Ayer muchos fueron los planetas que se alinearon y el número de señales negativas que recibimos fue mayor a otras ocasión, siendo el rojo que predominó en Wall Street el elemento que nos generó más inquietud y que, a la postre, se ha convertido en el detonante de que la balanza haya cedido hacia el lado negativo. Pero no nos llevemos todavía las manos a la cabeza. Cierto es que en Europa, dos de las principales referencias, DAX y Eurostoxx, han perdido sus soportes (este último marcando mínimo en el año), pero el S&P ha mantenido el suyo y nosotros hemos conseguido conservar los 8.000 puntos, aunque, eso sí, abriendo un nuevo hueco... Es probable que mañana los perdamos, pero no es tan mala la sensación que me ha quedado en el cuerpo.
Con todo ésto, mañana se presenta un día en el que es posible que las correcciones prosigan su camino. El S&P 500 ha vuelto a cerrar en rojo, pero ha conseguido aguantar los 1.500 puntos (ojo si se pierden) y, como hemos indicado, en Europa las cosas no pintan muy bien. Si no aguantamos los 8.000 habrá que ver si los 7.898 ejercen su papel de salvador. Los 7.670 creo que siguen siendo un nivel que con alta probabilidad podemos acabar visitando y no tengo muchas esperanzar de ver lo contrario, pero bueno, ¿quién dijo que en bolsas era algo imposible?
IBEX 35. Visión: 3 meses; Frecuencia: 4 horas
