En el gráfico abajo represento el PIB per capita de un grupo de países que representan dos estatus muy distintos. Por un lado, España y Francia, en representación dos ejemplos de la UE actual; la mediocre decadente UE, que tan opaco futuro se le presenta. Por otro lado, Rusia e Irán, países que tienen materias primas que venden al resto del mundo, a los que agrego China, como país vocacional de ser primera potencia y que de un modo centralizado ha “inventado” una nueva forma de capitalismo por el cual muchos occidentales mueren de envidia. Son tres países que Yo llamo “amenazantes”, pues de un modo u otro están siempre amenazando a Occidente de quitarle la primacía actual, hoy por hoy incontestable (si dibujara EEUU, estaría muy por encima de Francia).
Bueno, pues en el gráfico se ve claramente que la envidia no está justificada,
Que nosotros, la “mediocre España”, la Francia decadente, tenemos una renta per capita sustancialmente más alta que la de China, Rusia e Irán.
Nuestro problema es otro, de sostenimiento financiero de nuestro nivel de vida, para lo cual tenemos que hacer una serie de reformas que ningún gobierno quiere hacer, ni en Francia ni en España (y otros países de la UE).
Ahora bien, ¡tantos años de globalización que han sido desaprovechados por los países que siguen siendo igual de pobres, pese a sus enormes exportaciones a Occidente! - especialmente a EEUU.
España tiene 24 mil dólares per capita, mientras China, la potencia emergente, llega apenas a 8 mil. Iran, país orgulloso de estar a punto de alcanzar la bomba nuclear, y a lo quien ha dedicado todos sus esfuerzos, más le valdría haber invertido en bienes pacíficos. Para que hablar de Rusia, que nunca ha admitido una mínima democratización y siempre se ha inclinado a un zarismo, que Putin, su sátrapa actual, interpreta muy bien.
¿Quién exigirá cuentas de tanto fallo y pérdida?
Nadie. Porque la cultura básica de estos pueblos son de raíz totalmente opuesta a la democracia, que no sobreviviría un año. Estos pueblos gustan de ser mandados dictatorialmente, por razones culturales y religiosas diversas, pero unánimes en el rechazo de las instituciones que traen El Progreso.
Nosotros renegamos ahora de esas instituciones, nos hemos aburrido de la libertad. En Europa hay cada vez hay más países votando a a la extrema derecha. Se ve una desorientación en los mandatarios y ciudadanos en los problemas esenciales. EEUU también muestra signos de renegar de su pasado. Es lamentable. Porque si nuestro mundo desaparece, no volverá.