Después de explicar los tres integrantes del equipo comercial me queda por describir el más mediático de todos, el presidente de USA Donald Trump. Puede que sea el personaje por el que más me ha costado escribir dado que mi admiración por él es muy baja, pero es la pieza más importante de este puzle comercial.
Trump nació en New York el 14 de junio de 1946 en el barrio de Queens. Su madre era una “inmigrante” escocesa nacida en la isla de Lewis y sus abuelos paternos eran “inmigrantes alemanes”. Su tío, John G. Trump fue un brillante inventor, físico e ingeniero eléctrico. Sabiendo esta información se puede deducir que el señor Trump no ha tenido tiempo para pensar y empatizar con la trayectoria de su familia en la que tuvieron que coger las maletas por los problemas en el país origen y empezar desde 0 en un sitio nuevo donde tenías que esforzarte al máximo para sacar adelante a tu familia. Ser inmigrante es muy duro y uno no lo hace muchas veces por elección. Esta clase de personas son muy importantes para el país destino porque vienen con la motivación extra de trabajar y crear negocios prósperos con la enseñanza de su difícil camino.
Mientras vivía en Jamaica Estates, asistió al the Kew-Forest School en Forest Hills (Queens), junto algunos de sus hermanos. A los 13 años, tras tener problemas de conducta que llevaron a su salida de la escuela, sus padres lo enviaron a la Academia Militar de New York (NYMA). Con 17 años era capitán y ya tenía 40 cadetes a su mando. Era un chico algo rebelde que tenía que aprender a canalizar esa indisciplina. Siempre conseguía que el equipo cooperara para hacer lo que él quería. Ha dicho diversas veces que la estancia en la academia militar le ha marcado de por vida por los principios y valores que adquirió.
Fuente: Infobase
Trump fue a la Universidad de Fordham en el Bronx durante dos años, continuando sus estudios en la Escuela de Negocios Wharton de la Universidad de Pensilvania, porque Wharton tenía uno de los pocos programas de estudio dedicados al sector inmobiliario, donde se graduó en 1968 con un Bachelor of Science en Economía.
Donald Trump procede de una familia muy rica, no penséis en una familia rica cualquiera. Fred Trump (padre) amasó una fortuna de más de 500 millones de dólares. La riqueza y las conexiones políticas fueron determinantes para el ascenso y el éxito empresarial de Donald. Comenzó en la empresa de bienes raíces de su padre, Elizabeth Trump and Son, focalizada en la vivienda de clase media para arrendar en Brooklyn, Queens y Staten Island. Uno de sus primeros proyectos, todavía en la universidad, fue la revitalización del complejo de apartamentos de Swifton Village en Cincinnati, en el estado de Ohio, que su padre había comprado por 5,7 millones de dólares en 1962.
En los años sesenta y setenta fueron las peores décadas de delincuencia de New York, todos tenían miedo de ser atacados. Incendios, revueltas, asesinatos, violaciones….
Donald Trump fue uno de los primeros en aprovecharse de la situación cuando estaba de capa caída, aunque de una forma positiva. Cuando New York estaba casi en bancarrota y otros constructores abandonaban el barco, Trump sacó de la bancarrota al Hotel Commodore. Claro, previo fue el acuerdo con el gobierno de New York para recibir una deducción fiscal durante 40 años y se vino arriba creando la Trump Organization. Sintió que el sector inmobiliario estaba a punto de cambiar y se tiró de cabeza hacer negocios. Entonces topó con el West Side en el que pretendía construir uno de los proyectos más grandes de la historia neoyorquina. Un gigantesco complejo de oficinas, apartamentos y comercios en un terreno de 13 manzanas junto al río Hudson. Su intención era levantar un muro de 20 metros en todo el West Side para aparcamientos de 9.000 plazas y una zona comercial de 185.000 metros cuadrados. Parece que a este hombre lo de construir muros le viene de muy lejos. Además, con una altura de 150 pisos y que se consideraría durante un tiempo el edificio más alto del mundo. Pero en su ambición no tuvo en cuenta a Roberta Brands, Miembro de la asociación contra la planificación urbanística de New York que le retrasó dicho proyecto y le hizo una modificación con medidas que impactarían positivamente en el medio ambiente de la zona. Por dicho aplazamiento, Trump la bautizó con el nombre de “tocapelotas”, algo de lo que esta mujer se siente muy orgullosa.
