Ayer, un día antes de la decisión de tipos de la FED, las bolsas de Estados Unidos corrigieron levemente, obviando claramente las fuertes correcciones que se están produciendo en Europa desde que las encuestas están dando ventaja al Brexit. Los nervios del viejo continente no se están trasladando a las bolsas de Norteamérica. Ellos siguen teniendo a sus índices bastante cerca de máximos anuales y se mantiene claramente por encima de las medias móviles principales. Ayer, por ejemplo, el S&P500 se giró al alza al tocar la media de 50 sesiones y cerró bastante lejos de los mínimos de la sesión, lo cual ha posibilitado una madrugada tranquila en las bolsas asiáticas y una apertura claramente positiva en las bolsas europeas.
Tenemos la sensación de que los inversores americanos no están tan preocupados por el Brexit y sí que están más pendientes de la reunión de hoy de la FED. Ellos pueden considerar que toda la incertidumbre geopolítica internacional puede repercutir en un discurso mucho menos agresivo por parte de Yellen y entienden que lo más probable vuelva a ser que la subida de tipos se retrase a después del verano. Según los futuros de fondos federales, la probabilidad de que suban los tipos ha pasado del 34% de finales de mayo al 0% actual. Es más, le dan un 2% de probabilidad al escenario de que los tipos vuelvan a bajar un cuarto de punto.
Para julio hay un 17% de probabilidad de subida frente al 55% de final de mes. Hay que irse a la reunión de diciembre para encontrar igualdad en probabilidades de aumento de tipos y de mantenerlos. La probabilidad de aumento es del 30.6% para septiembre, del 33.5% para noviembre (no hay en octubre) y del 49% en diciembre. Las bolsas de Estados Unidos llevan años beneficiándose de los tipos bajos de la FED y, aunque habían reaccionado muy bien a la posibilidad de que hubiera una subida de tipos este verano, en realidad entendemos que siguen prefiriendo que los tipos sigan bajos. Sobre todo porque el dólar se está estabilizando o incluso debilitando frente a la mayoría de divisas y eso permite que sus compañías sigan ganando competitividad e importan inflación. Evidentemente, el dólar pierde terreno frente a mayoría de divisas salvo frente a la libra y al Euro porque en Europa seguimos sin ser capaces de vislumbrar un proyecto de Unión Europea de futuro.
Visto el S&P500, lo que estamos viendo hoy en las bolsas europeas parece un mero rebote técnico. Decíamos ayer que el Ibex había perdido el 8.250 y el Eurostoxx el 2.855 y que hasta que no hubiese un cierre por encima de estos precios no nos podíamos fiar del rebote y no era conveniente abrir posiciones alcistas. Hoy ambos índices están cerca de estos niveles, pero habrá que esperar al cierre o mejor a la apertura de mañana (una vez conozcamos la rueda de prensa de Yellen) para tomar la decisión. Además comentábamos que el Dax podría ser el que lideraría las bolsas europeas. Pues ayer mantuvo el soporte de 9.500 puntos y hoy está iniciando un tímido rebote. Mientras el Dax no pierda el 9.500, podemos estar apostando por un suelo en las bolsas europeas. Además, ayer algún informe que circulaba por el mercado decía que Alemania podría ser uno de los países que se podría beneficiar indirectamente del Brexit, puesto que muchas compañías de Reino Unido están informando que si hay Brexit, se domiciliarían en Alemania o en Francia.
Pero tal y como hemos comentado en el titular de las claves, no sabemos si puede haber algo más que un mero rebote técnico. El GAP entre el comportamiento de las bolsas europeas y de Estados Unidos que lleva años ampliándose, se ha vuelto a incrementar en las últimas semanas. Si actualizamos el comportamiento relativo de las principales zonas geográficas frente al MSCI World, vemos que volvemos a tener al relativo de Estados Unidos y de Emergentes en zona de resistencias y al de Europa en zona de soportes.
En el gráfico de valor relativo vemos que el S&P500 está en la parte superior del canal alcista o muy cerca. Igualmente vemos que el MSCI Emerging markets está en la parte superior del canal bajista y el MSCI Euro Index está en la parte inferior del canal bajista del último año y muy cerca de la zona de mínimos desde 2011.
Atendiendo a estos gráficos, no descartamos que (evidentemente si no hay Brexit), los inversores vuelvan a apostar por la renta variable europea frente a emergentes y EE.UU. Las correcciones de las últimas semanas donde están generando oportunidades es en las bolsas europeas.
Siguiendo con las bolsas europeas, estos días hemos venido comentando que el sectorial bancario había roto el triángulo por la parte inferior y que podría irse a la zona de mínimos del año o incluso a la base del canal. Hoy podemos observar que ayer se paró en la zona de mínimos del año y hoy es sectorial que más está subiendo en las bolsas europeas enjuagando todas las pérdidas del día de ayer. En el gráfico vemos que, aunque es un rebote técnico, la zona en la que se está produciendo es bastante buena para intentar una entrada a largo plazo.
El valor en libros del sector bancario de la zona euro tocó ayer justo el nivel de 50%. Estos niveles sólo han sido más bajos a principios de 2009 y los veranos de 2011 y 2012. En esos momentos se descontaban riesgos de solvencia y hoy lo que se descuenta son riesgos de reducción de beneficios futuros, por lo que los bancos a estos niveles, al menos, son un activo a vigilar.