¡Euforia!

27 de noviembre, 2012 2


e7c276a2fd070f280668c4d75b6a7b20.jpgTras los últimos tiempos se nos ha repetido hasta la saciedad que no podemos gastar más de lo que tenemos. Esta afirmación es interesante. Para empezar es defendida por algunos liberales que creen que endeudarse es lo peor que puede hacer cualquier Estado. Y de hecho, lo es en parte. Sin embargo conviene hablar de que el endeudamiento es una medida prácticamente keynesiana y que ha sido adoptada por los postkeynesianos. De hecho the keynesianism defiende, al igual que el liberalismo, cosas que ahora no se ven. ¿Endeudamiento?, pero con un fin claro y establecido. Digo esto de fin 'claro' porque los últimos años el poco endeudamiento que ha tenido España - ahora lo veremos en un gráfico descriptivo - no ha servido para nada. Nuestro Estado nos dice que no podemos endeudarnos. Pero lo curioso es que no nos dice por qué.

El endeudamiento fiscal fue una de las cosas propuestas por el notable economista inglés. En esa teoría argumentaba que el Estado se endeudaría para poder hacer sobrevivir al propio 'Estado Ciudadano' que forma parte de un Estado mucho más grande - a grandes rasgos, Keynes planteaba el endeudamiento para que se pudiesen financiar los gastos -. De hecho, hasta aquí todo está bien. El problema está exactamente cuando nos dicen que no hay nada que hacer. Que la única solución es la que se nos plantea ahora. Eso es, claramente, mentira. El tema de nuestra deuda pública es interesante:

5b570cf2fb716a652f36ee0c661e1a00.jpg

El gráfico de arriba nos muestra que, básicamente la deuda pública española es irrisoria: un 66% - gracias a Ángel Martín Oro por la corrección; la deuda ahora es de un 75,9% - de endeudamiento PÚBLICO español. Esto es: el Estado sólo se ha endeudado un 66% superando únicamente a Corea del Sur; ejemplo sonoro el de Japón - del que hablaré probablemente otro día para explicar el por qué de su deuda pública -. ¿Qué significa esto? Significa que, si hacemos un poco de análisis veremos que la deuda pública no es la que hunde al barco español. Es la deuda privada. Y, en concreto, es la de las entidades financieras. Si quizás el Estado se hubiese endeudado más podría haber estimulado más la economía. Pero, obviamente, esta es otra historia. Si volvemos a nuestro relato veremos que lo público no es tan odioso como parece. ¿Deficiencias? Claro, pero no problemas tan graves.

Ahora bien, lo curioso de nuestro país es que ha decidido crear el famoso SAREB o banco malo. Esto significa que el Estado pasará a comprar deuda privada. Y, probablemente, para comprar esa deuda privada se tenga que endeudar - valga la redundancia -. ¡Qué curioso! ¿Esto es por lo que los liberales criticáis al Estado? Me sumo. Los postkeynesianos - entre los que tengo el orgullo de incluirme - creemos en un endeudamiento del Estado eficaz; que no malgaste ni derroche. Esto es derroche, es malgasto y es fruto de una gestión poco eficaz. Como dije hace unos días, nuestra economía ni liberal ni keynesiana. El término medio. Malo malo.

Jaime

Pueden seguirme en Twitter https://twitter.com/JaimeMAD


Este artículo tiene 2 comentarios
antiguo usuario
Hola Ángel, gracias por el apunte, corregido - he incluido tu actualización en el post por eso mismo -. Aún así, sigo estando de acuerdo en un endeudamiento que estimule y no que derroche. Obviamente, este no es el caso.

Salud
27/11/2012 21:45
Escriba un nuevo comentario

Identifíquese ó regístrese para comentar el artículo.