Vuelta a la casilla de salida. Esta podría ser la situación en Cataluña tras haber transcurrido casi tres meses desde el referéndum ilegal del 1 de octubre. Lo miremos como lo miremos, en Cataluña hay dos millones de votantes a favor del independentismo. No son mayoría en votos pero el actual sistema electoral otorga una mayoría absoluta a los partidos independentistas. Pero dos escaños arriba o abajo, el resultado de las elecciones de ayer no debería cambiar demasiado el discurso. Estos dos millones de votantes siguen creyéndose el discurso de los independentistas de que España les roba y que les iría mucho mejor con una Cataluña independiente y lo seguirán creyendo, al menos a corto plazo. A largo plazo, los independentistas seguirán creyendo que si ayer obtuvieron sólo un 47,5%, es cuestión de tiempo y de adoctrinamiento de los nuevos votantes para que sean mayoría en votos y escaños.
En definitiva, Cataluña es un problema para España hoy y lo seguirá siendo a corto y medio plazo. La pregunta que debemos hacernos es si este problema afectará a las compañías del Ibex 35 o si está ya descontado en el precio. En la semana del 1 de octubre, en nuestras claves diarias comentábamos que el 70% de los ingresos de las compañías del Ibex provenían de fuera de nuestras fronteras. El problema, en principio, lo tienen las compañías con gran parte de sus ingresos en Cataluña, o las empresas catalanas que tengan gran parte de sus ingresos en el resto del territorio español. Las primeras por reducción de ventas por la caída del PIB catalán, y las segundas por el posible boicot a productos catalanes del consumidor español.
Una vez más, al igual que ocurrió con el Brexit y con el resultado de las elecciones de Estados Unidos, así como el día después del 1-O, los inversores que vendieron en la apertura del mercado, lo hicieron en el peor momento (el Ibex sube un 1% desde mínimos de la sesión). En el gráfico intradía vemos que en la apertura el Ibex ha tocado la base del canal alcista iniciado en los mínimos del mes pasado. Ayer se quedó en la parte superior del canal bajista iniciado en mayo. En definitiva, desde el punto de vista técnico, las elecciones no han aportado ninguna novedad. El resultado electoral mantiene incertidumbres, pero el Ibex cotiza claramente por encima de los mínimos marcados la semana del 1-O. Desde este punto de vista, aunque el Ibex (en el gráfico es con dividendos) sigue en un canal bajista, ha marcado un doble suelo en los mínimos de octubre y noviembre y está atacando a la directriz bajista, lo que podría ser el inicio de un tramo alcista.
Insistimos, la pregunta es si el Ibex ya está descontando el problema catalán y, por tanto, no tiene por qué corregir. En el siguiente gráfico vemos la comparativa del Ibex frente al resto de índices europeos. El Ibex está plano frente a subidas del resto de índices entre el 3.76% (Mib 30 italiano) y el 9% (Dax alemán).
En renta fija la situación es la misma. En el año la prima de riesgo de Portugal se ha estrechado frente a la alemana nada menos de 250 p.b, mientras que la española se mantiene en el nivel de inicio de año. En el siguiente gráfico comparo la prima de riesgo de España, Italia y Portugal. La italiana, salvo esta última semana que ha repuntado, también ha corregido más que la española.
Pero no sólo en precio el mercado ya descuenta el riesgo catalán en los índices de renta fija y variable. Siempre defendemos que no es lo mismo valor que precio. En valoración, el Ibex 35 también está reflejando el riesgo del secesionismo catalán. En los siguientes gráficos podemos observar que la bolsa española se está quedando rezagada sobre el resto de índices. En el siguiente gráfico vemos que el PER estimado de todos los índices está repuntando en los últimos eses, mientras que el del Ibex está corrigiendo desde mayo. En términos de PER estimado sólo estaría por encima del MSCI Emerging Markets. El mismo efecto se produce en el valor en libros. El riesgo catalán está provocando que el precio/valor en libros del Ibex sea el más bajo de los principales índices.
Podríamos seguir poniendo ejemplos, pero la rentabilidad por dividendos del Ibex es la mayor de todas las bolsas comparadas, y por poco, la prima de riesgo española, se sitúa en zona de máximos.
Así pues, entendemos que la bolsa española cotiza ya claramente el riesgo secesionista catalán y no hay que ser reticente a asumir exposición, sobre todo en acciones cuyos ingresos y beneficios se producen fuera de nuestras fronteras.
El artículo original se encuentra en el Blog de Unicorp Patrimonio S.V.
Identifíquese ó regístrese para comentar el artículo.