Siempre que hablamos de especulación a la gente le viene la imagen de un joven, algo loco y algo genio, que tomando decisiones muy arriesgadas y fuera de la inteligencia común, compra acciones de empresas que se revalorizan muy rápido y muy fuerte. Al poco son ricos, mucho, y se entregan a las veleidades más extrañas y superfluas. Pero esta imagen cinematográfica no es la esencia de la especulación.
La especulación se encuentra en todo, cualquier proyecto que hagamos está basado en ella. Nosotros empezamos cualquier actividad en el mundo de las ideas, y mucho antes de que la llevemos a la práctica, ya le hemos calculado el tiempo necesario y los rendimientos que nos va a dar.
La Vida es pura especulación. Nunca tendremos todos los datos necesarios para tomar una decisión.Siempre tiene tanto de esperanza como de razón. Por eso es un error intentar exigir a los comportamientos de los hombres que lo hagan como si fueran una ciencia exacta. La vida es ante todo un arte. Y como tal tiene mucho de creatividad e imaginación.
Desde la elección de nuestra pareja, al trabajo que desarrollaremos o qué acción compramos siempre nos quedará un margen muy grande de aleatoriedad. Unas veces ocurre lo que hemos previsto, y otras, ni se le parece.
La especulación ha sido el motor que ha hecho avanzar a la humanidad, su relación con la innata curiosidad y con el espíritu de aventura. La capacidad de asumir riesgos y afrontar lo imprevisto. Durante milenios hemos especulado con nuevas ideas, nuevos proyectos, mientras estemos vivos siempre nos quedará el futuro. Montamos empresas, emprendemos viajes, invertimos dinero. La vida es variación, nunca será estable. En el tiempo que caminemos sobre la Tierra veremos cambios sorprendentes que no imaginábamos, y si se tiene la suerte de vivir lo suficiente, el mundo que dejará sera muy diferente de aquel en el que nació. Los hombres son todos especuladores, la diferencia con nosotros es que no le tenemos tanto miedo a esa palabra.
Aquí relato algunos ejemplos de esa rama especulativa:
Hace muchos, muchos años, el lugar de caza de generaciones se está agotando. Apenas si se atrapan animales y los que caen son cada vez más pequeños. Sin embargo, la mayoría de los cazadores no se atreven a cambiar de sitio. Prefieren la seguridad de lo fijo aunque sea poco. Unos cuantos, con espíritu aventurero, emprenden la búsqueda de nuevos territorios. No saben si merecerá la pena pero aún así lo intentan. Tras múltiples fracasos por fin localizan un nuevo lugar colmado de animales, y encima los demás no se han atrevido a seguirlos y tienen a su disposición toda la caza.
Ahora estamos en la Grecia clásica. Un filósofo cultiva el conocimiento y observa a la naturaleza. Los años anteriores han sido muy abundantes en aceite y los precios se mantenían bajos. Este año ha llovido bastante y la gente espera también otra buena cosecha, pero él ha estudiado los olivares y sabe que después de tanto tiempo de árboles cargados de fruto toca el descanso. Se llega a los propietarios y les ofrece comprar toda la producción que den sus cultivos a un precio fijo, a ellos les parece un buen negocio porque es más alto de lo que se ha pagado en los años anteriores. Finalmente, como pensó, la cosecha es baja y los precios se disparan y el ha comprado toda la cosecha a un precio bajo.
Séneca, el gran filósofo español, está en la cúspide del Imperio. Roma se está convirtiendo en la capital del mundo. Mientras escribe sus Cartas, aprovecha y compra inmuebles en la ciudad. Al poco, la demanda de viviendas en Roma se dispara y el obtiene grandes plusvalías.
El Imperio español está en su apogeo y Ponce de León se ha hecho rico, pero es viejo. Se lo juega todo a una carta y emprende la búsqueda de la Fuente de la Eterna Juventud, no lo logra y muere en el intento. Pero descubre La Florida.
Holanda es una potencia comercial, su sistema financiero es de los más modernos del mundo. Pero descubren los bulbos de tulipán... Y pasan a la historia de las grandes burbujas especulativas.
Año 2008, ¿colapsará el sistema financiero? Finalmente se produce una subida de diez años seguidos en la bolsa americana.
2019. Las bolsas americanas han subido mucho, los tipos empiezan a subir y los analistas temen una recesión. Para colmo las bajadas se convierten en montañas rusas... ¿Qué pasará? ¿Qué haremos?. Una vez más no tendremos más remedio que especular con el futuro y analizarlo una vez pasada la tormenta.
En el próximo artículo probaré a hacer un análisis especulativo, veremos en qué acierto y en qué me equivoco. Pero cualquiera de vuestras opiniones serán igualmente válida y seguro que alguno dará con la clave.