Este pasado 2013 ha sido nuevamente un año complicado para la generalidad de los sistemas de trading. Otra vez toca comparar los que uno elige habitualmente con el universo de los disponibles dentro y fuera de España.
Hay dos aspectos que cabe destacar a modo de consuelo parcial si se quiere.
- Muchos sistemas (entre otros algunos de los que yo uso por suerte) han tenido un buen último trimestre como venía siendo habitual en su historia y ya remarqué hace algún tiempo en este post. Eso nos ha permitido en algunos casos terminar el año a la par o con pérdidas ligeras y en otros incluso acabar ganando también ligeramente. Esta ha sido la realidad de muchos sistemas este año pasado.
- El rendimiento de los sistemas que usamos, que han sido seleccionados con los mejores análisis disponibles, han funcionado “de la mejor manera que el mercado nos ha permitido”. Vean como han quedado los índices de referencias para el año:
Como se puede apreciar, el comportamiento es bastante homogéneo a nivel mundial y coincide muy muy bien con el que hemos sufrido nosotros en casa:
La caída desde el mes de abril (en realidad empezó a mediados de mayo) fue muy severa y duró hasta bien entrado el mes de septiembre. Sin embargo, desde que empezó la recuperación también se ha recuperado mucho. No todo, pero si bastante (calculo que entre un 40 y un 50% dependiendo del sistema).
De tal manera que nuestro sufrimiento ha sido general y parecería que empieza a terminar. Ojalá. Con todo y con esto es no quita que haya sido un año malo para muchos sistemas y el segundo consecutivo. Tampoco podemos obviar que las volatilidades que hemos sufrido ni de lejos compensan los retornos que hemos tenido en el mejor de los casos. Pero sobre eso vamos a hablar otro día.
Ahora toca analizar que sistemas pondríamos hoy si tuviéramos que empezar a operar con sistemas y marcar una estrategia para 2014. Para ello necesariamente tenemos que elegir unas premisas de comportamiento del mercado subyacente y con base en ese elegir los sistemas que creemos que mejor se van a adaptar en cada categoría.
¿Qué espero para el año 2014?
Las que yo he elegido son las siguientes:
Aunque cada mercado es un mundo (incluso dentro de la misma categoría) creo que la tónica para el año va a ser tendencia alcista (bolsas y dólar) subyacente pero mucho más moderada a 12 meses vista de la que hemos tenido este año. La volatilidad media del año será más alta que el año pasado (de hecho ya lo es) con picos muy altos en 2 (max 3) periodos concretos. Es decir, condiciones algo mejores que las del 2013. Por lo tanto es de esperar que los sistemas de RV se comporten un poco mejor que en 2013 pero no tanto como en periodos de alta volatilidad como el último semestre de 2008 o la segunda mitad de 2011. Pienso que será un año algo más parecido al año 2006. No voy a entrar en los motivos por los cuales pienso esto, pero creo que están bien fundamentados (retirada de estímulos en USA, niveles altísimos en RV, consensos de analistas, etc).
Así pues, he buscado sistemas que entiendo que se van a comportar bien en esas circunstancias. Que hayan demostrado en el pasado que han funcionado bien con alta volatilidad (fácil) pero que también se han defendido perdiendo o ganando poco con baja. Sistemas que, como siempre, hayan demostrado que no han sido sobreoptimizados.
He seleccionado 4 sistemas totalmente distintos. No son ni los más rentables de la historia ni del año pasado. Son los que mejor, en mi opinión, se han adaptado en el pasado a las condiciones que planteado antes y que me dan garantías de no estar sobreoptimizados. Como siempre los números que presento son netos de todos los costes. Están actualizados a 20 de diciembre (si, llevo mucho tiempo preparando este post). Son los siguientes:
Sistema 1 (saldo inicial 10.000€): intradiario sobre Eur/Usd
Sistema 2 (saldo inicial 8.000€): intradiario sobre miniDow
Sistema 3 (saldo inicial 21.000€): intradiario sobre Dax
Sistema 4 (saldo inicial 10.000€): continuo sobre miniRussell
Cualquiera de estos 4 sistemas es una buena opción para tener el año presente. Además, combinarlos los 4 en una cartera no es mala idea tampoco. Los números que salen son los siguientes:
Y con algo más de detalle:
Ahí se pueden observar los rendimientos numéricos de los últimos 3 años. Tanto la rentabilidad como las pérdidas máximas sufridas.
