España envejece aceleradamente. Hoy el Instituto Nacional de Estadística español (INE), ha publicado los datos provisionales de los movimientos naturales de la población del año 2018, confirmando la preocupante tendencia del crecimiento vegetativo negativo, en el que son más las personas que fallecen que las nacen, efectivamente reduciendo la población de forma natural (sin migraciones).
En el año 2018 se produjeron 56.262 fallecimientos más que nacimientos, un 83% más que en el año 2017 en el que el crecimiento vegetativo fue de -30.772.
Aparte de una mayor esperanza de vida de los españoles, la otra razón es la poca natalidad, y es que en el año 2018 nacieron sólo 369.302 niños, la cifra más baja desde el año 1998.
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