Todo lo sucedido en los últimos días expone a Europa definitivamente al momento de la verdad. Soy de los que defiende que esta crisis que vivimos, aunque tiene tintes económicos, es política. Y una decisión política nos sacará de ella. En los últimos días se han concentrado una serie de sucesos que van a marcar el futuro de Europa a medio plazo.
Por un lado, el resultado de las elecciones en Francia donde el Sr. Hollande ha conseguido aglutinar el voto de los franceses prometiendo políticas de crecimiento en contra de las medidas de austeridad que exige su vecino Alemania y especialmente su presidente, la Sra. Merkel. El respaldo a esas ideas ha sido claro y ahora tocará negociar con el resto de Europa como implementarlas.
Por otro lado, y para todos los expertos, quizá el más problemático es el resultado de las elecciones en Grecia. Personalmente defiendo que Grecia antes o después va a abandonar la zona Euro porque no le va a quedar otro remedio. Los sacrificios que la han impuesto son demasiado exigentes y han quitado toda la esperanza a los ciudadanos griegos para vislumbrar un porvenir en las condiciones actuales. En mi opinión es sólo una cuestión de tiempo, de poco tiempo.
Por último esta el factor local de España y su sistema financiero. En los últimos días, todos los ojos se han fijado en la más débil del sistema, Bankia, pero no por ello es la única entidad que tiene problemas. Desde la entrada del nuevo gobierno de nuestro país, la reforma más importante de las que habia que realizar siempre me pareció la reforma financiera porque hoy en día el flujo económico marca el latido de nuestra economía. Sin crédito no hay expansión, no hay inversión y no hay posibilidades de crear puestos de trabajo.
Para que todo esto se haga realidad necesitamos que de una vez por todas las entidades financieras de nuestro país sean transparentes y pongan encima de la mesa todos los activos inmobiliarios que tienen en su balance. Desde que conocimos la reforma financiera, mi sensación que se había quedado corta y que de alguna manera se debería reaccionar. En un primer round de la reforma, no se atrevieron a endurecer las condiciones porque tenía certeza de la debilidad de Bankia. Por intentar salvar la entidad y a su Presidente, el sr. Rato se intentó una vía intermedia a la que nos consta proponía inicialmente el sr. De Guindos. De Guindos conoce perfectamente los posibles resultados de una vía lenta en el ajuste de nuestro sector financiero, como decidió en su día adoptar Japón y le ha costado casi 25 años ver la luz de nuevo.
La llamada vía rápida es la que han adoptado países como EE.UU. o Irlanda. Los activos inmobiliarios valorados inmediatamente a precio de mercado y las pérdidas expuestas encima de la mesa. Con eso, viviremos posiblemente un pequeño terremoto financiero a corto plazo pero es un paso necesario para empezar a construir de verdad y con seguridad el futuro de los españoles. Hoy ya se ha nacionalizado la matriz de Bankia y se rumorea que entre las medidas del próximo viernes se va a exigir a las entidades que vendan o valoren sus activos inmobiliarios a precios de mercado. Ojalá que por fin se tomen las decisiones que necesitamos y que los mercados financieros nos vienen exigiendo desde el año 2009.
Si los manidos mercados financieros tienen toda la información deciden rápido que camino elegir. El problema es pedirles que te crean sin mostrarles la realidad de las cuentas que choca con la principal característica de los grandes capitales que es su miedo a la incertidumbre.
En fin, creo que en estos días nos jugamos el futuro de Europa en varios frentes y ha llegado el momento de la verdad ... Veremos enseguida como se desarrollan los próximos acontecimientos.