No tenemos más remedio que reivindicarnos en el acierto de nuestro lema, de que las Bolsas son impredecibles, pero no anárquicas, y es que si bien en las Bolsas hay muchas empresas, todas ellas sometidas a rigurosos controles financieros que vigilan la veracidad de las cuentas que periódicamente van publicando, como es el control de los auditores externos sobre las cuentas de cada ejercicio, el control interno de su propios organismos de vigilancias, la publicación de hechos relevantes puntuales, el avance trimestral de las cuentas de los periodos en curso, etc, etc, a su vez vigilados por organismos serios como la CNMV de España o la SEC de los americanos, y en otros países por sus organismos equivalentes. A pesar de todo lo anterior no acabamos de grandes sobresaltos, que no se producen todos los días pero sí cada 2 ó 3 meses.
Ahora el sobresalto se llama Thomas Cook, empresa centenaria de organizar viajes turísticos moviendo millones de viajeros por todo el mundo y que disponía de su propia cadena de agencias de viajes, cadenas de hoteles, así como de su flota de aviones y miles de empleados.
Aquí os dejo un cuadro con cifras significativas de la compañía cuando ha quebrado.
A continuación os pongo el gráfico de la evolución de las cotizaciones de la entidad para que cada uno saque sus propias conclusiones.
Algunos datos a resaltar:
La semana del 10 de septiembre del 2012 hizo un cierre de 14,80, supongo que libras, pero fijaros la subida tan espectacular que siguió a continuación pues en la semana de 13 de enero del 2014 cerró a 186,60, supongo que libras, lo que supone multiplicar el valor por 12,60 veces en un año y tres meses.
Y a continuación se ven diferentes bajadas y desde el máximo anterior hasta la cotización del 20 de septiembre del 2019 en que estaba a 3,59 supone haber disminuido a (1/52) un cincuenta y dos avo desde máximos. Lo que parece increíble.
Increíble la subida, pues no es normal subir no un 12,60% que en tan poco tiempo ya sería digno de destacar, sino multiplicar por 12,60 veces y lo repito para que quede claro. Algún genio de las finanzas inglesa tuvo que estar detrás de esta operación. No he leído nada sobre quien lo consiguió pero tuvo que ser un candidato al premio Nobel de la Astronáutica, porque esas aceleraciones en vertical solo lo consiguen los cohetes que van a la Luna y el genio que hizo esto o su equipo sabían de lanzamientos de cohetes, salvo que dijeran a los accionistas que habían encontrado una fórmula secreta por la que ganaban 1.000 libras por cada viajero que enviaban a disfrutar de las vacaciones. Si algún lector sabe cómo consiguieron esta subida me alegraría que nos ayudara a sacarnos de nuestra ignorancia, pero el gráfico es el que es.
Pero si llamativa fue la subida, fijaros en la bajada desde la semana del 14 de mayo del 2018 en que cerró a 128,90, supongo que libras, hasta el valor último. Más de un año cayendo en picado, esperando a que se abriera el paracaídas y salvara a la compañía de estrellarse contra el suelo y más de un accionista diciendo es la mejor agencia de viaje, yo no vendo sus acciones que dentro de poco tiene que valer 200, libras supongo. Porque desde 128 hasta 3 hay niveles intermedio y días para vender.
Es evidente que un pasajero que está organizándose las vacaciones no mira los gráficos de Thomas Cook o de Melia, pero los inversores y los proveedores, que se juegan mucho dinero, yo creo que si hubieran mirado el gráfico, se hubieran dado cuenta de que ya estaban avisados del dinero que iban a perder, los unos invirtiendo en acciones que se desplomaban y los proveedores prestando servicios que no iban a cobrar y que les dejado un buen roto en sus cuentas de resultados, pues se ha comentado que algunos hoteles dedicaban el 100% de su ocupación a Thomas Cook.
Por cierto de los dos indicadores que hay debajo del gráfico, el primero es el CHVA Timing que usamos en el LUMAGA SYSTEM, y no comento nada salvo una discordancia total que se aprecia claramente, pues mientras la cotización últimamente bajada el CHVA subía. Pero el indicador de abajo es el RSI por todos conocidos desde hace años y aun siendo velas semanales los periodos en que está reflejado el gráfico y los indicadores, se aprecia un zigzag continuo que delata lo forzado de las cotizaciones, o manipulación total, pues en las empresas grandes de mucha liquidez las ondas son suavecísimas, todo lo contrario de lo que vemos aquí.
Un gráfico de esa calaña se le puede permitir a Terra, una empresa en su momento, recién llegada al mercado, en un final de burbuja tecnológica de todos conocida, donde aparece como una filial que era de Telefonica de España, compañía seria de toda la vida, donde nadie sabe lo que hace pero que dicen que están encontrando unos nichos de mercado que van a ser rentabilísimos, donde se monta todo lo demás que sabéis y etc, etc. Pero lo increíble es como habrán conseguido en Thomas Cook manipular la cotización en una empresa de viajes de más de 100 años de antigüedad y en un negocio tan maduro como era en el que se movían. Como decía el torero en la tele; “En dos palabras: Increíble”.
Siendo un poco mal pensado, creo que estos lo que estaban organizando eran los viajes de los ninis ingleses que por 100 euros, pasan el fin de semana a Mallorca o en la Costa Brava con viaje y estancia, y borrachera incluida, y a esta clientela no era posible ganarle dinero.
En estos días de atrás han salido muy buenos artículos en la prensa escrita justificando la caída de la compañía, hablando de la falta de adaptación a los cambios tecnológicos, la competencia de las contrataciones por Internet o el daño de la libra esterlina. Seguro que llevan razón, yo solo quiero destacar lo que no he visto en ningún artículo y es el grafico de las cotizaciones de Thomas Cook y el horror que produce verle para cualquiera que se fije 2 minutos y tenga un mínimo de conocimiento de Análisis Técnico, donde se parte de que toda la información de un valor está en su gráfico.
Los grandes sobresaltos en la bolsa no se acaban, y mira que ya llevamos casos. Ya veréis como antes de Navidades tenemos otro caso gordo y no miro a ningún banco en concreto, porque están más de uno que con solo mirarlos se pueden ir a pique.
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Nuestro lema sigue siendo: Las Bolsas son impredecibles, pero no anárquicas.
