En este informe trataremos de explicar de forma profunda el funcionamiento del Fondo de Reserva de la Seguridad Social,
su estado actual, las problemáticas que la han llevado a esta
situación, y nuestras recomendaciones de cara al ahorro a largo plazo
(jubilación).
¿Cómo funciona el Fondo de Reserva?
El
Fondo de Reserva de la Seguridad Social, comúnmente conocido como
“hucha de las pensiones”, es un fondo soberano de inversión creado por
el Gobierno de España en el año 2000, cuyo objetivo es garantizar el
sistema público de la Seguridad Social.
La Seguridad Social tiene
el llamado Fondo de Reserva, el cuál es creado para guardar el superávit
y poder hacer frente con él a futuras emergencias en materia de
prestaciones contributivas. Por lo tanto, si en un momento dado los
ingresos de la Seguridad Social no fuesen suficientes para satisfacer
sus gastos, se accedería a coger dinero del Fondo de Reserva y así
mantener el equilibrio financiero del sistema de pensiones.
Los
ingresos van estipulados en forma de cotización sobre todos los
trabajadores en España, tanto trabajadores por el Régimen General como
trabajadores por el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
Ambos contienen un tipo mínimo y máximo de cotización, y en función de
la “Categoría Profesional” en la que desarrolle su profesión tendrá una
base mínima y máxima, siendo la máxima de 3.642,00 € para ambos
regímenes.
Dicha cotización va a parar a la Seguridad Social y
sirve para dar cobertura a jubilación/pensiones, sanidad, desempleo,
incapacidad, invalidez, etc.
Como se comentaba anteriormente, en
el caso de que el gasto sea superior al ingreso, se podrá acceder al
Fondo de Reserva y coger parte del superávit generado. Esta cantidad
hasta 2012 sólo podía ser del 3% del gasto hecho en pensiones
contributivas, pero posteriormente ese límite se suspendió y se podría
disponer durante cinco ejercicios del dinero que se necesite.
Otro
punto importante del que hay que ser conscientes es que el sistema
público de pensiones está basado en un sistema de reparto, lo cual
quiere decir que es una hucha pública de la que se obtiene prestación en
caso de estar jubilado. Por lo tanto las prestaciones de los
pensionistas se financian mediante las cotizaciones de los empleados en
activo, y será sostenible siempre y cuando esté compensado el número de
cotizantes y pensionistas.
Estado actual del Fondo de Reserva
Nos
encontramos en un momento en el que la hucha de las pensiones está en
boca de todos, un momento de confusión y de incertidumbre para muchos
trabajadores y pensionistas en España que no saben cuánto van a cobrar,
ni siquiera si van a recibir algún tipo de prestación tras su salida del
mercado laboral.
Pero, ¿cuál es el estado actual del Fondo de
Reserva de la Seguridad Social? ¿Cuáles son los problemas que lo llevan a
éste punto de inestabilidad?
Lo cierto es que en 2011 llegamos a
la cifra récord de 66.815 millones de Euros desde que se creara en el
año 2000, llegando hasta los 15.020 millones de Euros el 19 de Diciembre
de 2016, es decir, una disminución del 77,5 %. Además este año 2016 se
han sacado del fondo de reserva 20.136 millones, la mayor cifra retirada
desde su constitución, y un 50% superior al año 2015.
Tras
conocerse ésta noticia, el Secretario de Estado de Presupuestos,
Alberto Nadal, afirmó que cuando se agote la hucha el déficit de las
pensiones se financiará con deuda del Estado emitida por el Tesoro. Al
mismo tiempo con el objetivo de reducir esas financiaciones mediante
deuda del Estado, este año 2017 se incrementarán las cotizaciones
mínimas y máximas. La mínima se incrementará un 8% hasta los 1.152,80 € y
la máxima un 3% hasta los 3.751,26 €.
A continuación vamos a
analizar algunos de los problemas que han podido llevar al descenso tan
grande al Fondo de Reserva de la Seguridad Social.
- Inversión de la pirámide poblacional:
Es
uno de los puntos más importantes para sostener las pensiones, dado que
si el gasto es superior al ingreso es imposible garantizar la eficacia
del sistema. Por lo tanto para que sea sostenible y estable sería
necesario que el ingreso llegase a cubrir como mínimo el gasto.
También
hay que tener en cuenta que la prestación dada a un pensionista es
superior a la cotización de un asalariado, así que se necesitan más
asalariados que pensionistas.
En el siguiente gráfico se puede observar el cambio habido desde 1970 hasta ahora, y lo que se espera hasta 2050.
Como
se puede comprobar, en 1970 cada seis trabajadores mantenían a un
pensionista, lo que generaba una situación cómoda y sostenible. Entre
los años 1958 y 1977 se dieron un gran número de nacimientos en España,
llegando a nacer casi catorce millones de niños. A ésta etapa de
numerosos nacimientos se la denominó baby-boom y se podría
decir que es la causante de la inversión de la pirámide poblacional, ya
que seguidamente la natalidad descendió mucho generando una gran
diferencia de población entre generaciones siguientes.
