¿Cuándo y dónde tocaremos fondo? Esta es la pregunta del millón y en realidad, nadie lo sabe exactamente. Pero una cosa es no conocer el futuro y otra cosa es no saber qué hacer en el presente. La gente asocia las dos cosas pero es un grave error de base. No necesitas conocer el futuro para saber lo que tienes que hacer hoy.
Hay que comprender que esta crisis viene de lejos. Las circunstancias son clave en lo que llamamos “historia”, que no es más que eso: una sucesión de “hechos a menudo fortuitos” que se van encadenando unos con otros hasta provocar consecuencias inimaginables unos años antes. El ejemplo más reciente es el confinamiento del Covid y todo lo que vino después: sobrerreacción brutal por parte de gobiernos tan irresponsables e incompetentes como muchos de los votantes que representan, y complicidad imperdonable de los bancos centrales cuya independencia nunca ha estado tan en tela de juicio. Fijaros por ejemplo en el siguiente gráfico que representa la variación anual de la masa monetaria (M2) en EEUU desde 1992. En una economía que se para... ¿para qué aumentas un 25% la masa monetaria si la gente está en casa? Me temo que la historia no se mostrará muy magnánime cuando toque "juzgar" esta etapa de la historia de la humanidad...
Este confinamiento ha inculcado el miedo en la población y los gobiernos han ganado poder. Mal asunto, porque la concentración de poder en manos de unos pocos nunca es buena noticia, especialmente si esos pocos están mal preparados pero se sienten "iluminados" como nadie...
Sean o no conscientes de eso, los políticos están encantados con esta nueva realidad porque se sienten más PODEROSOS que nunca. Y no tiene pinta de arreglarse. La “circunstancia” del Covid les ha dado poder, y la población en general les apoya. Este poder ha restado libertad a la población y está propiciando que la transición hacia una nueva era y un nuevo paradigma se esté acelerando. En esta nueva era vamos a notar:
- una represión financiera de los ahorradores va a durar años, décadas. Hay que purgar el exceso de endeudamiento y la inflación es la mejor forma de hacerlo “sin revoluciones”.
- el intervencionismo del Estado se va a mantener y va a crecer: nos dirigimos, como dice desde años el gran Juan Ignacio Crespo hacia un nuevo “Capitalismo de Estado”. Hay un ejemplo que es tragi-cómico: el precio del petróleo está disparado porque los gobiernos llevan muchos años desincentivando las inversiones en energías clásicas, penalizando a estas empresas en nombre de una transición energética mal planificada (porque la planificación estatal supone que la “casta dirigente” tiene más visión, inteligencia y conocimientos que el sector privado, lo cual evidentemente no es cierto). Esta manipulación de los mercados (porque seamos claros: el intervencionismo del Estado es una manipulación) es el origen de la penuria energética actual y la inflación descontrolada. Ellos han creado el problema, y ahora se quieren poner la medalla de salvadores reduciendo el precio de la gasolina en las gasolineras, ¡ cuando la mayor parte del precio de un litro de gasolina son impuestos ! Por un lado te lo quito, y por otro lado te lo doy, para que me des las gracias. Este es “papá Estado”, al que tienes que estar muy agradecido…
En paralelo, los bancos centrales nos han inundado de liquidez (dinero creado de la nada) y han sido cómplices de la irresponsabilidad de los gobernantes. Ahora están subiendo tipos apresuradamente. Primero la FED, como siempre, y después, tarde y sin personalidad, el BCE, como siempre. Pero los tipos siguen estando muy por debajo de la inflación. Y además, los gobiernos no están aplicando medidas restrictivas, por lo que la liquidez no se está reduciendo, como debería. Esta es una razón por la que la bolsa “aguanta” relativamente bien.
