La guerra comercial que Donald Trump quiere abrir contra China ha provocado nuevos recortes a todas las bolsas del mundo. Ayer comentábamos que los movimientos no se debían a la subida de tipos sino a los aranceles y hoy parece que efectivamente el temor de los inversores va por este camino. De nada sirvió que el propio Trump intentase quitar hierro a sus medidas proteccionistas para no asustar tanto, pero de momento no lo está consiguiendo.
Ayer dio una lista de 1.300 productos chinos sobre los que quiere poner aranceles. Pero en un intento de no asustar mucho dijo que ahora se abría un período de "consultas" con las empresas de EEUU afectadas y con la propia China. Creemos que es su forma de negociar. Anuncia medidas muy por encima de las que realmente pretende acometer para así tener margen de maniobra. Algo similar ocurrió con la reforma fiscal y así se aseguró poder aprobar medidas que años atrás no se hubiesen soñado.
Muestra de que está dispuesto a negociar, es que añadió a la Unión Europa a la larga lista de países que tienen exención del arancel del acero. Prácticamente la mayor parte de los grandes exportadores están exentos. Por tanto, aunque la caída del 4.5% provoca lógicamente un sentimiento de pánico de nuevo en los inversores, hay que mantener la cabeza fría y pensar las consecuencias a largo plazo de las medidas. Entendemos que con estas medidas parece querer más montar revuelo y llamar la atención sobre su idea de que el déficit de EEUU es excesivo por culpa de los demás que realmente querer abrir una guerra. Además, los inversores siempre reaccionan poniéndose en el punto extremo negativo, lo cual suele generar oportunidades. Aunque finalmente haya imposición de aranceles, estos no serán para toda la vida. Hoy es Trump quien los aprueba y mañana puede que el nuevo gobierno de Estados Unidos los elimine.
Sea lo que fuere, la guerra parece centrarse entre China y Estados Unidos. No tendría mucho sentido que las bolsas europeas corrijan incluso más que las de estos dos países. Los productos europeos serían más competitivos en este nuevo escenario. Tras las noticias de ayer, hoy el Eurostoxx cotiza de nuevo en la zona de mínimos de febrero, en la parte baja del hipotético canal lateral que venimos comentando estas últimas semanas.
En el gráfico se aprecia claramente que hoy el Eurostoxx (valores en euros del Eurostoxx 600) cotiza en clara zona de soporte. El precio actual coincide con los mínimos de febrero y marzo de este año, así como los mínimos de abril y septiembre del año pasado. ¿Puede perder este nivel? Evidentemente, pero viendo lo que ha hecho esta mañana el Hang Seng de Hong Kong, podemos entender que en los soporte sigue retomándose el apetito por el riesgo por parte de los inversores. El Hang Seng ha abierto en mínimos, justo en 30.000 puntos, zona en la que coinciden los mínimos de marzo y la directriz alcista iniciada en mínimos del año pasado.
A pesar del pánico en el que puede entrar el mercado, actualizando el gráfico del MSCI World vemos que sigue en el rango lateral que advertíamos esta misma semana. Este escenario lateral sigue siendo el más probable a corto plazo.
En las manos fuertes norteamericanas no parece que cundiese el pánico. Sí que hubo ventas, pero la reducción del volumen comprador nada tuvo que ver con la caída del precio. En el gráfico se aprecia el fuerte repunte del saldo comprador (en rojo el saldo acumulado de compras de más de 10.000 títulos) que se produjo el viernes pasado con motivo del vencimiento de derivados. Por tanto, el saldo de las manos fuertes a priori sigue apoyando la tendencia alcista de fondo del S&P500.
Nada que ver con el saldo acumulado de las operaciones de menos de 10.000 títulos. Ayer volvió a corregir con mucha fuerza y se fue a mínimos del último año.
Por tanto, serenidad y visión de más largo plazo y, como comentamos esta misma semana, si tenemos claro que el escenario actual es el de un movimiento lateral para consolidar los niveles, podemos contemplar los movimientos diarios desde otra perspectiva. Una perspectiva que debería evitarnos vender en zona de mínimos y comprar después de dos días de subida. Una operativa esta que es la que peor resultado daría a un inversor, independientemente del perfil de riesgo y horizonte temporal de sus inversiones. Tal y como hemos titulado las claves de hoy, las situaciones de pánico suelen generar más oportunidades de compra que de venta en los mercados financieros. Los inversores "contrarian" suelen tener más éxitos en sus inversiones que los que se dejan llevar por la masa.
El artículo original se encuentra en el Blog de Unicorp Patrimonio S.V.
(http://blog.unicorppatrimonio....)