Trump, primero por la parte izquierda. Fuente: Infobase
En otra de sus cabalgadas empresariales, Donald Trump quería construir en la zona de casas bajas del Soho una torre de apartamentos disfrazada de hotel para evitar las leyes urbanísticas, lo cual está prohibido. Pero quería aprovecharse de la ignorancia de los vecinos del Soho para encubrir este proyecto. Entonces Sean Sweeney, un estudiante de medicina que fijó su residencia en el Soho decidió plantarle cara a Trump para evitar que tal proyecto viera la luz. Le puso tal demanda que los potenciales clientes que iban a pagar 20.000 dólares por metro cuadrado no ejecutaron la compra. Y no le compraron ni uno. Se tuvo que conformar con la construcción de un hotel, pero como eso no era la idea del proyecto no le salieron bien las cosas y el edificio le acarreó ir a bancarrota.
Después de estos dos casos os expongo dos de sus míticas frases:
“No lo hago por el dinero, lo hago porque quiero hacerlo”.
“Toda mi vida está llena de triunfos. No suelo perder. Casi nunca pierdo”.
En 1988, adquirió el Taj Mahal Casino en una transacción con Merv Griffin y Resorts International. Esa expansión, tanto personal como comercial, aumentó su deuda considerablemente.
Fuente: Infobase
Hacia 1989, algunas malas decisiones comerciales lo llevaron a la suspensión de pagos. Trump financió la construcción de un tercer casino, también llamado Taj Mahal, sobre todo con bonos basura. Aunque reforzó sus negocios con préstamos adicionales y pospuso el pago de intereses, hacia 1991, la creciente deuda lo llevó a la bancarrota comercial y cerca de la personal. Los bancos y los propietarios de bonos perdieron millones de dólares, pero optaron por reestructurar la deuda para evitar perder más dinero en juicios. El Taj Mahal salió de la bancarrota el 5 de octubre de 1991, con Trump cediendo el 50 por ciento de la propiedad en acciones a los propietarios originales de los bonos, a cambio de bajar las tasas de interés de los préstamos y de conceder más tiempo para cancelar la deuda.
A finales de los años 90 su situación financiera mejoró. Entre sus primeras acciones estuvo la construcción de una serie de propiedades, diversificándose a clubes y construyendo numerosos hoteles y casinos. Además, compró acciones sobre la Organización Miss Universo, empresa que realiza los concursos de Miss Universo, Miss Estados Unidos y Miss Estados Unidos Adolescente siendo la cadena televisiva NBC quien posee el resto de las acciones. En uno de los certámenes de Miss Universo ocurrió el caso de que una de las concursantes de Canadá se presentó siendo transexual pero que a la vista del público nadie pensaría que lo fuera si no lo sabes, dicha razón hizo que en medio del concurso explotara este detalle. Esto provocó que el comité del concurso la descalificara por dicha condición. Entonces Gloria Allred, antigua exconcursante del evento y actual abogada de derechos civiles especializada en casos femeninos se pusiera al mando de la demanda para que a base de pruebas demostrara que dicha concursante en todos sus documentos legales era considerada como mujer y tenía derecho de presentarse. Trump comenzó a descalificar y amenazar a dicha abogada para poner al público de su lado, pero finalmente Gloria ganó la batalla para su cliente y pudo presentarse al certamen. Dos años después, coincidieron en la sala de espera de unos estudios de televisión y Trump en privado le dijo que era de las mejores abogadas a las que se había enfrentado. Es más, la abogada se quedó atónita cuando Trump le dijo al cliente de esta que nunca despidiera a Gloria, que siempre conseguía lo que se proponía. Otra prueba de que actúa como un actor cuando se encuentra el público presente y del estilo de negociación de hacer daño y amenazas como hace con la guerra comercial.
