Pero sí genera grandes incertidumbres. Un cisne negro es un fenómeno que puede darse pero que nunca se ha dado antes o bien un fenómeno que pudiendo darse y habiéndose dado antes fenómeno similar (como una guerra) era inesperada y sus consecuencias económicas y sociales totalmente impredecibles. En esta definición puede encajar perfectamente la situación en Siria. Al cabo, es una guerra relativamente inesperada y cuyas consecuencias pueden expandirse y alcanzar cotas catastróficas para el orden mundial. Lo que ocurre es que no cumple con toda la definición de cisne negro, por lo que debemos de ser rigurosos al hablar de Siria y no hablar de ello como si de un cisne negro se tratara. Para empezar, es una guerra que ya comenzó hace dos años, si bien la presencia de Estados Unidos, de la OTAN o de quienes participaran cambiaría todo el escenario, no es una situación novedosa ni inesperada. Que los agentes económicos no se hayan preparado para este más que posible escenario (una intervención militar exterior) es más culpa suya que de la "sorpresa" de tal circunstancia. Para seguir, porque las consecuencias directas sí son, más o menos, conocidas. Aquí es donde conviene distinguir entre "fenómeno generador de incertidumbre" y "cisne negro". ¿Cuáles son las consecuencias económicas derivadas de la intervención exterior en Siria? Pues las que estamos viendo estos días: alza de hidrocarburos, alza de restantes materias primas y alto grado de incertidumbre en los parqués que podría estar generando presión bajista (si bien esto no conviene, a su vez, afirmarlo puesto que la baja volatilidad característica de agosto unida a la media histórica de año postelectoral podrían estar detrás de ello).
Todas estas consecuencias son, por tanto, parcialmente previsibles y no deberían sorprender ni a propios ni a extraños. Incluso si las mismas se prorrogasen en el tiempo de manera continuada (por ejemplo, que el barril de petróleo se mantuviese durante más de 12 meses en $150) no podrían ser calificadas de "cisne negro". Un barril de petróleo, siguiendo el ejemplo, a $150 sería un gran impacto para toda la economía mundial: quiebras empresariales por el cuello de botella generado, deflación en commodities, recesión y puede que incluso defaults estatales. Todo ello es un escenario calamitoso pero no se corresponde a no haber podido prever este alza si no a no haber proactuado contra la misma, cuando era posible. Al cabo, el inicio de la guerra en Siria ya nos debería haber puesto a todos sobre aviso de que esto podría ocurrir. Llevamos muchos demasiado tiempo ya, sin ser profesionales de esto, alertando sobre la delicadísima situación que se vive en Oriente Próximo y la alta posibilidad de que explote. Que nadie haya cubierto sus carteras, o asegurado sus balances, contra una explosión del barril es sólo su responsabilidad. Ejemplo de ello lo tendríamos en Israel. Israel sabe, por su posición geográfica, que en cualquier momento el antisemitismo dominante puede alzar la cabeza blandiendo cualquier excusa infundada y atacar al estado hebreo. Y como lo sabe, tiene diseñado un complejo aparato militar y de servicios secretos para que, llegado el momento, su país se muestre fuerte y seguro. ¿Es difícil imaginar, verbigracia, una invasión egipcia mañana mismo en Israel desde el Monte Sinaí? Por supuesto que es una situación impensable pero no descabellada, lo que invita a que Israel se cubra.
Ahora bien, que la situación sea previsible y que la no cobertura por parte de los agentes sea sólo responsabilidad de los mismos no implica que puedan existir derivadas (y, por supuesto, pueden existir) que sí sean cisnes negros aunque el acontecimiento primigenio no lo fuera. En el caso citado anteriormente de Israel, si Estados Unidos y Occidente no apoyase necesitando ayuda podría calificarse de cisne negro. En el caso de Siria, que el alza de petróleo lleve a una suspensión de pagos de Estados Unidos podría ser un gran cisne negro. ¿Esto nos invita a calificar al fenómeno inicial - guerra en Siria - como cisne negro? No, sus derivadas lo serían pero no el inicial ya esperado. Lo que no sabemos que podría pasar, el terreno de máxima incertidumbre, es el cisne negro.
Frente a lo que sí sabemos que puede pasar y sí sabemos que puede genera ciertas derivadas, no hay cisne negro si no - y seguimos con Taleb - hay fragilidad. Si el sistema económico no aguanta un alza de hidrocarburos cuando esta era previsible tal vez sea porque dicho sistema se ha fraguado sobre un descalce de plazos y riesgos que canaliza recursos a largo y descapitaliza inversiones en bienes de consumo, provocando el alza en sus precios (vean a la Fed o al BCE - aunque éste tome como colaterales - como vuelven sus balances ilíquidos en el largo plazo lo que como dijo Cantillon acaba impulsando el alza de las materias primas cuando la inflación se filtra en la economía). Esta situación, por tanto, estaría provocada a conciencia por Bancos Centrales e impulsada, a posteriori, por Siria pero no es una situación novedosa. Simplemente, el sistema lo hemos construido sobre unos pies de barro que nos debilitan frente al exterior en demasía. Incluso los más anti-frágiles del panorama internacional (Alemania o Estados Unidos) tienen esta flaqueza.
