Vamos a comentar una operación sobre el DAX que cerramos el mes pasado y
en la que sufrimos uno de los problemas típicos del trader. Me estoy
refiriendo al deslizamiento en la ejecución de las órdenes que se
produce (de vez en cuando) con motivo de los gaps de los precios.
En el caso que nos ocupa el resultado final fue positivo. Pero bien es
verdad que tuvimos un poco de suerte, ya que el deslizamiento que
sufrimos al principio de la operativa fácilmente nos podría haber hecho
acabar en negativo. El impacto final aquí fue una reducción de la
rentabilidad obtenida en la operación.
Entrando en detalle, en el gráfico podemos ver el setup que
identificamos en el DAX durante la primera quincena de julio. El índice
había roto la importante resistencia de los 8.040 puntos y se encaminaba
con fuerza hacia su directriz bajista, que circulaba ligeramente por
debajo de los 8.100 puntos (línea de tendencia roja en la imagen).

Por tanto, lo que hicimos fue introducir nuestra orden de entrada en el
nivel 8.104, para tratar de aprovecharnos de la ruptura de la mencionada
directriz. Esta orden la dejamos introducida en el mercado en la noche
del 10-julio. Al día siguiente, 11-julio, asistimos impotentes al gap
alcista de apertura del DAX, que llevó al precio hasta 8.190 puntos,
nivel en el que se ejecutó nuestra orden. Es decir, habíamos sufrido un
deslizamiento de 86 puntos con motivo de un gap de apertura o, lo que es
lo mismo, nuestra operación había comenzado "perdiendo" 86 puntos.
En ese momento evaluamos la posibilidad de cerrar inmediatamente la
posición y asumir unas pequeñas pérdidas, ya que nuestro stoploss
inicial (obviamente) había quedado mucho más alejado de lo que habíamos
previsto inicialmente. Pero finalmente decidimos mantener abierta la
operativa.
Tras tomar dicha decisión, el índice marcó un mínimo en 8.136 puntos (el
momento más crítico de la operación) y, afortunadamente, luego retomó
la senda alcista. El día 1-agosto marcó un máximo en 8.459 puntos y,
debido a la verticalidad de la subida, decidimos que había llegado el
momento de ajustar el trailing stop. Así que reubicamos nuestro stop en
el nivel 8.390 puntos.

Al día siguiente, 2-agosto, la caída del índice tocó nuestro stop e hizo
que nuestra salida se ejecutase en el nivel 8.389 puntos. Por tanto,
nuestra operación se cerró con +199 puntos por lote (un total de +1.990
euros en nuestra cuenta). Si la entrada se hubiese ejecutado
correctamente (sin gap) en el nivel 8.104 entonces nuestro resultado
hubiese sido de +285 puntos por lote. De ahí que digamos que aquí hemos
"perdido" 86 puntos por lote.
En definitiva, esta operación nos sirve para tener identificado
claramente otro de los problemas con los que se puede encontrar un
trader en su día a día. Aunque bien es verdad que esta situación no se
produce a menudo, hemos de tener en cuenta que tarde o temprano la vamos
a sufrir y, por tanto, debemos tener claro cuál es el plan de
contingencia que vamos a seguir cuando nos encontremos con ella. Como
siempre, es importante no improvisar más de lo necesario.
Pues nada, esperemos que, para el presente año, hayamos cubierto el cupo
de gaps que van en contra nuestra. Al menos aquí los daños han sido
reducidos.
Saludos.