Fuente: Infobase
Para comienzos del nuevo milenio, Trump había reconstruido su imperio, ahora era dueño de una serie de propiedades como la Trump World Tower, Trump Hotel Las Vegas, Trump Ocean Club International Hotel & Tower, la serie de hoteles Trump International Tower & Hotel, en varias ciudades, además de los antiguos casinos y un nuevo hotel en una de las islas palmera de Dubái. Es un continuo Trump por todas partes y en todos sus productos alimentando su enorme ego y magnificando su marca. Tengo que decir que sabe venderse muy bien.
Actualmente, la Trump Organization administra una serie de propiedades ubicadas en diversos países, como Panamá, Brasil, El Caribe y en diferentes zonas de USA y la Trump Entertaiment ha expandido el número de sus casinos. Trump además publicó el libro El arte de la negociación (aunque lo escribieron por él), en el cual narra sus experiencias durante la debacle que sufrió en los años 90 y cómo logró sobreponerse. Es un continuo Trump por todas partes y en todos sus productos alimentando su enorme ego.
En 2005, estrenó el reality show “The Apprentice”, que emitió la cadena NBC. Es un show estelar en el que participan de 16 a 18 empresarios que compiten por un premio de 250.000 dólares y un contrato para dirigir una de sus empresas. En 2007, anunció que llevaría su programa a otra cadena, pero, posteriormente, NBC anunció que volvería a sus pantallas. Una de sus célebres participantes, Omarosa Manigault, decía de él que cuando profundiza en sus enseñanzas quiere que aprendas como una de las estrategias más importantes el destruir a la competencia a toda costa. Para Trump la negociación es una gran partida de ajedrez. Para Omarosa, es la mente más brillante del mundo en cuanto a marketing y técnicas de venta, no tiene rival. Con su papel mediático ha llegado tan lejos que hicieron muñecos Donald Trump.
Fuente: Infobase
Sabe que mientras la gente esté entretenida, mientras se sienta cautivada, mientras se mantenga la intriga van a seguir viéndole y le van a prestar atención. Conoce mejor sus ángulos, sabe que frases usar para subir el ánimo y bajarlo cuando tiene que dar un mensaje al público. En definitiva, sabe lo que tiene que darles en cada momento.
No hace muchos años, en uno de los libros de Trump, llamado Trump Nation (¡cómo no!), que evidentemente no los redacta él. No le gustaron 3 páginas de este y realizó la mayor demanda de USA en New York por 5.000 millones de dólares por difamación a la editorial que elaboraba y lanzaba el libro. Trump avisó al escritor que le demandaría si había algo que no le gustase y le lanzaría insultos típicos de él como “pirado, escoria o estúpido o la que más le gusta, pringado”. Expuso que la editorial le hizo un daño irreparable a su reputación y la solvencia de sus negocios. Lo que no le gustó es que hicieron un balance de su red de propiedades y negocios y el valor que le dieron bien justificado no le hizo ni pizca de gracia. Tampoco que expusieran que no era el mayor constructor de New York desde ningún punto de vista. El escritor pensaba que Trump no llevaría adelante la demanda dado que tenía informes de uno de sus bancos, el Deutsche Bank. Cuando Trump se dio cuenta de que iban a ir adelante y que tendría que sacar a relucir públicamente todas sus cuentas, propiedades, ¡todo! Entonces retiró la demanda y se volvió con su Trumpmóvil a su Trumpcueva.
Ha tenido para todos, y su estilo de negociación durante la investigación me ha dejado muchas preguntas que tenía en mi cabeza durante los últimos tres meses donde ha estado jugando al ratón y el gato con China y los mercados financieros. Como no le da lo que pide, la amenaza y juega el rol de matón de colegio con un gobierno chino que por encima de todo tiene una gran educación y un respeto a los mensajes públicos que tanto afectan a la sensibilidad de los mercados financieros. Trump nos seguirá dando catalizadores según con el pie que se levante mañana.
Con el equipo descrito y ya comprendido las mentes de los diferentes personajes nos centraremos próximamente en la auténtica historia que esta desgobernando la economía mundial hacia una posible recesión con los datos macroeconómicos actuales.
Os dejo con una imagen y una frase mítica del Presidente de USA Donald Trump:
“Si estas pensando en algo, será mejor que pienses a lo grande”.