¿Qué podría ser un cisne negro? ¿Una salida de Grecia del €? Sería, de nuevo, un buen candidato pero si ello golpea con crudeza a las finanzas españolas, como seguro que haría, es culpa de tener en La Moncloa a un manirroto irresponsable y torticero que no ha previsto esta situación. Sí, un cisne negro podría ser que este irresponsable atacase a Reino Unido en un arrebato populista por Gibraltar (como hiciera Argentina con Las Malvinas), un cisne negro sería la quiebra de Banco Santander o de Caixabank, sería el abandono de Alemania del € o que Draghi mañana subiera los tipos de interés al 7% y dijera que no pasará ni media a los países despilfarradores del sur. Todo ello, impensable y difícilmente asumible, serían cisnes negros de consecuencias casi impredecibles. Pero no lo es Siria.
Dicho todo lo anterior, no hay ni un sólo beneficio social, económico o político en la intervención en Siria. Está demostrado que las intervenciones generan mayores problemas que los que intentan solventar (así lo probó Alberto Benegas Lynch (h) en su libro Estados Unidos contra Estados Unidos) pero aunque pudiera tener un efecto beneficioso (como sostienen muchos keynesianos) nunca podrá compensar la pérdida de vidas humanas, el derroche en la industria de la muerte y la atrofia que sufren las libertades de todos los ciudadanos a raíz de esta intervención.
No es un cisne negro Siria, como he dicho, alguna derivada inesperada sí podría aparecer pero el hecho en sí no lo es.
Es curioso ya que siempre he entendido y tú explicas aquí que un 'cisne negro' es un hecho esencialmente impredecible y previamente inexplicable, y del que luego que ocurran se formulan todo tipo de teorías empiristas para darle un sentido 'razonable'.
Por qué osas en predecir entonces un 'cisne negro?
Un saludo.
En realidad alguien si puede predecir un cisne negro ya que la idea es que sea un evento de gran impacto, que no fue previsto por una enorme mayoria, pero que esa mayoría a posteriori racionaliza y entiende que era completamente predecible. (La clave está en la mayoría).
De todas maneras, en los medios el término cisne negro se iguala a "evento de gran impacto", a veces tambien lo dicen en el sentido de que la mayoría "no lo ve" pero en casi todos los casos se olvidan de la parte de "y se racionaliza a posteriori".
Por otro lado la guerra de Siria o la entrada de EEUU era posible desde hace mucho tiempo. Se veía que estaban buscando una justificación. Para entender esto solo había que leer entre líneas la prensa internacional.
Hugo: A a lo largo del libro de Taleb (que me compré y leí hace un par de años por la relevancia popular en lo financiero… y me costó un huevo acabarlo porque se vuelve un tostón repetitivo); No recuerdo que en ningún momento se habla de mayorías borregas y cegadas, y minorías deductivas e intuitivas (capaces de predecir los cisnes negros).
Un ‘cisne negro’ es eso: esencialmente impredecible por nadie, porque se da como cuando los colonos ingleses llegaron a Australia por primera vez y comprobaron que los cisnes de plumas negras existían, contrario a lo que se había sabido toda la historia.
Desde la aparición de Jesucristo en la humanidad, el descubrimiento de América, la invención de la máquina de vapor, la ascensión de Stalin o Hitler al poder de 2 superpotencias del s.XX, la aparición de internet, el 11-S… todo ello son cisnes negros eminentemente por su impredictibilidad, y por el enorme impacto posterior en la humanidad.
El cisne negro refuta a todas las leyes anteriores del empirismo como la relación causa-efecto, en la que luego los racionalistas eruditos tratan de explicar los ‘cisnes negros’. No por la mayoría, como tú dices Hugo.
La idea de Taleb es muy original; no soy yo quien decidir si está en lo cierto. A los medios les ha encantado porque da una explicación a las crisis financieras que se vienen sucediendo desde el crack de 1987, que ya van unas cuantas, y nadie sabe darles una explicación de fundamento.
Aunque para mí, como utilicen el término los medios me la sopla bastante, pues estos obedecen más a un código de audiencias, ideas mainstream y modas, dar opinión pública y calmar a las masas.
Le hice el comentario a David porque desde que lo conozco me parece un joven muy inteligente y exigente de gran interés; e intentaba provocarle por lo que me ha parecido esta vez, un uso muy vulgar.
Guerra en Siria? El mero hecho de formular si el evento va a ser un ‘cisne negro’ en la historia, de por sentado que no lo va ni lo puede ser. Oriente medio es un polvorín ya sea por la lucha milenaria entre tribus de diferentes pueblos, por el Islamismo radical que mete a Dios como excusa de odio y guerra, la ausencia de democracia o diferenciar entre Estado y Religión, el papel del pueblo israelita en su papel de víctima enemigo de todos y con patente de corso nortemericana, la tenencia de armas químicas o nucleares, pero sobretodo el oro negro: ser los árabes los principales productores de petróleo, la energía en la que se sustenta nuestro mundo capitalista.
Las guerras en esa zona cuna de la civilización, son siempre un espectáculo y un peligro de desbarajuste total.
Oye, me voy pa la playa, que me enrollo como una persiana! Salud!!!
No se donde pero leo mucho a Taleb (aparte de sus tres famosos libros) y lo explica en esos términos.
Es lógico, hay gente para todo, hasta algunos especialistas a veces preveen que va a ocurrir.
Buen finde
Efectivamente no parece un "cisne negro", en realidad ahora ancaja el hecho de que UK enviara a su armada al Mediterráneo.
Si recordais hace unos días cuando empezó todo el follón de Gibraltar, se publicaba en la prensa española que la armada inglesa zarpaba y haría escala precisamente en Gibraltar. Parece que ya en ese momento se estaba cociendo algo (aunque finalmente UK, parece que no formará parte de un inmediato ataque)