Momentos
cómo los actuales son de gran interés para saber si valemos de verdad
para estar en los mercados.
Si
estos días estás viendo el mercado como una enorme oportunidad y te
levantas pensando que cuanto más bajan los mercados (IAG a dos
euros, ¡por Dios!), más subirán tus beneficios próximamente; si
no haces más que calcular medias y analizar los mejores futuros momentos de entrada en
los valores, tu perfil es el ideal para estar en bolsa.
Si
en cambio durante estas jornadas temes que tu cuenta vaya a 0 (¡Esto
es el final!), piensas en vender todo aunque sea perdiendo un 60 % o
más del total de tu cartera y te arrepientes de no haber contratado
un depósito o un fondo garantizado, entonces es mejor no dedicarse a
esto.
Estas
dos almas conviven en todo inversor, pero en momentos como el actual es cuando surge el león o el avestruz que hay dentro de cada uno,
cuando nuestra verdadera naturaleza emerge de manera más evidente.