Una de las variantes del análisis técnico es el análisis chartista o “chartismo”, que no es más que el estudio de los gráficos para pronosticar los comportamientos futuros de los distintos activos financieros. Así, uno de los conceptos clave del análisis gráfico o chartismo son los soportes y las resistencias.
Un soporte se podría definir como aquella zona por debajo de la cual la fuerza de la demanda (compradora) supera a la fuerza de la oferta (vendedora), lo que produce una detención del movimiento bajista y una posterior recuperación al alza de los precios. En una tendencia bajista, los niveles de soporte, que van parando sucesivamente los movimientos descendentes del precio, se van rompiendo repetidamente hasta que la tendencia bajista se detiene por completo y cambia de dirección.
Una resistencia se puede definir como aquella zona por encima de la cual la fuerza de la oferta (vendedora) supera a la fuerza de la demanda (compradora), lo cual se traduce en una detención del movimiento alcista y una posterior caída de los precios. En una tendencia alcista, los niveles de resistencia que van deteniendo paulatinamente el ascenso del precio, van siendo sobrepasados sucesivamente hasta que la tendencia alcista se detiene por completo y cambia de dirección.
A grandes rasgos podríamos clasificar los soportes y resistencias en tres grandes grupos: niveles fijos, dinámicos y semidinámicos de soportes y resistencias. Los niveles fijos se podrían definir como zonas de soporte y resistencia que no se modifican, es decir, que siguen siendo válidos al mismo nivel, como por ejemplo, máximos y mínimos anuales, apertura y cierre de velas, máximos y mínimos de velas, etc. Los niveles dinámicos serían zonas de soportes y resistencias que cambian periódicamente, como por ejemplo las medias móviles. Por último, los niveles semidinámicos son aquellos que cambian a un ratio constante como los retrocesos de Fibonacci y los pivot points.
Cuando hablamos de soportes y resistencias siempre es recomendable hablar de “zonas de soporte y resistencia” más que de niveles concretos, puesto que el mercado no suele detenerse en un precio concreto, sino generalmente en torno a una zona. Considerando la psicología de los mercados, los números redondos suelen actuar habitualmente como zonas de soporte y resistencia (Dow Jones 25.000 ptos, S&P 500 3000 ptos, IBEX 35 8.000 ptos, etc.).
Con respecto a los cambios de tendencia, o mejor dicho, a la ruptura de los soportes y resistencias, hay que tener en cuenta que generalmente los precios no suelen romper al primer intento un nivel de resistencia en una tendencia alcista. Del mismo modo ocurre en una tendencia bajista. Habitualmente son necesarios varios intentos hasta que cede dicha resistencia o soporte. También hay que considerar que en una tendencia alcista los niveles de resistencia se convierten con frecuencia en niveles de soporte tras ser rotos de forma significativa, y en una tendencia bajista los niveles de soporte se transforman igualmente en niveles de resistencia cuando los precios se recuperan hacia ese nivel.
En lo relativo a la fiabilidad de los soportes así como de las resistencias hay que tener en cuenta una serie de aspectos esenciales:
1. Cuantas más veces haya funcionado el soporte o la resistencia, mayor fiabilidad tendrá.
2. Cuanto mayor volumen se haya negociado en torno a dichas zonas, más importante y relevante será la misma.
3. Cuanto más cercana esté en el tiempo dicha resistencia o soporte, mayor validez tendrá, puesto que estará en la mente de los operadores.
Especial referencia a los criterios utilizados a la hora de considerar la ruptura de un soporte y/o resistencia: muchos inversores utilizan estrategias de trading basadas en roturas se soportes y/o resistencias. Por ello, es necesario establecer o señalar algunos de los criterios que se utilizan generalmente para considerar válida la rotura de un soporte y/ resistencia. No obstante, hay que señalar que existe cierto grado de ambigüedad o incertidumbre con respecto a lo que es realmente un rotura significativa de uno de estos niveles, ya que no pocas veces nos encontramos ante lo que parece ser una rotura definitiva solo para darnos cuenta que el precio termina dándose la vuelta, lo cual se conoce como una rotura falsa. Así, no son pocas las veces en que un inversor se ve atrapado en una situación de estas. Sin embargo existen algunos criterios al respecto que conviene abordar:
1. Criterio del volumen: se considera que el volumen de negociación debe aumentar conforme el precio del activo rompe y avanza por arriba de una resistencia o por debajo de un soporte. Si se observa que el volumen empieza a disminuir conforme se produce la rotura, probablemente estamos ante una rotura poco fiable y de poca duración, ya que es altamente probable que el precio se dé la vuelta.
2. Criterio de porcentaje: los traders expertos suelen utilizar un porcentaje determinado para establecer si una resistencia o un soporte efectivamente han sido rotos. Por ejemplo, para niveles muy importantes, este porcentaje se sitúa generalmente entre el 2% -y el 3%. Así, en caso de estar en una tendencia alcista, el precio del activo deberá superar el nivel de resistencia en un 2% - 3% para que se considere “válido”. De la misma forma, el precio debería caer entre un 2 - 3% por debajo de un nivel de soporte durante una tendencia bajista para que se pueda considerar que ha ocurrido una rotura significativa.
3. Criterio del cierre diario: Se considera que una rotura es válida si el precio cierra por arriba o abajo del nivel de resistencia / soporte que ha sido sobrepasado por las cotizaciones en un periodo dado. El criterio de cierre diario puede aplicarse a cualquier marco de tiempo (semanal, mensual, anual).