Los inversores, en muchas ocasiones, tendemos a pensar de forma local y a concentrar nuestras inversiones en aquellas empresas o índices más cercanos, como por ejemplo, Telefónica, Banco Santander o IBEX 35. Inconscientemente no nos damos cuenta de que existe vida más allá de los Pirineos; sin embargo, a la hora de invertir es fundamental tener una visión global de la economía y de los mercados. Para ello vamos a echar un vistazo a la situación del PMI Composite World (elaborado por JP Morgan) que recoge la situación de los sectores manufacturero y servicios a nivel global.
Como se puede apreciar, la situación del indicador es bastante positiva. Tras la importante recesión sufrida a nivel mundial durante el año 2008 y 2009, la economía global entró en expansión a finales del año 2009 y desde entonces ha venido mostrando un crecimiento lento pero sostenido. Es evidente que la desaceleración de la economía china así como la grave crisis de deuda de la Eurozona ha pasado factura al crecimiento mundial, pero en ningún momento el indicador ha entrado en recesión.
Por lo tanto, y si invertimos a nivel global (vía fondos de inversión o ETFs referenciados al MSCI World), lo más razonable es seguir manteniendo posiciones en renta variable, puesto que la economía mundial sigue expandiéndose; es más, conforme vaya solucionándose la crisis de la Eurozona y los países emergentes vuelvan a "tirar del carro" tras unos meses de ralentización de su economía (especialmente China), es de esperar que el indicador PMI Composite World continúe recuperando posiciones.
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