La cuestión CLAVE que nos interesa como inversores, es comprender que hemos entrado en una NUEVA ERA donde la persistencia de la inflación va a imposibilitar que los bancos centrales vuelvan a inundar de liquidez la economía para “salvar los muebles”. Otra cosa es que en lugar de inundar, consigan drenar fuertemente la liquidez creada en la última década y los últimos años en particular. Esto parece bastante complicado igualmente. Pero mientras la tendencia sea a reducir liquidez y no a aumentarla, las bolsas estarán en modo “tendencia alcista secular interrumpida”.
Esto no significa que en un momento dado no podamos rebotar un 40% o incluso más, como ocurrió en 1975. La VOLATILIDAD va a seguir siendo elevada porque las magnitudes de todo están “fuera de control”. Un ejemplo: la FED ha subido los tipos de interés en 9 meses todo lo que los bajó en los 10 años anteriores. Es un crack de renta fija como nunca en la historia. Prepárense porque en algún momento se producirá un rebote (caída de tipos) proporcional a la violencia del movimiento anterior, y la bolsa notará el seísmo.
Por eso, la situación actual es compleja: a corto y medio plazo podemos rebotar, pero a largo plazo es poco probable que -en términos reales, es decir, con la inflación incluida- hayamos tocado fondo. ¿A qué corriente debemos darle más importancia? Este es el gran DILEMA al que se debe enfrentar todo inversor ahora mismo: ¿comprar ahora por si hay un rebote del 20% o más, o esperar con paciencia y asumir que se pierda ese potencial rebote (que podría ser superior al 20%) pensando en el más largo plazo?
Mi propuesta operativa.
Mi opinión es que, como no tenemos bola de cristal, tenemos que tomar decisiones pausadas, progresivas, y defensivas. Estar 100% fuera del mercado ahora mismo no parece “sabio” porque estadísticamente no es favorable. Con el Nasdaq habiendo caído un 35% desde máximos (más un 8% de inflación nos vamos a un -43% “real”), la historia nos dice que la relación riesgo-recompensa está a favor de comprar, no de vender.
PERO en esa historia no se contempla ninguna locura como la liquidez monetaria creada en 2020-2021 que provocó un 130% de subida adicional en una bolsa como el Nasdaq que ya estaba sobrevalorada. Es decir, “esta vez es diferente” (con permiso de Sir John Templeton). Y podemos aplicar un “margen de seguridad” a la hora de volver al mercado. Igual esta vez un -40% no es suficiente…
Hace unas semanas en mi Canal de Youtube planteé un “agotamiento bajista”, lo cual no es lo mismo que hablar de “subidas inminentes o reanudación de tendencia alcista”. En esas estamos.
Aquí quiero hilvanar mi argumentación con el tema de las OPCIONES, que para mí son una herramienta imprescindible para invertir, porque te permite hacer cosas que no te atreverías a hacer con instrumentos clásicos. Por ejemplo, en este entorno, buscar rentabilidad en caso de agotamiento bajista (sin necesidad de un rebote fuerte) sin exponerse “en crudo” a una tendencia bajista que quizá no haya tocado fondo ni siquiera a corto plazo.
Plantear un agotamiento bajista dentro de una tendencia bajista de fondo es ya una información que se puede explotar con estrategias atractivas con opciones, empezando por una simple venta de PUT OTM de medio-largo plazo, como forma de arañar unos puntos de rentabilidad en medio de un mercado bajista donde nuestro primer objetivo debe ser “no perder”. Os dejo, para terminar, con este vídeo donde hablo de todos estos temas: primero del ciclo, porque es fundamental comprender dónde estamos y qué tenemos por delante, y segundo de cómo aprovecharlo con Opciones. Si te gusta este vídeo, te invito a mi próxima masterclass donde profundizaremos en todos estos puntos.
PD: Próximamente os anunciaré también varias novedades importantes. Si no te las quieres perder, sígueme en NikoGarnier.net
Ha corto/medio plazo puede ser interesante entrar-salir-entrar-etc.... pero para el que vaya a largo plazo me parece que estamos en ante una década perdida. Y que puesto que la bolsa estará igual ahora que dentro de 10 años mejor dedicarse a otras cosas hasta que la "hiperinflación" se solucione.
