Tal y como comentamos ayer, el problema italiano no radica en que aumente el ratio de deuda sobre el PIB o que elaboren unos presupuestos con un objetivo de déficit superior al exigido por Bruselas. El problema de Italia es el crecimiento del euroescepticismo y la posibilidad de que acabe saliendo del euro. Conforme aumente esta probabilidad, los inversores venderán todos sus bonos italianos (tanto de deuda pública como privada), para comprar activos también denominados en euros, pero menos susceptibles de ser cambiados por otra moneda.
Incluso los propios italianos empezarían a formar colas en los bancos para sacar sus euros y guardarlos bajo el colchón ante la posibilidad de que se los convirtieran en una moneda devaluada. Este sería el verdadero problema al que se enfrentaría el gobierno italiano si mantiene el pulso con Bruselas. Por tanto, los órdagos no pueden durar mucho en el tiempo. La experiencia reciente de Grecia debería valernos a la hora de tomar decisiones. Ayer la prima de riesgo italiana volvió a alcanzar los 300 p.b., y prueba de que el problema está en la posibilidad de un "Italexit" la tenemos en la reacción positiva que tuvo el mercado ante las palabras del presidente del Gobierno italiano, Giuseppe Conte, que aseguró que Italia se dispone "a dialogar serenamente" con la Unión Europea sobre sus Presupuestos y que el euro es "irrenunciable", en una nota que colgó en su página de Facebook. "Italia es un país fundador de la UE y la Unión Monetaria y quiero reiterar que el euro es nuestra moneda y para nosotros es irrenunciable".
El MIB 30 italiano consiguió cerrar lejos de mínimos de las sesión, tal y como vemos en el siguiente gráfico.
Algo similar ocurrió con el sectorial bancario.
Precisamente el sector bancario puede ser un buen indicador de la percepción del riesgo italiano. Los spread de deuda del sector bancario han sido los que más han sufrido en las últimas sesiones, respecto al resto de sectores. Incluso se ha ampliado mucho más la prima de riesgo de la deuda bancaria europea que la de los bonos High Yield. En el siguiente gráfico vemos los spread que el mercado exige a los principales índices europeos, cómo efectivamente es el sector financiero el que más se está viendo afectado.
Por tanto, una vez más el sector bancario (tanto en la renta fija como la variable) vuelve a ser un perfecto indicador de la situación de los mercados europeos. Habrá que vigilar el comportamiento los próximos días de este sector, por si perdiese los soportes (renta variable) o rompiese al alza las resistencias (spreads de deuda) que han significado los niveles que se alcanzaron en la sesión de ayer. No en vano, son los bancos europeos los principales tenedores de deuda italiana.
El artículo original se encuentra en el Blog de Unicorp Patrimonio S.V.
Identifíquese ó regístrese para comentar el artículo.