Podríamos iniciar un sesudo debate sobre la importancia de la experiencia, y el conocimiento que emana del mismo. No obstante, con objeto de centrarme en lo que considero esencial, voy a reconducir el debate señalando el hecho de que el conocimiento en sí mismo no tiene sentido hasta que se pone en valor, es decir, conocimiento aplicado. Cuando hablamos de conocimiento existen dos piezas fundamentales que usamos como elementos de construcción del mismo, los datos y la información.
Datos: Son las palabras, los números, las imágenes... Los hechos sin más, o sea, al denudo. Los datos tienen su origen en la experiencia, en mayor medida, y en lo aprendido, en menor medida, .
Información: Valor que atribuímos a los datos. Es algo así como darles un sentido, un contexto, un valor... El problema, aquí, es la influencia de nuestra subjetividad (opiniones, ideología, posicionamiento previo...) que contaminan, en cierta medida, las conclusiones que se transforman en información.
Por poner un ejemplo, si leemos "El PIB en el primer trimestre del año ha sido de 0,4", esto sería el dato. Transformado en información sería algo así como "El PIB en el primer trimestre ha caído mostrando una ralentización de la economía".
El éxito o fracaso en nuestra vida personal y/o particular depende, en gran medida, de nuestra capacidad para transformar datos en información y que dicha información sea correcta, entendiendo por correcta que nos permita alcanzar nuestros fines. A más datos, más posibles conexiones entre los mismos y más potencial información así como más completa y correcta. A más información útil, más conocimiento contextualizado de la realidad o el campo especifico y más probabilidad de éxito.
El dilema del más es más, el menos es menos, el menos es más y el más es menos
1) el más es más=el menos es menos
Cuánto más datos y más experiencia tienes más elementos y herramientas para componer un cuadro completo y exacto de la realidad. En definitiva, la conclusión aquí es que cuantos más datos tenemos mayor probabilidad de éxito habrá. De hecho, esto es evidente cuando contratamos a un profesional o cuando tomamos decisiones. La valoración es más completa cuando la cantidad de datos es mayor y evaluamos teniendo e cuenta el máximo de elementos posibles. También la repetición nos conduce a la perfección por el principio de prueba y error.
Uno de los problemas con los que podemos tropezarnos se enuncia perfectamente con la Ley de Pareto que dice que el 80% de los problemas o las consecuencias son atribuibles al 20% de las causas. Ello nos lleva a la segunda parte del dilema, donde, a parte de intentar eliminar aquéllo que ya no sirve, deberíamos buscar lo esencial simplificando al máximo e idenficando lo más importante para ignorar lo accesorio e irrelevante, ya que a veces más es menos.
2) el menos es más=el mas es menos
Como hemos señalado una enorme cantidad de datos puede hacernos perder el rumbo si no logramos identificar aquéllo que tiene mayor impacto y más relevancia. Por poner un ejemplo, una caída de los márgenes de beneficios de una empresa en un mercado que representa apenas el 1% del total no tiene la menor importancia si la compañía logra un aumento de ventas y beneficios en otro mercado que representa el 30% del total.
Por otro lado, la información o el conocimiento aprehendido en el pasado puede suponer una dificultad ya que impide tu adaptación a los cambios. Parafraseando al gran Bruce Lee "Vacía tu mente, sé amorfo, moldeable, como el agua. Si pones agua en una taza se convierte en la taza. Si pones agua en una botella se convierte en la botella. Si la pones en una tetera se convierte en la tetera. El agua puede fluir o puede golpear. Sé agua amigo mío". Tampoco podemos añadir agua a un vaso lleno de líquido, antes debemos vaciarlo; una imagen bastante clara de lo que nos sucede con el conocimiento o la información que consideramos inmutable y correcta.
Profundizando algo más, podemos considerar que la información y el conocimiento puede volverse erróneo u obsoleto, la obsolescencia temporal (programada) del conocimiento se produce con el paso del tiempo ya que la sociedad, los gustos, las reacciones, etc. cambian. Una de las cosas más difíciles en este mundo es desaprender y abrazar el cambio, sin aferrarnos a lo que hemos vivido y aprendido. Partir de menos ideas preconcebidas implica una mentalidad más abierta y una mentalidad más abierta nos permite evaluar nuevos puntos de vista.
