El reloj de la inflación en EEUU está muy cerca de señalar “subida de tipos de interés”. En ese mismo cuadrante se situó el reloj del Área euro en abril de 2011, justo antes de las subidas de tipos del BCE. Pero antes de adentrarnos en los potenciales impactos de este cuadrante sobre variables financieras (EUR/USD, precios de renta fija, cotizaciones bursátiles), veamos cómo está construido este reloj de la inflación.
Empecemos por el eje vertical. En ese eje dibujamos el índice GdC inflación, una variable que construimos con el objetivo de tomar el pulso a las presiones sobre la estabilidad de precios. Los inputs del índice son: datos del mercado laboral, utilización de la capacidad productiva, índices de precios al consumo y los componentes de precios de las encuestas del ISM y la Comisión Europea. Un índice GdC Inflación en 0 recoge un entorno de precios en línea con la media de las últimas décadas (2%). Si el índice está por encima (debajo) de 0 estará alertando de un entorno con presiones al alza (baja) sobre la inflación. Actualmente, tanto en EEUU (-0,23) como en Área euro (-4,94) los índices respectivos de GdC inflación se sitúan por debajo de 0.
Ahora el eje horizontal, donde dibujamos una medida de tendencia del GdC inflación para observar si está acelerando o desacelerando el índice. Para ello lo que hacemos es contrastar la media de los últimos 6 meses del GdC inflación con la media de los 6 meses anteriores. Si esta diferencia es positiva (negativa) la tendencia será de aceleración (desaceleración). Hoy, en EEUU (+1,26) y Área euro (+0,47) la tendencia está en aceleración.
Por lo tanto, al cruzar la información de los dos ejes observamos que:
- EEUU: el índice GdC inflación está en los niveles más altos (-0,23) desde el inicio de la crisis en 2008/09 y a un paso de situarse por encima de 0. Si a ello le sumamos una tendencia en aceleración (+1,26) el resultado es el de un punto muy cerca de un cuadrante donde es muy habitual empezar a ver subidas de tipos en tipos de interés.
- Área euro: el índice está muy alejado del 0, que recoge la media de inflación de las últimas décadas, y se sitúa en -4,94. La tendencia está en modo “aceleración”, una buena noticia para rebajar las probabilidades de un escenario deflacionista severo. Pero insuficiente, de momento, para llevar al índice a las proximidades del 0.
Para finalizar, algunas reflexiones sobre el potencial impacto en variables financieras:
- Diferenciales deuda pública: las proximidades del reloj EEUU al cuadrante de subida de tipos de interés podría elevar la presión sobre la curva de rentabilidades USD. Tanto en el tramos monetario (LIBOR USD) como en la curva riesgo tesoro. Una deriva al alza en rentabilidades que contrastaría con el anclaje de curvas con referencia EUR, donde el reloj de la inflación está en una fase del ciclo muy diferente y alejada de potenciales subidas en tipos de interés. El resultado sería una ampliación de diferenciales LIBOR USD – LIBOR EUR y también en curva EEUU – curva Alemana. Estrategias relativas encajarían bien en este escenario.
- EUR/USD: el diferencial de tipos de interés es una de las múltiples variables que afectan al cruce EURUSD. Una ampliación de spread en curvas EEUU - EUR es un factor apreciador para USD, y podría situar en el 1,28 – 1,30 un objetivo a corto y medio plazo.
- ¿Y para la Bolsa? Para esta respuesta debemos completar el análisis de la inflación con el del crecimiento. En el siguiente post profundizaremos en el reloj del crecimiento del Área euro y EEUU, lo cruzaremos con la información de inflación y sacaremos algunas conclusiones.