A partir del año 2007, comienza en la BVC la ola de masivas inscripciones de nuevos emisores en el RNVE, con el fin de realizar OPAS ante un mercado expectante, si bien es cierto, la mayor hasta el momento ha sido la de Ecopetrol, quien democratizo el 10% de su composición accionaría y está a la espera de ofrecer otro 10% durante el trascurso del año 2013.
Adicionalmente, durante estos últimos tres años, emisores de la talla de ISAGEN, ISA, Pacific Rubiales, Grupo Aval, Conconcreto, Avianca, entre otros, han realizado a su vez inscripciones para listar sus títulos, no obstante esta situación, la cantidad de emisores registrados en el país, es inferior a la de sus pares de la región tal, no obstante esta situación puede encontrarse sustentada en la cantidad de procesos, tiempo y dinero necesarios para que una compañía encuentre su título listado en la BVC.
De esta manera el reto es no solo convertir a la BVC en una plaza atractiva para que empresas extranjeras listen sus títulos, sino para que las empresas locales comiencen a apalancar sus planes de crecimiento y consolidación por medio de la consecución de recursos en esta, es así como deben determinarse marcos regulatorios que sean compatibles con los estándares internacionales para evitar que las empresas deban acoplar su información contable al modelo colombiano.
Considerando que las emisiones de acciones se realizan para apalancar planes de expansión y consolidación empresarial, se esperaría que esta fuese utilizada para tales fines por una amplia cantidad de empresas Colombianas y foráneas, no obstante considerando el incremento en el valor patrimonial y su impacto en el costo promedio ponderado de capital (WACC), así como la dilución del capital de los actuales accionistas, so causales para considerar esta forma de apalancamiento financiero como un recurso posterior a la emisión de títulos de deuda privada.
