No sé cuánto tiempo llevo por aquí en Inbestia.com disfrutando del placer de la comunicación. Los que hayan leído alguno de mis comentarios sabrán que soy un apasionado del mercado y de los gráficos. Entre otras cosas, porque llevo tanto tiempo mirando estos últimos que casi podría decir que empiezo a extrañar todo lo demás. Tanto es así que es como si me hubiera acostumbrado a medir, proporcionar, calibrar, valorar o comparar todo lo que he vivido y vivo no solo con los instrumentos y medios que lo hace todo el mundo sino además, y casi automáticamente, como factor-es de influencia en un gráfico.
Sin embargo, estos primeros artículos de mi vida se han presentado hablando de cualquier cosa menos de Análisis Técnico o Análisis Chartista. Es como su hubiera tenido que pasar cierto tiempo de vida y cierto tiempo de vida en gráfico para que fuera posible, en un momento dado, tener la sensación de que las dos pudieran haber llegado a confluir. Y con esta sensación de haber llegado a sentirme el río Nilo, o el Amazonas, es con la que he escrito últimamente cosas como que "es prácticamente imposible que Europa entre en recesión", o "yo la única duda que tengo es si la bolsa va a subir hasta Júpiter o hasta Marte".
Dicho esto, mi impresión es que el escenario conseguido por Europa en estos últimos años, dentro del global más amplio, ha desembocado en un momento en el que hay innumerables valores europeos, y también españoles, en los que la relación riesgo/beneficio --utilices el sistema, el plazo, o el tipo de análisis que utilices -- convierte a la bolsa en estos momentos en el mejor de los mundos posibles: no doubt, it´s time to play.
Un saludo.
