escasas excepciones que suelen darse cuando la aportación la realiza el trabajador y la empresa, pero lo normal es libertad de cambio.
Otro parecido es que en unos y en otros podemos utilizar una estrategia durmiente y alegrarnos en las subidas y padecer las caídas en los dientes de sierra, o por el contrario podemos entrar en las subidas pasando a fondos de renta variable y salir en las bajadas pasando a mercado monetario y así sucesivamente, esto es, estableciendo una estrategia beligerante, según explicábamos en dos artículos publicados en estas páginas y en Zona de Bolsa hará un mes aproximadamente.
También se parecen en que las entidades que venden estos productos, tanto FIM como PP, tienen que someter al inversor a test de conocimientos y de conveniencias, para evitar algunos abusos que se han producido recientemente y que todos conocemos.
Veamos algunas diferencias, si nos fijamos en las aportaciones, en los fondos no tienen ninguna transcendencia fiscal, por el contrario en los planes de pensiones sí que tienen y mucha. En principio se deduce de la base imponible (ingresos declarados) procedentes del trabajo y de las actividades económicas, pero con ciertos límites que han ido variando cada año. Eso os lo explica con detalle vuestro asesor fiscal.
Otra diferencia muy importante es a la hora de rescatar, pues los fondos de inversión mobiliarios están sometidos a la Renta como ganancias patrimoniales, mientras que los planes de pensiones, el tratamiento es de rendimientos del trabajo, tanto por el titular como por sus herederos.
Otra diferencia es en cuanto a la gestión, al menos los fondos de pensiones españoles, suelen ser siempre más conservadores que su réplica en fondos de inversión mobiliaria. Me refiero que dentro del banco DFG si tiene un fondo de inversión que se llama Acciones europeas y un plan de pensiones del mismo nombre, donde describen para los dos las mismas características, a la hora de ver los rendimientos, se observa que los FIM son más agresivos y es lógico porque las gestoras tienen más miedo de que una perdida en los planes que en los fondos.
Otra diferencia más, es que al descontar las aportaciones de los ingresos a declarar, de momento ya estamos aplazando la tributación en Renta de las aportaciones hasta al menos la edad de jubilación, lo que financieramente supone una importante ventaja, que no tienen los FIM.
Otra diferencia, que nadie menciona, es en el Impuesto de Sucesiones, que todavía queda y muy gravoso en buena parte de España. Así los FIM hay que meterlos con el resto de los bienes mientras que los planes de pensiones pasan a los herederos y a medida que estos, vayan haciendo el correspondiente rescate lo irán integrando en la Renta como rendimientos de trabajo.
Antes de cerrar el artículo quiero hacer mención al miedo que nos meten con las pensiones públicas, que no sabemos si cobraremos. Bueno yo creo que sí que cobraremos, aunque con menor generosidad que las actuales, pero como las circunstancias económicas y de edad son muy diferentes de unas personas a otras, cada uno debe plantearse si aporta y cuanto a su plan de pensiones, pues una recomendación genérica no tiene sentido.
Por ultimo haré una mención a los fondos garantizados de estos años de atrás que se han acabado, pues en su momento lo tuvieron muy fácil. Cuando la Deuda del Tesoro estaba al 5% podían ofrecer un 3% ó 3,50% al cliente, los gestores principalmente bancos, solo tenían que ir al Tesoro a comprar y ganarse un 1 ó 1,50% de comisión cada año esperando a que cumpliera su vencimiento. Ahora con los intereses negativos lo tienen más crudo, pero lo siguen intentando para atraer a los clientes. Sin ir más lejos está noche cenando ha salido un anuncio de una entidad bancaria ofreciendo un 4% por las aportaciones o traspasos, pero no hablan de rentabilidad de los últimos años.
Nuestro lema siempre ha sido que LA BOLSA ES IMPREDECIBLE, pero no anárquica, y cada día creemos más en él.