Desde el punto de vista macroeconómico, en EE.UU. esta semana el índice PMI Markit ha presentado cifras provisionales de junio. En Manufacturing por debajo del estimado y mucho mejores que el dato previo con 49.6 vs 50.0(e) vs 39.8(p), mientras que en Services el dato fue también inferior al dato estimado y superior al dato previo, con 46.7 vs 48.0(e) vs 37.5(p). Las ventas de viviendas de obra nueva fueron inferiores al dato estimado 640k vs 676k(e), y mejores al dato previo 623k(p). Las peticiones de subsidios de desempleo de esta semana fueron 1.480.000 peores que la cifra estimada de 1.290.000, pero mejores que la semana pasada con 1.508.000. Los pedidos de bienes duraderos crecieron un 15,8% más que el dato estimado +10,5%(e), invirtiendo el signo del dato previo -17,7%(p). Los ingresos personales del mes de mayo se han reducido un -4,2% frente al dato estimado de un -6,0%(e) y el dato previo +10,5%(p). Los gastos personales aumentaron más que el dato estimado y que el dato previo +8,0 vs +9,2%(e) vs -13,6%(p). Por último, el indicador de sentimiento de la Universidad de Michigan ha mostrado un dato final de junio inferior tanto al dato estimado, como al del mes previo, 78.1 vs 79.2(e) vs 78.9(p).
En Europa, las cifras de PMI Markit preliminares de junio han seguido recuperándose, aunque con valores por debajo del 50 tanto en Manufacturing, donde el dato fue superior tanto al dato estimado como al dato previo, con 46.9 vs 45.0(e) vs 39.4(p), como en Services, donde el rebote fue más fuerte, siendo el dato superior tanto al dato estimado como al dato previo, con 47.3 vs 41.5(e) vs 30.5(p). Alemania publicó los indicadores IFO de junio, tanto de clima de negocios, cuyo resultado fue superior tanto al dato estimado como al dato previo, 86.2 vs 85.0(e) vs 79.5(p), como de expectativas, también superior al dato estimado y al previo, 91.4 vs 87.0(e) vs 80.1(p).
Segunda semana consecutiva de mejor comportamiento de las bolsas europeas frente a EE.UU. como consecuencia de la mejor gestión de la pandemia, la menor incertidumbre política, la solidaridad que se comienza a ver entre países en forma de paquetes de ayudas a los países más debilitados y, finalmente, por el sistema de ayudas a los desempleados que se traducirán en una menor caída del consumo en la zona.
Mientras la economía global siga ganando tracción y las políticas monetarias y fiscales sigan siendo acomodaticias, los mercados europeos podrían seguir haciéndolo mejor que el americano durante la segunda mitad del año. Adicionalmente, los inversores globales están muy poco invertidos en la zona, por lo que un reequilibrio de las carteras se traduciría en un enorme flujo de capital hacia la zona.