En respuesta a da ca co
A corto. Me sobra una "H". jeje.
En respuesta a da ca co
sí, aunque con un "pero", que es justo lo que mencionas al final: la hiperinflación (que eso son palabras mayores, y no estamos en eso...ni lo estaremos probablemente, porque eso sí sería un cisne negro).
Dejémoslo en inflación fuerte persistente. Con un 6% anual, en solo 12 años (los mismos que van desde 2009 hasta el techo de 2021) has DOBLADO el precio de todas las cosas.
A largo plazo (10 años por ejemplo), esto significaría que si bolsa cotiza al mismo PER que ahora, y los beneficios REALES de las empresas no se han movido, la bolsa estaría al doble de donde está ahora. Este es un riesgo que un inversor de largo plazo también debe valorar.
Porque el hecho de que en 2022 la bolsa haya caído mientras la inflación se disparaba no significa que en 2023 no pueda subir mientras la inflación corrige... y ahí ya sí que el inversor de largo plazo que decide estar fuera, se empieza a quedar muy atrás...
Así que no es tan fácil como "hibernar" y ver dentro de 10 años qué pasa. En todo caso, la hibernación se haría estando dentro (al menos parcialmente)... Al menos es una pregunta que hay que hacerse concienzudamente ;)
Saludos !
En respuesta a Niko Garnier
Si. No será hiperinflación, técnicamente hablando, por eso lo puse entre comillas. Pero si pueden bajar el precio del dinero un 80%, que es lo mismo que decir que las cosas se multipliquen por 5. Ya paso en los 70. Y si te quedas en bolsa indexado y a largo puede ser como tener el dinero en el banco, lo pierdes casi todo. Por eso es un momento muy difícil creo para invertir en bolsa y mejor estar en cosas tangibles, mientras haya inflación. Yo no descarto parcialmente estar en bolsa, pero siguiendo muy de cerca los "latigazos" que vaya dando la fed con su curva de tipos (que ahora tiene un aspecto horrible, por cierto).
Al que veo increíblemente bien es al IBEX a aguantado donde debía aguantar ,también coincide que todos los índices han aguantado todos a la vez y el rebote es muy fiable desde hace bastantes días ,
El Ibex increíblemente proyecta por encima del 10000,
Mientras mantenga las pautas correspondientes podría conseguirlo
Hola NIco.
Yo aportar casi desde la visión desde el terreno, la de un trabajador con más o menos responsabilidad en un sector que NO dejó de trabajar pero si vió mermada su capacidad de negocio, si acaso defender un poco las medidas que se tomaron. Es cierto que la gente estaba en casa, pero cobrando y cobrando de empresas que estaban muchas en punto muerto, sin producir o produciendo muy poco y pagando salarios, alquileres y todos los gastos relacionados con una empresa... también el estado se hizo cargo de los ERTES, para que la gente pudiera seguir pagando sus hipotecas, su comida, sus servicios... si, aunque estuvieran en casa. Sin esas medidas el caos habría sido absoluto, la quiebra hubiera sido dramatica para pymes y empresas y los mismos ciudadanos... es más con todo ello, algunas empresas no han conseguido todavía recuperar las pérdidas de esos dos años y yo he visto en la calle cerrar tantos negocios durante y depués, que no quiero ni pensar que habría pasado sin no se hubiera salvado la situación dándole a la manivela del dinero y no hablo solo de España, en realidad todos los gobiernos hicieron lo mismo. El consenso en estas medidas se extendió como la pólvora, se empezó en Europa y hasta Trump empujó a ello ante un inminente desastre económico de consecuencias bíblicas. Es cierto que esto produjo unos excesos que ahora se están corriguiendo, como lo que se ve en los índices, no se si queda mucho o poco, pero la gráficas de los índices ahora parecen cerca de la realidad de una linea de tiempo sin el COVID y no en la fantasía que se convirtió durante dos años... bamos que si quitamos la joroba del camello generada en esos dos años y lanzamos una linea entre los puntos de antes y depués, todo parecería bastante normal.
