La mejora de las cotizaciones de los valores relacionados con los metales ha sido importante desde el año pasado. Cabe destacar una excepción que por su notoriedad vamos a mencionar: Arcelor Mittal. Es curioso que esta compañía no haya dejado de caer desde que presentara sus resultados, alcanzando un descenso acumulado de casi un 10% desde enero.
Hasta el día de ayer todo parecía propicio. La cotización de los metales subiendo (sólo una parte atribuible a la depreciación del dolar) aunque el Niquel ha mostrado una cierta debilidad últimamente con una caída fuerte de los futuros, la actividad poco a poco mejorando y, en general, un entorno abonado para el florecimiento de este sector después de ajustes dramáticos durante años. Sin embargo, una noticia convierte este escenario en un poco menos maravilloso de lo que en un principio pudiera parecer, "sobrecapacidad" y "pérdidas para la industria del acero".
http://news.xinhuanet.com/english/china/2014-04/28/c_133296042.htm
http://www.chinadaily.com.cn/business/2014-04/29/content_17472605.htm
Según como lo miremos hay una noticia buena y otra mala. La buena noticia se refiere a la producción que sigue aumentando pero a un ritmo menor y la mala consiste en una sobrecapacidad junto con una contracción de la demanda que siguen ahogando al sector. Otra buena noticia a medio-largo plazo podría ser que el sector del metal chino comienza a ser consciente de la baja rentabilidad y a sufrir costes cada vez mayores y peores condiciones de financiación. Todo ello puede conducir a una racionalización de la producción que, finalmente, se traduzca en unas condiciones menos duras para los actores que continúen en este mercado.
No obstante, hoy por hoy el entorno no es el ideal para el crecimiento de un sector que viene sufriendo desde hace unos años. Una recuperación mundial más vigorosa ayudaría a impulsar la demanda como consecuencia de las necesidades de la industria de automoción, sector de construcción, industria minera e industria metal-mecánica, entre otras.
Personalmente, creo que este sector debería ir mejorando de la mano de la recuperación económica pero esta es sólo mi opinión. Lo que sí es cierto es que quién no confíe en una recuperación no debería apostar por los metales. Y, aunque se apueste por ella, no estamos exentos de sufrir algunos sustos por el camino.