En el siguiente gráfico (2008) se puede ver como la generación baby-boom crece
y se sitúan en rangos de edad entre 30 y 39 años. En ésta época tres
trabajadores mantenían a un pensionista y la situación seguía siendo
sostenible.
En 2025 se espera que los baby-boom lleguen a
la edad de jubilación y sea más complicado mantener las pensiones,
debido a que se estima que por cada cotizante habrá un pensionista.
La
baja natalidad en los últimos años genera una mayor incertidumbre a la
sostenibilidad de las pensiones, ya que como hemos visto anteriormente
es necesario tener más cotizantes para sostenerlas. En 2016 el número de
hijos por familia en España se sitúa en 1,3, un tanto inferior al dato
de 3 hijos por familia que se dio en la etapa del baby-boom.
La
mejora de las condiciones de vida ha hecho que cada vez más personas
vivan durante más tiempo y aumente el número de personas mayores, lo que
se traduce en una necesidad de mayor capital para mantener sus
prestaciones. A simple vista no parece que esto sea viable para el
Estado porque por el momento no hay superávit, y esto nos llevará a
sucesivas subidas de edad para poder jubilarse.
Si la
esperanza de vida al nacer en 1900 era de 35 años, en 2016 se sitúa en
82,7 años, siendo de 85,4 años en el caso de las mujeres y de 79,9 años
en el caso de hombres.
A
los problemas vistos anteriormente hay que sumarle la elevada tasa de
desempleo que hemos vivido estos últimos años, aunque bien es cierto que
se está reduciendo, lo cual es un gran síntoma.
El desempleo no
es negativo únicamente porque conlleve a menos afiliados a la Seguridad
Social (menos cotizaciones), sino que también incrementa el gasto en
ayudas y reduce el importe acumulado en el Fondo de Reserva de la
Seguridad Social.
Vehículos de ahorro
Nos
encontramos en un mundo que experimenta un cambio constante en todos
los sentidos, y en particular en el mundo financiero, donde sucede lo
mismo. En la actualidad se mantienen y nacen diferentes vehículos de
inversión que podrían usarse para ahorrar para la jubilación, pero la
pregunta que todos nos hacemos es: ¿cuál es el producto ideal para mí
para ahorrar para mi futuro?
En éste apartado nos centraremos en
dar recomendaciones de ahorro para los distintos tipos de clases de
personas, buscando maximizar las rentabilidades acorde a su perfil de
riesgo y sus beneficios fiscales, y minimizando las tributaciones y
comisiones.
Los vehículos de ahorro escogidos son los Planes de
Pensiones y los Fondos de Inversión, los cuales comparten algunas
características y se diferencian en muchas otras.
Planes de Pensiones
Probablemente
son los productos más utilizados y los más conocidos por los españoles,
pero quizás no los más aptos para cualquier tipo de ahorrador. En
primer lugar se desglosarán las características principales de dichos
vehículos de ahorro y, seguidamente se propondrán Planes de Pensiones
escogidos minuciosamente para cada perfil de inversor, donde por último
veremos en qué caso compensa tener un Plan de Pensiones.
Características
- Productos
diseñados exclusivamente para el objetivo de jubilación, pudiendo
rescatar las aportaciones que tengan una antigüedad mínima de 10 años a
contar desde el 1 de enero de 2015. Además, en casos especiales como
desempleo de larga duración, invalidez total y permanente, fallecimiento
o enfermedad grave, se podrá acceder al capital acumulado en el Plan de
Pensiones.
- Se puede obtener
un ahorro fiscal debido a que son desgravables. Digamos que dichas
aportaciones se pueden usar anualmente para reducir el IRPF que debemos
pagar, y el límite será la menor de estas cantidades: 8.000 € o el 30%
de los ingresos brutos del trabajo. Por otro lado, son productos que en
el momento del rescate tributarán como Rendimientos del Trabajo por el
total de los derechos consolidados, es decir, deberemos de pagar
impuestos tanto por lo aportado como por lo beneficiado. En la mayoría
de los casos no compensará la desgravación anual comparada con la
tributación que sufrirá al ser rescatado.
- Hay
dos tipos de rescates posibles que hacen que varíe mucho la cantidad de
tributación final. Por un lado está el Rescate Total una vez nos
jubilemos, en el que habrá que tributar por el 100% de los derechos
consolidados por tramos del IRPF, y por otro lado el Rescate en forma de
Renta, que tendrá beneficios fiscales y se tributará en menor medida.
Sería conveniente hacer un estudio de cada caso particular para saber
cuál compensa más.
Recomendaciones
Las
recomendaciones de Planes de Pensiones que sugerimos a continuación
están basadas con total objetividad e independencia, y sobretodo hemos
tenido en cuenta el binomio rentabilidad-riesgo, entendiendo como riesgo
una alta volatilidad.
RENTA FIJA: Diseñado para
ahorradores poco arriesgados, los cuales buscan una inversión estable y
sostenible en el tiempo, sin muchos sobresaltos en cuanto a subidas y
bajadas del capital.
