El sector deportivo no para de crecer. Tras un 2020 complicado, las principales competiciones de deportes profesionales están disparándose tanto en audiencia, como en interés y en volumen de negocio. En España, el ejemplo más claro de ello es el fútbol. El deporte rey está registrando unas cifras de escándalo en los últimos dos años y eso, además, se está notando en otros sectores como el de las apuestas deportivas. Grandes casas de apuestas (más detalles en este link) dan buena fe de ello.
¿A qué se debe esa correlación? ¿Qué hace que el crecimiento del deporte signifique también un crecimiento para el sector de las apuestas? Ambos son dos grandes gigantes a nivel de mercado, amasando unas cifras de facturación enormes en comparación con otros muchos sectores. Ambos están íntimamente ligados, hasta el punto de haberse generado una fuerte dependencia entre uno y otro.
Deportes y apuestas: un camino juntos
Las apuestas y el deporte son inseparables. En los casinos online, la sección de apuestas deportivas es una que siempre está presente y, tal y como su nombre indica, mira directamente a las disciplinas deportivas más importantes del mundo. Fútbol, baloncesto, tenis, golf y otras tantas opciones que mueven auténticas legiones de seguidores son lo que da vida a este tipo de juegos de azar.
Durante el último año, las máximas competiciones de los deportes más importantes han empezado a registrar sus mejores cifras tanto de audiencia como de negocio. En LaLiga española, donde se reúnen algunos de los equipos de fútbol más valiosos del mundo, 2021 supuso la vuelta a los beneficios tras un año de pérdidas. La reapertura de estadios, la vuelta a la normalidad sobre el césped y el deseo por volver a disfrutar de los grandes partidos que deja esta competición consiguieron hacer que despuntara como pocas veces.
Y eso se trasladó también al campo de las apuestas. Las casas más veteranas han registrado un notable impulso en el pasado 2021 a raíz de la reapertura de estadios y de la vuelta de las competiciones. Durante la pandemia, el negocio había conseguido avanzar y mantenerse gracias a ligas y deportes menos habituales. No obstante, ahora que han vuelto los grandes reyes del sector, el negocio también se ha disparado.
Algo lógico. Las apuestas no solo van de la mano, dependen directamente de la evolución de los deportes. Cada competición notoria, cada jugador destacado, cada deporte emergente. Todo afecta directamente a los mercados de apuestas, a sus plataformas y a sus usuarios. El ecosistema que se ha construido en la última década supone prácticamente una simbiosis entre ambos sectores, y una de las muestras más claras de ello es la publicidad y los patrocinios que se han visto en muchos de los equipos más sonados de los deportes más importantes, sobre todo en el fútbol.
Bien es cierto que la publicidad de casas de apuestas se ha visto reducida por las nuevas leyes, sin embargo, eso no les ha impedido seguir manteniendo unos niveles de facturación más que importantes. Y es que, mientras haya deportes que jugar, habrá usuarios que quieran apostar.
