Ayer el S&P500 volvió a alcanzar nuevos máximos históricos, lo que permitió que las bolsas europeas, que habían comenzado la semana con dudas, cerraran con nuevas ganancias. Así no sólo el S&P500, sino que el Nasdaq y el Dax Alemán consiguieron cerrar ayer en máximos históricos. No hubo grandes novedades en el apartado, macro por lo que lo más significativo ha sido el acuerdo cerrado estos días entre Rusia y Arabia Saudí para extender su acuerdo de recorte de producción hasta marzo de 2018, que ha beneficiado al precio del petróleo y por ello a las empresas del sector y otras compañías de materias primas.
El petróleo rebota un 12% desde mínimos del mes y esto genera que los valores cíclicos puedan empezar a liderar de nuevo a los índices. Y si los valores cíclicos son los que lideran el mercado, esto puede traducirse en un nuevo tirón de las bolsas. Evidentemente comprar o aumentar riesgos en una bolsa en máximos puede atemorizar a los inversores. Pero una sucesión de máximos es lo que define una tendencia alcista, y es este el fenómeno que estamos viviendo. Los inversores que se quedan en liquidez esperando un recorte para entrar se van desquiciando porque su oportunidad nunca llega. Tras uno o dos días de recortes vemos cómo las bolsas recuperan en una sesión o quizás en horas el terreno perdido.
En el día de hoy vamos a analizar gráficos de muy largo plazo para ver cómo es la situación actual de los principales índices.
Empezando por los que están en máximos históricos, el DAX en este inicio de año ha superado máximos de 2015. Lo que estamos viviendo desde 2014 es la ruptura de máximos de 2000 y 2007. Si miramos la evolución de corto plazo podemos pensar que el DAX ha subido mucho, pero si miramos desde una perspectiva de más largo plazo, podemos también decir que la bolsa alemana se encuentra aún cerca de los máximos alcanzados en el año 2000 y en 2007, cuando la situación actual de las compañías es bastante mejor.
Evolución del S&P500. También lo que estamos viviendo este año es la superación de máximos de 2015. Tras la tormenta del verano del 2015 e inicios de 2016, la situación macro se ha estabilizado y esto posibilita que la bolsa de Estados Unidos esté retomando la inercia perdida entonces.
La tendencia alcista de largo plazo y la iniciada en 2009 no ofrece dudas. Se habla mucho en los últimos meses de que el S&P500 mantiene una tendencia alcista por muchos años (desde 2009) y que tiene que venir un cambio de tendencia, pero vemos que desde el año 1980 hasta el año 2000, el S&P500 prolongó la racha durante 20 años. Curiosamente las dos rachas más impresionantemente alcistas del S&P500 vinieron después de las dos crisis más graves, lo cual es lógico. Las crisis son las que generan las mayores oportunidades de inversión si se eligen buenas empresas. En el siguiente gráfico del S&P500 vemos la evolución desde el Crack del 29. El primer gran ciclo alcista se inició en el 1942 y se prolongó hasta el 1968. Después vino la década perdida de los 70 con la crisis del petróleo. Ahí surgió la segunda mejor oportunidad histórica, con una subida casi ininterrumpida desde 1974 hasta el 2.000. Después ha venido otra década perdida con la crisis de las punto.com y con la crisis financiera. ¿Puede ser el 2.009 la tercera mejor oportunidad histórica de la renta variable? Dejo el gráfico con la revalorización media de largo plazo (6.5% en azul) frente a la revalorización media de los dos momentos comentados.
El resto de índices no están en máximos históricos pero parecen estar en disposición de alcanzarlos. El Eurostoxx está rompiendo este mes los máximos de 2015 lo que es una señal alcista. En el gráfico podemos ver cómo el índice está en disposición de atacar la línea de máximos de 2000 y 2007. Si rompe esta línea, la señal alcista sería mucho más fuerte y podría repetirse el movimiento del S&P500 y del DAX en 2014 cuando superó máximos del 2007.
Quizás se vea más claro en el Eurostoxx 600, que incluye las acciones europeas que no cotizan en euros. Aún no ha roto máximos de 2015 y la resistencia a la que se enfrenta es un claro triple techo. Está en resistencia por lo que hay que tener bastante precaución, pero si la supera (cierre mensual por encima de 400 puntos), debería subir con mucha fuerza.
Y el IBEX, es otro que está a punto de caramelo para dar una clara señal de compra a largo plazo. Está atacando la línea que une los máximos de 2007 y 2015. Está por encima de las principales medias y el MACD mensual se acaba de cruzar al alza. En el gráfico podemos ver cómo se ha comportado el mercado cada vez que el MACD mensual se ha cruzado al alza. Históricamente la reacción del precio ha sido muy positiva. ¿Merece la pena esperar y ver si rompemos definitivamente o esperar una corrección?
Por último el MSCI Emerging Markets, está también a punto de superar una fuerte resistencia. Un cierre mensual por encima de 1.000 podría significar dejar atrás la línea que une máximos desde el año 2007, lo que generaría una importante señal alcista de largo plazo.
Los gráficos son de velas mensuales, por lo que la media de corto plazo usada es de 12 meses (1 año) y las siguientes son de 36 y 60 meses. Vemos que la media de 12 meses históricamente ha ido marcando soportes de corto plazo y son los cierres mensuales por debajo de la misma la antesala de turbulencias (mayores o menores). Por tanto, mientras los índices se mantengan sobre la misma hay que seguir en la ola de la tendencia alcista actual. Algunos índices están atacando resistencias importantes, por lo que vemos lícito que algunos inversores prefieran reducir riesgos en el momento actual, pero ojo que si estas resistencias se rompen, bajo la misma tesis habría que volver a asumir riesgos.
El artículo original se encuentra en el Blog de Unicorp Patrimonio S.V.
(http://blog.unicorppatrimonio.es/)