Después de una amplia revisión
de los textos sagrados sobre inversión se destilan ciertos principios universales
para crear y proteger nuestras inversiones, tanto de fenómenos exógenos como endógenos.
Pero esto es solamente el primer paso, el resto del camino debemos construirlo
nosotros mismos y como buenos peregrinos necesitamos recordar de cuando en
cuando los mandamientos aprendidos.
HOMO
ESPECULATOR
En la vida
elegante de la bolsa no hay que convencer a nadie para que haga o deje de hacer
esto o aquello, lejos de mancharse las manos con las mercancías, libre de
confrontaciones con un cliente nervioso. Pero hay astutos enemigos «impuestos,
inflación y comisiones» que se infiltran encubiertos tras nuestras defensas
para atacar nuestro capital. En este fabuloso mundo hay dos tipos de seres
humanos:
El
especulador a corto plazo se mantiene activo con la «radiactividad» del dinero,
su objetivo es una transacción determinada, negocia varios títulos al mismo
tiempo impulsivamente, se vale de diversos valores: acciones, bonos, divisas,
metales preciosos, materias primas y sus operaciones se cubren unas con las
otras, lleva una vida inquieta e intranquila con tanta actividad y su espíritu
no descansa nunca.
Un inversor a
largo plazo, por su parte es paciente, reflexiona sumido en sí mismo,
razonadamente, es un espectador tranquilo, es un aristócrata, un noble que
puede disponer de su tiempo con libertad envuelto por el aromático humo de su
habano, se sienta cómodamente en su mecedora y medita alejado del mundo de los
ruidos ¡Qué profesión tan señorial!.
“No hay
diferencia entre comprar una empresa o comprar acciones, ambos casos te
convierten en propietario”
“Prefería ser dueño de algunas empresas
excelentes que de muchas empresas mediocres”LOS CAPRICHOS DE LA LOGICA
Para muchos, invertir no significa mucho más que ver
los gráficos de los precios de las acciones, que frecuentemente se parecen a
las caminatas de un borracho, en lugar de centrar su atención en empresas con
resultados estables y con buenos pronósticos a largo plazo.
La matemática bursátil no se corresponde
con la matemática que nos enseñan en la escuela, dos por dos en la bolsa
raramente son cuatro sino que 2 x 2 = 5 – 1.
Cuando un ingeniero construye un puente sus cuentas tienen que ser
matemáticamente exactas, si se construyera ese puente de acuerdo con la
fórmula se derrumbaría con el 5 antes de llegar al 4. Y de ese mismo modo
se derrumbará el jugador de bolsa si no tiene el suficiente temple y sobre
todo, el suficiente dinero para esperar hasta que llegue ese indispensable
«menos uno».
“Si la empresa está ganando, después de
un tiempo, la acción lo sigue”
“El mercado puede mantener su irracionalidad
más tiempo que usted puede mantener su solvencia”
FANATICOS Y CHARLATANES
Los
conquistadores Españoles del siglo XVI estaban obsesionados con la mística
ciudad de El Dorado, no obstante no se descubrió jamás. Los conquistadores
actuales han cambiado su armadura por corbatas de Hermes y cuentan con un
arsenal de teorías visionarias basadas en argumentos que caen en el campo del
ocultismo para predecir la evolución de la bolsa.
¡Deja
de prestar oídos a los profesionales!. Es suficiente con dar un agradable paseo
por las bibliotecas para descubrir los dos únicos pilares sobre los que se
apoya el mercado, «liquidez» y «expectativas»; si uno de los factores supera al
otro ligeramente, ocasiona un suave movimiento al alza o a la baja, pero cuando
ambos factores pasan a ser positivos o negativos, el movimiento se traduce en
bruscas sacudidas que se irán encauzando nuevamente con el paso del
tiempo de acuerdo con los pilares fundamentales.
“Lo único que está claro es que la bolsa primero subirá y luego bajara,
no necesariamente en este orden”
“Si no quiere tener una acción durante diez años, ni piense en
tenerla diez minutos”
DAVID CONTRA GOLIATCuando se
trata de invertir, el principal obstáculo no es la ignorancia, sino la ilusión
del conocimiento. Parecemos ser adictos a la información, todos estamos
obsesionados con aprender cada vez mas de cada vez menos, hasta que acabamos
sabiendo absolutamente todo de nada, ¡Qué desatino!.
Quien posea una cartera de valores
bursátiles deberá, de vez en cuando, tomar papel y lápiz para
comprobar los procesos objetivos que nos han llevado a tomar una decisión y
mantenerse firme a ellos cuando los argumentos siguen siendo validos.
El inversor experimentado no es más
inteligente que el resto, es más disciplinado, se mantiene sereno cuando se
desata el apocalipsis y se prepararse anímicamente para salir con humildad
durante la euforia generalizada.
“Conservar tu efectivo es incomodo, pero no tanto como perderlo”
“Hay que ir en contra de la tendencia, no correr tras ella”
CASTILLO DE
NAIPESEn última
instancia no son los mercados, ni las compañías quienes determinan el margen de
una operación, es el propio inversor. No tiene que hacer grandes acciones para
conseguir resultados extraordinarios, pero el tiempo de espera puede ser
indefinido y tiene que vencer invisibles y poderosas energías.
Las fuerzas
psicologías nos desvían y arrastran incluso más allá de los datos fundamentales
en periodos de euforia general, pero debe ser totalmente realista para salirse
de la corriente al alza y recoger los beneficios. Puede que se lleve un mal
rato y sienta el impulso de mirar atrás, como hizo la bíblica mujer de Lot,
pero corre el riesgo de convertirse en estatua de sal, en castigo por su
curiosidad.
Pero lo más
difícil de todo es aceptar una pérdida en la bolsa, es doloroso al igual que
cuando tenemos un daño físico real, sin embargo el inversor debe reflexionar y
responder la siguiente pregunta «compraría estas acciones si no las tuviera ya»
para quedar en paz con su conciencia.
“Nunca
subestime el valor de no hacer nada”
“En el
mundo de la inversión el peor enemigo es uno mismo”
EL ARTE ES
ETERNOEl
especulador en bolsa igual que el jugador de ruleta vive casi una embriaguez
cuando gana; pero su segundo placer es perder, pues su satisfacción radica en la
excitación nerviosa y no en el dinero, sin ni siquiera darse cuenta que después
de cualquier lanzamiento siempre vendrá un próximo.
Los fundamentos y estrategias de inversión no
contienen formulas avanzadas o términos técnicos difíciles de comprender. Están
basadas en principios y reglas simples, invertir en «buenas empresas» con «buenos precios»,
aunque suene obvio, la mayoría de los jugadores no son capaces de seguir estos
dos principios, buscan chispeantes métodos que destacan como un faro en medio
de la noche y se dejan seducir por fantásticas
promesas, cuanto más increíbles e improbables sean, mayor será el número de
seguidores.
“Un titulo no sabe que le pertenece a usted”
“Prefiero una empresa maravillosa a buen precio que una buena empresa a un
precio maravilloso”
Esta filosofía es aplicada y mostrada desde la creación de mi cartera personal en http://finanzasconfinanzas.blogspot.com.es/