Yo creo que el problema fue social, creo que las medidas de confinamiento o muchas de ellas fueron una exageración, entonces me decían de todo por utilizar esos argumentos, hoy muchos no quieren hablar de ello, pero el miedo se extendió como la pólvora y la verdad, ni medios, ni políticos supieron encauzar la situación. Imitar el modelo Chino de confinamientos fue un herror monumental y el tiempo ha puesto las cosas en su sitio aunque de esto nadie quiera hablar ahora, entonces llevar la contraria poco menos que era sinónimo de ser un asesino en potencia.
Yo no sé si hemos tocado fondo o no, yo no miro mucho la evolución de la bolsa, la realidad es que desde mayo, poco hay que decir, ni si quiera las caídas en los índices son muy significativas y a veces me da la impresión de que en cualquier momento las cosas pueden cambiar muy rápido para bien y también para mal, sobre todo por la evolución de ese conflicto bélico que dura demasiado y esta costando MUCHO dinero en armamento por parte de todos.
Yo sigo siendo ligeramente optimista.
Un saludo.
En respuesta a Keki Trance
Globalmente de acuerdo. No discuto las medidas, sino su intensidad y el populismo asociado. Papá Estado resta más de lo que aporta a largo plazo, pero la gente percibe lo contrario. Los países más ricos son los más liberales. El “Estado” es un grupo de personas, un lobby, una casta. Cuanto más poder tienen, peor para todos. El poder, salvo en las cosas ensenciales (defensa, infraestructuras…) debe estar descentralizado o diversificado. Ningún grupo de personas tiene el privilegio exclusivo de la verdad ni la sapiencia absoluta de saber lo que conviene hacer en cada momento y hacia donde debemos ir. Cuando eso ocurre, mal, muy mal. Porque al final, nos estrellamos todos…
El confinamiento fue una histeria social que pasará a la historia como un nuevo ejemplo de psicologia de masas, donde la razón y la ciencia se prostituyen al servicio de las emociones, los miedos y las pasiones. Nada nuevo bajo el sol…
Yo, paradójicamente, soy un poco menos optimista que antes, pero supongo que es tambièn por la edad jeje (cuanto mayores somos, más pesimistas somos en términos relativos).
Saludos!
A estas alturas descubrir la necesidad de la politica social creo que es innecesaria y no creo que sea lo que el articulo plantea. Pero otra cosa es pasarse con las ayudas, donde muchas profesiones, sobre todo las peor pagadas, la diferencia entre trabajar y "quedarse en casa" es minima. Entrecomillo quedarse en casa porque, al menos en España es mentira, pues lo que hacen es aprovechar las ayudas para pasarse a la economía negra. Un ejemplo son los albañiles que las empresas no consiguen contratar a ningún español, pero que hay de sobra cuadrillas de "gente en casa" arreglando cocinas, cuartos de baño, fontaneria, suelos, etc, etc.
Lo siento, no me gusta gran parte del artículo. Sólo estoy de acuerdo con el título.
Me parece un poco conspiranoico.. los bancos centrales hicieron lo que tenían que hacer: facilitar liquidez para que los negocios no quebraran.
Eso sí, se pasaron cuando ya se había recuperado gran parte del POB perdido en la pandemia.
El gráfico de PIB es elocuente. Gran caída y recuperación excesiva. Ver gráfico.
En respuesta a Miguel Navascues
Contracción de liquidez = contracción de créditos = gran ostia. Había que evitarlo. Otro que cree que las contracciones monetarias NO tiene efectos reales...