29 sesiones son ya las que lleva moviéndose el S&P500 entre 2.250 y 2.280 puntos. Un rango inferior al 1,5% es algo muy poco habitual y más si estamos hablando de sesiones que incluyen el cierre y apertura de año. Ni siquiera la toma de posesión de Trump al frente del gobierno de los Estados Unidos, o el discurso de Theresa May abogando por el Brexit duro, han sido capaces de sacar las bolsas de una tremenda fase de letargo. En el siguiente gráfico podemos ver el lateral comentado y cómo coincide este con la mitad del rango del canal alcista iniciado en mínimos del año pasado.
Evolución del S&P500 en los 12 últimos meses. En el gráfico vemos por el RSI que este movimiento lateral, al menos, está sirviendo para reducir la fuerte sobrecompra alcanzada tras la fuerte subida de noviembre y diciembre.
En Europa la situación no difiere en exceso. El Eurostoxx 600 lleva 27 sesiones moviéndose entre 358 y 366 puntos, un rango del 2,2%, en torno a la media de 500 sesiones y la mitad del canal alcista iniciado en febrero del año pasado. Igualmente, el RSI está saliendo de la zona de sobrecompra, lo cual es positivo y abre la posibilidad de que se pueda estar formando las bases para un nuevo tramo alcista.
Mientras tanto, como finalmente el dólar no se ha disparado al alza, sino que está corrigiendo frente a la mayoría de divisas, la renta variable emergente está subiendo. Hasta el punto que está intentando superar la línea que une los máximos desde 2015, como podemos observar en el gráfico del MSCI Emerging Markets. Además, el índice cotiza claramente por encima de las medias de 50, 200 y 500 sesiones. De mantenerse la situación actual de lateral en Europa y Estados Unidos, junto a debilidad en el dólar, los emergentes pueden romper al alza, atrayendo a los inversores.
A la vista de los dos primeros gráficos, da la sensación de que los inversores están en una situación similar a la que nos encontramos nosotros. Estar dentro del mercado y dejar algo de pólvora en la recámara por si hay recortes poder aumentar riesgos. Hay tanta liquidez en el mercado que al más mínimo recorte, el dinero vuelve a asumir riesgos. Pero tampoco hay argumentos como para justificar una ruptura del lateral alcista. Y como emergentes sí que corrigieron en diciembre, la liquidez ha buscado estos activos.
Otra explicación es que seguimos en el lateral con un comportamiento muy dispar según sectores. Los inversores siguen tratando de buscar las compañías que más se beneficien o perjudiquen por las futuras políticas del nuevo gobierno americano. Pues casi mejor es buscar compañías que nada o poco tengan que ver con Trump, ni para lo bueno ni para lo malo. Hemos visto que desde las elecciones han subido las compañías más cíclicas (bancos, energía, materias primas, industriales), subió fuertemente el Dólar, y corrigieron fuertemente los bonos y las compañías defensivas. Sin embargo a raíz de su primera rueda de prensa en la que enarboló el proteccionismo, el movimiento que se está produciendo es el contrario. Apostar a una u otra cara de la moneda tiene bastante riesgo. Creo que el proteccionismo a corto plazo beneficia a compañías americanas y perjudica sobre todo a emergentes. Europa no tendría que verse demasiado afectada. Pero a largo plazo, el proteccionismo es un problema para el país que lo defiende ya que encarece importaciones, acelera la inflación y presiona a su banco central para que suba tipos y sobre todo, hace que las compañías norteamericanas pierdan competitividad. Y las compañías cotizadas de Estados Unidos (sobre todo el S&P500 y Dow Jones Industrial) son multinacionales, por lo que la pérdida de competitividad futura puede penalizarlas en favor de las europeas.
Si ataca a China, Japón, Canadá etc…, estos mejorarán sus lazos comerciales con Europa. A pesar del Brexit, Reino Unido reitera que mantendrá relaciones comerciales con la Eurozona, por lo que entiendo que las compañías europeas presentan un binomio rentabilidad-riesgo más atractivo a medio plazo. La semana pasada vimos que por comportamiento relativo, Europa está a punto de dar una señal alcista, por lo que deberemos estar atentos al comportamiento de los mercados las próximas sesiones o semanas, ya que Trump podría hacer un gran favor a la renta variable Europea, o incluso emergente frente a lo que la mayoría opina.