Como verán el sistema de Dax aporta el 43% del riesgo total a la cartera y el tiempo auditado/real promedio de la cartera es de 13 meses.
Un aspecto importantísimo que tiene esta cartera es la correlación entre los sistemas. De las gráficas individuales de arriba se puede observar que la correlación durante el año pasado ha sido baja, lo cual es bueno porque garantiza que las buenas y malas rachas no ocurren en los mismos momentos. Naturalmente el sistema del Dax pesa mucho tanto para lo buenos como para lo malo, pero aun así complementan bien. Vean la tabla:
El sistema 1 y el 2 tienen la correlación más alta y no es tampoco para sorprenderse. Pero es que además, la correlación histórica entre los sistemas es bastante semejante a esta y, créanme, esto es extraordinariamente raro.
Lo habitual es que en sistemas que son ganandores a largo plazo como estos, las correlaciones tiendan a ser altas en el largo plazo. En este caso no es así. En 2012 las correlaciones estuvieron entre –0.5 y +0.5 y en 2011 fueron semejantes a las de 2013.
La correlación entre los sistemas de una cartera es VITAL. Algún día escribiré sobre eso, pero baste decir ahora que si las correlaciones son bajas históricamente, es más fácil que se mantengan así y por lo tanto que la probabilidad de que todos entren en mala racha (o buena) a la vez, es menor.
¿Si quisiéramos operar esta cartera que capital tendríamos que colocar?
Como saben hay multitud de maneras de dimensionar el capital inicial de una cartera. En mi opinión el escenario más conservador es el que sale de calcular para cada sistema el punto de desconexión (pueden ver como en este video desimulación del drawdown futuro) y sumarlo a sus garantías y hacer eso para todos los sistemas de la cartera. Digo que es el más conservador porque implica pensar que TODOS los sistemas de la cartera van a llegar a su punto de desconexión al mismo tiempo. En ese supuesto catastrófico, la cuenta se quedaría sin dinero para las garantías y por tanto no podríamos seguir operando. Obviamente esto es MUY IMPROBABLE que ocurra. No obstante está bien tener ese número en la cabeza. En este caso ese número sale 50.000€.
Otro escenario quizá más realista es calcular la simulación del drawdown máximo futuro de la cartera y sumarle las garantías que requiere la misma. En este caso la cartera completa no debería tener un DD mayor a 15.000€, con lo cual el saldo de partida debería ser de 25.000€ aproximadamente (este es el que he usado para los gráficos de más arriba).
Con este saldo en 2013 habríamos ganado +30%, en 2012: +76% y en 2011: +116%. Siempre con alta volatilidad como se ha visto. En promedio estaríamos arriesgando un 5% del saldo cada día que los 4 sistemas estén abiertos a la vez. Un apalancamiento alto.
Iremos vigilando estos sistemas a lo largo del año para ver como responden a las expectativas. Pero antes de eso déjenme que les ponga la tabla de desconexión. O, dicho de otro modo, el punto en el que yo me plantearía que el sistema está funcionando mal y hay que desconectarlo:
Aunque el proceso de desconexión tiene una parte ciertamente muy objetiva, es verdad que hay que poner un poco “contexto” antes de tomar la decisión. Por ejemplo, no será lo mismo que un sistema llegue a este punto cuando el resto de los sistemas semejantes están funcionando mal que que sea la “oveja negra” de la manada. ¿Cierto?
Bueno, espero que les haya sido de utilidad el artículo y que comenten, valoren y distribuyan si así ha sido.
Saludos y suerte en el trading,
Horace