Lo aprendido de los mejores

21 de enero, 2014 1

Después de una amplia revisión de los textos sagrados sobre inversión se destilan ciertos principios universales para crear y proteger nuestras inversiones, tanto de fenómenos exógenos como endógenos. Pero esto es solamente el primer paso, el resto del camino debemos construirlo nosotros mismos y como buenos peregrinos necesitamos recordar de cuando en cuando los mandamientos aprendidos.

HOMO ESPECULATOR

En la vida elegante de la bolsa no hay que convencer a nadie para que haga o deje de hacer esto o aquello, lejos de mancharse las manos con las mercancías, libre de confrontaciones con un cliente nervioso. Pero hay astutos enemigos «impuestos, inflación y comisiones» que se infiltran encubiertos tras nuestras defensas para atacar nuestro capital. En este fabuloso mundo hay dos tipos de seres humanos:

El especulador a corto plazo se mantiene activo con la «radiactividad» del dinero, su objetivo es una transacción determinada, negocia varios títulos al mismo tiempo impulsivamente, se vale de diversos valores: acciones, bonos, divisas, metales preciosos, materias primas y sus operaciones se cubren unas con las otras, lleva una vida inquieta e intranquila con tanta actividad y su espíritu no descansa nunca.

Un inversor a largo plazo, por su parte es paciente, reflexiona sumido en sí mismo, razonadamente, es un espectador tranquilo, es un aristócrata, un noble que puede disponer de su tiempo con libertad envuelto por el aromático humo de su habano, se sienta cómodamente en su mecedora y medita alejado del mundo de los ruidos ¡Qué profesión tan señorial!.

 

“No hay diferencia entre comprar una empresa o comprar acciones, ambos casos te convierten en propietario”

 

“Prefería ser dueño de algunas empresas excelentes que de muchas empresas mediocres”

LOS CAPRICHOS DE LA LOGICA

Para muchos, invertir no significa mucho más que ver los gráficos de los precios de las acciones, que frecuentemente se parecen a las caminatas de un borracho, en lugar de centrar su atención en empresas con resultados estables y con buenos pronósticos a largo plazo.

La matemática bursátil no se corresponde con la matemática que nos enseñan en la escuela, dos por dos en la bolsa raramente son cuatro sino que 2 x 2 = 5 – 1. Cuando un ingeniero construye un puente sus cuentas tienen que ser matemáticamente exactas, si se construyera ese puente de acuerdo con la fórmula  se derrumbaría con el 5 antes de llegar al 4. Y de ese mismo modo se derrumbará el jugador de bolsa si no tiene el suficiente temple y sobre todo, el suficiente dinero para esperar hasta que llegue ese indispensable «menos uno».

“Si la empresa está ganando, después de un tiempo, la acción lo sigue”

“El mercado puede mantener su irracionalidad más tiempo que usted puede mantener su solvencia”

 FANATICOS Y CHARLATANES

Los conquistadores Españoles del siglo XVI estaban obsesionados con la mística ciudad de El Dorado, no obstante no se descubrió jamás. Los conquistadores actuales han cambiado su armadura por corbatas de Hermes y cuentan con un arsenal de teorías visionarias basadas en argumentos que caen en el campo del ocultismo para predecir la evolución de la bolsa.

¡Deja de prestar oídos a los profesionales!. Es suficiente con dar un agradable paseo por las bibliotecas para descubrir los dos únicos pilares sobre los que se apoya el mercado, «liquidez» y «expectativas»; si uno de los factores supera al otro ligeramente, ocasiona un suave movimiento al alza o a la baja, pero cuando ambos factores pasan a ser positivos o negativos, el movimiento se traduce en bruscas sacudidas que se irán encauzando nuevamente con el  paso del tiempo de acuerdo con los pilares fundamentales.

 

“Lo único que está claro es que la bolsa primero subirá y luego bajara, no necesariamente en este orden”

 

“Si no quiere tener una acción durante diez años, ni piense en tenerla diez minutos”

 

DAVID CONTRA GOLIAT

Cuando se trata de invertir, el principal obstáculo no es la ignorancia, sino la ilusión del conocimiento. Parecemos ser adictos a la información, todos estamos obsesionados con aprender cada vez mas de cada vez menos, hasta que acabamos sabiendo absolutamente todo de nada, ¡Qué desatino!.

Quien posea una cartera de valores bursátiles deberá, de vez en cuando, tomar papel y  lápiz para comprobar los procesos objetivos que nos han llevado a tomar una decisión y mantenerse firme a ellos cuando los argumentos siguen siendo validos.

El inversor experimentado no es más inteligente que el resto, es más disciplinado, se mantiene sereno cuando se desata el apocalipsis y se prepararse anímicamente para salir con humildad durante la euforia generalizada.

“Conservar tu efectivo es incomodo, pero no tanto como perderlo”

“Hay que ir en contra de la tendencia, no correr tras ella”

 

CASTILLO DE NAIPES

En última instancia no son los mercados, ni las compañías quienes determinan el margen de una operación, es el propio inversor. No tiene que hacer grandes acciones para conseguir resultados extraordinarios, pero el tiempo de espera puede ser indefinido y tiene que vencer invisibles y poderosas energías.

Las fuerzas psicologías nos desvían y arrastran incluso más allá de los datos fundamentales en periodos de euforia general, pero debe ser totalmente realista para salirse de la corriente al alza y recoger los beneficios. Puede que se lleve un mal rato y sienta el impulso de mirar atrás, como hizo la bíblica mujer de Lot, pero corre el riesgo de convertirse en estatua de sal, en castigo por su curiosidad.

Pero lo más difícil de todo es aceptar una pérdida en la bolsa, es doloroso al igual que cuando tenemos un daño físico real, sin embargo el inversor debe reflexionar y responder la siguiente pregunta «compraría estas acciones si no las tuviera ya» para quedar en paz con su conciencia.

 

“Nunca subestime el valor de no hacer nada”

 

“En el mundo de la inversión el peor enemigo es uno mismo”

 

EL ARTE ES ETERNO

El especulador en bolsa igual que el jugador de ruleta vive casi una embriaguez cuando gana; pero su segundo placer es perder, pues su satisfacción radica en la excitación nerviosa y no en el dinero, sin ni siquiera darse cuenta que después de cualquier lanzamiento siempre vendrá un próximo.

Los fundamentos y estrategias de inversión no contienen formulas avanzadas o términos técnicos difíciles de comprender. Están basadas en principios y reglas simples, invertir en «buenas empresas» con «buenos precios», aunque suene obvio, la mayoría de los jugadores no son capaces de seguir estos dos principios, buscan chispeantes métodos que destacan como un faro en medio de la noche y se dejan seducir por fantásticas promesas, cuanto más increíbles e improbables sean, mayor será el número de seguidores.

“Un titulo no sabe que le pertenece a usted”

“Prefiero una empresa maravillosa a buen precio que una buena empresa a un precio maravilloso”

 

Esta filosofía es aplicada y mostrada desde la creación de mi cartera personal en  http://finanzasconfinanzas.blogspot.com.es/

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Este artículo tiene 1 comentario
Muchas gracias por el articulo. Que bueno es recordar estos principios generales, tan fáciles de comprender y tan difíciles de seguir en los malos momentos. Deberíamos tenerlos en mayúsculas y en negrita al lado del ordenador.
Saludos, Victor Duran.
22/01/2014 19:25
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