Plan Pensión Creciente PP:
Volatilidad 1,06% / Ratio de Sharpe 1,10 / Rentabilidad 2,04%
Renta 4 Renta Fija PP:
Volatilidad 1,69% / Ratio de Sharpe 1,40 / Rentabilidad 3,70%
A
priori el Plan Pensión Creciente es menos arriesgado pero genera una
menor rentabilidad, y el Renta 4 Renta Fija es un poco más arriesgado y
lo compensa con una mayor rentabilidad.
RENTA MIXTA DEFENSIVA: Clientes con un perfil de riesgo equilibrado-conservador.
Caser Responsabilidad Plus PP:
Volatilidad 3,80% / Ratio de Sharpe 0,80 / Rentabilidad 3,92%
PlusPlan Mixto PP:
Volatilidad 3,43% / Ratio de Sharpe 1,06 / Rentabilidad 5,60%
Ambos
Planes son muy buenos en cuanto a rentabilidad-riesgo y tienen muy
buena proyección, pero podemos observar que el PlusPlan Mixto con un
menor riesgo consigue mayores rentabilidades.
RENTA MIXTA EQUILIBRADA: perfil de riesgo equilibrado, en búsqueda de rentabilidades atractivas.
Fonditel PP:
Volatilidad 6,49% / Ratio de Sharpe 0,60 / Rentabilidad 5,97%
March Pensión 50-50:
Volatilidad 6,34% / Ratio de Sharpe 0,70 / Rentabilidad 5,96%
Planes
muy similares en cuanto a rentabilidad y riesgo, pero con la diferencia
de que el March Pensión 50-50 en los últimos dos años lleva un
recorrido por encima del Fonditel, llegando a ser de los mejores Planes
de Pensiones de su categoría.
RENTA MIXTA AGRESIVA: Perfil
equilibrado-agresivo diseñado para gente que busca posibilidades de
rentabilidades altas y con una posibilidad alta de exposición a renta
variable.
Fondomutua moderado PP:
Volatilidad 4,78% / Ratio de sharpe 0,56 / Rentabilidad 2,40%
PlusPlan Gestión PP:
Volatilidad 8,17% / Ratio de sharpe 0,68 / Rentabilidad 8,84%
RENTA VARIABLE: perfil
agresivo con alta exposición, casi total, en renta variable. Búsqueda
de rentabilidades altas sin importar las ocilaciones de mercado.
Aviva Espabolsa:
Volatilidad 12,49% / Ratio de sharpe 0,45 / Rentabilidad 9,07%
Mundiplan Audaz Global:
Volatilidad 11,90% / Ratio de sharpe 0,80 / Rentabilidad 12,38%
Santander Renta Variable USA:
Volatilidad 12,82% / Ratio de sharpe 1,17 / Rentabilidad 16,56%
Planes de Pensiones de distinta categoría dentro de la Renta Variable, escogiendo por regiones (España, USA y Global)
¿Cuándo escoger un Plan de Pensiones?
Como
ejemplo para dejar lo más entendible posible lo que supone aportar a un
plan de pensiones en lugar de otros vehículos de ahorro como los fondos
de inversión, indicamos un ejemplo de ahorro a 15 y a 25 años, entre 20
mil y 70 mil euros, suponiendo que se aporta un 15% del salario bruto
anual, y nunca más de lo que reduce la base de IRPF (8.000 euros).
Como
se puede ver, empieza a ser beneficioso para personas con ingresos
superiores a 50 mil euros siempre que la rentabilidad de los productos
sea la misma, opción que no siempre es fácil de encontrar en planes de
pensiones.
Esto es solo un supuesto, pero habría que analizar cada
caso de forma personalizada, por lo que recomendamos el Asesoramiento
Financiero totalmente INDEPENDIENTE para buscar el mayor beneficio para
el cliente.
Fondos de Inversión
Los
fondos de inversión son otra modalidad de vehículo de inversión, el
cuál contiene las siguientes diferencias con los Planes de Pensiones:
- No
se usan para un objetivo específico, sino que sirve como
ahorro-inversión para poder llegar a cualquier objetivo que esté en el
corto, medio y largo plazo. Por ello son productos totalmente
rescatables en el momento que se necesiten.
- No conllevan
beneficios fiscales que hagan reducir nuestro IRPF, pero la forma de
tributar es mediante Rendimientos del Capital Mobiliario. Esto quiere
decir que únicamente tributaremos en el momento de rescate del Fondo y
que sólo se tributará por las plusvalías obtenidas.
- Posibilidad
de realizar carteras de fondos de inversión mediante la agrupación de
varios fondos. Esto permite realizar inversiones a la medida de cada
cliente, ajustándose a su preferencia por el riesgo y por la zona
geográfica en la que invertir.
Al existir actualmente una
enorme cantidad de fondos de inversión que elegir, desde Aspain 11
Asesores Financieros EAFI recomendamos acudir a un asesor especializado
en este tipo de productos para que una vez conocida su situación, pueda
diseñarle un traje a medida acorde a su perfil de riesgo, maximizando la
rentabilidad de sus productos de inversión.