Warren Buffet repite siempre que debemos comprar lo que entendamos y conozcamos, pero el desconocimiento o ignorar algo que en teoría tiene que ver poco con el negocio de una empresa también es potencialmente peligroso. De hecho, Por poner un ejemplo, la tecnología transforma la forma en que se gestionan y se hacen negocios, ignorarla y hacer las cosas como hace cien año nos puede llevar al fracaso. Sin embargo, Warren Buffet ha repetido en distintas ocasiones "yo no entiendo la tecnología" y parece que le va bien. Seguramente, su capacidad de análisis de cómo va un negocio le permita ignorar otros aspectos más operativos y menos financieros.
Por ello, un conocimiento obsoleto o el desconocimiento son igualmente peligrosos. Pero lo realmente difícil es saber qué conocimiento desechar, por equivocado u obsoleto, y qué conocimiento mantener. Por ello, cada cierto tiempo puede ser conveniente replanteárselo todo, contrastando empíricamente los resultados. ¿Qué es últil y qué no? Todo ello nos exige estar en continúo aprendizaje y desaprendizaje.
Utilidad
Y, ¿esto a parte de servir para pasar el rato para qué nos sirve? Para algo fundamental, mantenernos alerta y revisar constantemente la aplicabilidad de nuestro conocimiento eliminando aquél que ya no proporcione los resultados deseados. De hecho, es de todos conocido que desde el momento en que la mayor parte de los analistas e inversores miran los mismos indicadores e información, dichos indicadores e información pierden vigencia dejando de tener el mismo efecto o utilidad ya que, lo que todo el mundo conoce, deja de funcionar en muchos casos.
Otros elementos, como las reacciones humanas ya sea pánico o euforia en los mercados financieros seguirán acompañándonos hasta el fin de nuestros días, por lo que la forma de explotar o afrontar esas situaciones en nuestro propio beneficio es y será un conocimiento universal e intemporal muy valioso a atesorar.
Puedes hacerte a la idea de que las acciones son la presa y nosotros el cazador. El aprendizaje adaptativo sería una posible estrategia basada en la idea de que la presa cambia su comportamiento y las reglas que le rigen, con el tiempo, y el cazador debería cambiar su estrategia para continuar teniendo éxito en la caza. Cuando el cazador cambia su comportamiento, la presa se percata y con el tiempo cambiará de nuevo. Es la base de la evolución salvo que, en la mayor parte de los casos, los cambios son morfológicos y, en el caso de la bolsa, la evolución tiene más que ver con el comportamiento.
La realidad es más prosaica y la lucha muchas veces se desarrolla entre los propios cazadores bajo la premisa de que la ganancia de uno es la pérdida de los demás por lo que la ganancia de ese uno se basa en una estrategia distinta del de los demás, que aplicaran una estrategia perdedora. El problema de seguir la estrategia que sigue el resto es que probablemente será conocida por muchos inversores, incluido el cazador ganador, por lo que podrá anticipar tus movimientos en su propio beneficio.
Conclusión
Como conclusión, desde mi visión subjetiva de las cosas, creo que deberíamos observar algunas pautas para evitar la obsolescencia de nuestro conocimiento.
* Revisa constantemente tu conocimiento para desaprender en caso de que éste ya no se ajuste a la realidad.
* Aumenta la cantidad de datos y/o información todo lo que puedas, cuántas más fuentes diversas de datos y/o información mejor, ya que ésta es la materia prima para la toma de decisiones. El desconocimiento es el enemigo.
* Planifica y establece objetivos. Una vez tengas los resultados, compáralos con los objetivos. Si no coinciden, analiza el porqué de las diferencias. Ten en cuenta que lo que no se mide no se puede mejorar.
Planifica->Ejecuta->Compara (medición)->Corrige
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* Los avances en la humanidad proceden de la revisión de lo antiguo. No puedes avanzar estando anclado en el pasado.
* La duda es tu amiga, no tu enemiga. La duda te empuja a revisar tus premisas. Es evidente que la duda se convertirá en un enemigo si provoca un comportamiento de indecisión que no permita la toma de decisiones o un comportamiento de veleta con continuas decisiones contradictorias. Establece puntos o condiciones, llegado a los cuales, revisa las decisiones adoptadas.
* Busca lo esencial e ignora lo accesorio.
* Establece el grado de importancia y credibilidad de cada dato o fuente de información.
Por poner un ejemplo,
Precio objetivos de analistas=0 (no les atribuyo importancia alguna)
Resultado publicados por empresas=8
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