“Distinga lo importante de lo superfluo. El 80% del zumo se consigue con el 20% de la compresión. Hay unas cinco cosas que tener en cuenta antes de tomar una decisión. Las mejores opciones son las que tienen más ventajas que inconvenientes, no las que no tienen ningún inconveniente.”Principio de Ray Dalio gestor de Bridgewater
Cuando leí este párrafo me vino a la memoria un error cognitivos que cometemos los seres humanos con el riesgo cero. Las personas temen por igual una contaminación por productos químicos tóxicos de un 99% que de 1%. Reacción absurda pero habitual. Solo nos parece justificable el riesgo cero y estamos dispuestos a pagar grandes sumas de dinero por eliminar cualquier mínimo riesgo residual. Piense en la siguiente pregunta: ¿A qué velocidad habría que conducir por las carreteras para que no hubiera accidentes de tráfico? A un triste 0 km/h, sin riesgo no existiría nada de lo que seguramente nos apasiona, piénselo con detenimiento.
En 1972 se realizó un experimento donde se dividía a dos grupos. A uno se le decía que con seguridad recibirían una descarga eléctrica y al otro se le decía que el riesgo de recibir una descarga eléctrica solo sería del 50%. Los investigadores midieron la excitación corporal y no existía ninguna diferencia entre un grupo u otro. Entonces bajaron la probabilidad de recibir una descarga en el segundo grupo al 20%, luego al 10% y finalmente al 5%…el resultado fue sorprendente puesto que en ningún caso hubo ninguna diferencia, la excitación corporal no se redujo hasta colocarla en el 0% de recibir una descarga. Sin embargo cuando los investigadores incrementaron la potencia de la descarga la excitación corporal de todos los participantes incremento. Conclusión, reaccionamos a la dimensión esperada de un suceso pero no a su probabilidad. Por eso nos atraen las apuestas arriesgadas, los premios de la lotería, la inversión en mercados no regulados…se denomina “descuido de la probabilidad” y conduce una y otra vez a errores en la toma de decisión.
A menudo, los estados prefiere pagar grandes sumas de dinero por rebajar riesgos pequeño (ataques terroristas, contaminación, epidemias…) que usar ese dinero en disminuir otros grandes riesgos incluso teniendo este último mayor beneficio. No entendemos las diferencias entre proporciones y cantidades. La siguiente frase nos resulta muy preocupante: “las muertes por apuñalamiento han incrementado un 100%” pero si sigues leyendo, hemos pasado de una muerte al año a dos sobre una población muy amplia y eso es un porcentaje casi nulo.
En nuestro mundo financiero valoramos continuamente distintas opciones; comprar o vender, elegir un activo u otro, entrar apalancado o sin apalancar, usar una estrategia u otra, ir a corto plazo o largo… y conocemos a la perfección el binomio “Riesgo igual a Rentabilidad”, así que el riesgo cero implica nulos o muy bajos rendimientos además de que la seguridad total no existe por mucho que nos la vendan. Ni si quiera metiendo tus ahorros en un depósito en el banco hay riesgo cero. El banco puede quebrar, la inflación puede devorar tus ahorros, o una reforma monetaria podría acabar con tus bienes (recuerde que Alemania ha cambiado de moneda dos veces en cien años).
Hace unos meses hablando con un seguidor de la sala de trading observe que aunque le daba las probabilidades de éxito de nuestro sistema, las rentabilidades que obteníamos un mes tras otro… (a mi parecer un trabajo formidable) él no lograba entenderlas. En un afán de otorgarle la máxima transparencia para que se sintiera cómodo y entendiera los riesgos me di cuenta que algo que era realmente bueno no lograba apreciarlo ¿cuál es el problema? Que se nos nubla la mente cuando nos hablan en terminos estadísticos y no entendemos nada de nada. Más de la mitad de la población no comprende ni que significa que la probabilidad de lluvia para mañana es del 30%, haga la prueba. Hay personas que piensan que va a llover un 30% del tiempo, es decir, que habrá 7 horas de lluvia y 17 de buen tiempo, mientras que otros creen que va a llover en un 30% del territorio, y otros que de cada 3 meteorólogos, 3 opinan que lloverá y 7 que no. Las tres interpretaciones son erróneas, porque lo que los expertos quieren decir es que de cada 10 días con las circunstancias atmosféricas como las que se prevén para mañana, en 3 llovería y en 7 no. Como ven, la precisión predictiva no sirve de nada si no la entendemos. Lo simpático de todo esto es que da igual que la probabilidad de lluvia para mañana sea de un 30% o del 5% ya estaremos obsesionados con llevar el paraguas!
Luego nos quejamos cuando nos envían un mail vendiéndonos 2% mensuales con el capital garantizado… ¿Cómo podemos plantearnos estas opciones sin conocer realmente los riesgos? Además nos envían la información en plan masivo a ver quién pica… pero como nos hablan de riesgo cero, a pesar de ser mentira…nos apasiona! ¿Por qué cree que generan tanto negocio las compañías de seguros?
Despídase de la idea del riesgo cero y aprenda a vivir con que en la vida no hay nada seguro: ni sus ahorros, ni su salud, ni su matrimonio, ni sus amistades…consuélese con que haya algo lo bastantemente estable: nuestra propia felicidad. Busque su felicidad y siempre sea responsable de sus decisiones, basta ya de echar la culpa al estado, a la iglesia o a nuestros padres. Aprendamos de memoria la máxima del señor Ray Dalio, gestor del mayor Hedge Fund existente.
Un saludo, formese en análisis bursátil para conocer que acciones comprar en bolsa y buen trading.
