Hoy me ha preguntado el primo de mi vecino, cómo podía recuperarse una persona, ya sea un aprendiz de trader o alguien con más experiencia, del hecho de "quebrar" su cuenta de trading, esto es, de perder prácticamente todo el saldo depositado en ella.
Me lo comenta porque acabo de recibir un correo de un compañero que precisamente me cuenta que el pasado jueves 10 de Marzo (día cargado de noticias macroeconómicas de enorme transcendencia, con el sr. Draghi de por medio, y en los que había que extremar aún más la precaución y la disciplina), terminó la sesión "fundiéndose" la cuenta que tenía para operar en los mercados y hacer trading, y producto prácticamente de una sola operación nefasta . Perdiendo el 95% de su saldo en una única orden,vamos..
Profundizando más, y entendiendo el momento de desesperación en el que se encuentra esta personas y dado que me pide ayuda y me pongo en su lugar, le pido que me envíe un gráfico con la operación en cuestión, para tener algún argumento con el que si no consolarle, sí tratar de ayudarle, y cuál no sería mi sorpresa (describiéndolo con respeto y con su permiso,claro), al comprobar que la susodicha y maldita operación la cerró con un Stop...de casi 450 puntos!
Evidentemente, me explica que su intención no era dejar correr tanto las pérdidas, pero que se dejó influir (de nuevo y como ocurre tantas veces por desgracia) por rumores y por las noticias que se estaban generando y que al leer,ver y escuchar que el Banco Central Europeo había bajado los tipos de interés general al 0%, y comprobar cómo las Bolsas reaccionaban inicialmente con grandes subidas, él tampoco "quiso perderse esa fiesta" y sin dudarlo, se lanzó a comprar prácticamente el primer índice que pilló a mano (en este caso el Dax) y por supuesto, con muchos más contratos con los que normalmente solía operar...tal era su "apuesta" a que la subida continuaría.
El precio llegó a subir cerca de 30 puntos (pero por supuesto no cerró la operación, ni siquiera aseguró una parte de dichos beneficios) y acto seguido, comenzó una vertiginosa y casi interminable caída, que para mi pobre compañero, no parecía terminar nunca...
Como luego me confesó que realmente no tenía ni operaba con sistema alguno, sino "improvisando" y que tampoco tenía un plan de trading estricto, fué moviendo una y otra vez su stop...A medida que las pérdidas aumentaban y aumentaban, por supuesto también lo hacían las palpitaciones de su corazón, las voces de su conciencia,y ese sentimiento de dolor emocional y casi físico que me temo muchas personas también habrán llegado a experimentar también y sabrán a qué sensaciones me estoy refiriendo y lo ingratas y dañinas que son...
Sufría,seguía, perdiendo...pero no cerraba su operación. No sabía realmente ni cómo hacerlo, ni cómo salirse (sin reglas, ya quitó directamente el stop y comenzó a rezar y maldecir su "presunta mala suerte") y no aceptaba perder ni ver la realidad de lo que estaba ocurriendo.
El precio bajó los primeros 100 puntos, luego otros 100, luego más de 400 en su contra...y ya, después de estar más de 3 horas y media luchando absurdamente contra la clara, tendencia, contra el mercado y contra sí mismo, cuando en su cuenta solamente le quedaba un 5% del saldo que tenía al inicio de la jornada, cerró la operación con una pérdida de ...446 puntos.
No voy a extenderme más en las sensaciones que ese trader experimentó (lo hecho, hecho está y de nada vale lamentarse, y como repito siempre, mejor comenzar a ocuparse en lugar de preocuparse...), pero sí en algunas de las posibles soluciones o conclusiones que tanto él como cualquier otra persona en su caso pueden sacar de dicha experiencia.
-Tópico o no,en cada operación que metamos en la Bolsa y en los mercados financieros, ganarás o perderás, pero siempre tienes que aprender. Que tu último error sea tu mejor maestro.
-De nada vale haber perdido y haber sufrido todo éso, si luego no nos vamos a obligar a rectificar, a comprometer a cambiar, a no repetir esos comportamientos...Yo mismo he contado varias veces que comencé en mis inicios muy mal, me creí "el Rey del Mundo" y prontó me puso el mercado en mi sitio, y que me "fundí" no una, sino varias cuentas de trading...hasta que me cansé y me harté de perder, y por supuesto, saqué conclusiones de dichas pérdidas y errores y malas decisiones y empecé a operar y entender el mercado (y a mí mismo) de un modo diferente.
-Guste o no oírlo,es evidente que "nuestra mejor inversión, será primero nuestra propia formación...". Sin duda. No hacerlo, nos puede costar mucho más caro de lo que imaginamos. Hay que aprender, prepararse, formarse, practicar, probar, operar muchas muchas veces, y meter muchas órdenes al mercado (como insisto siempre,primero con muy poco apalancamiento, con cantidades muy pequeñas y utilizando un bróker que te permita operar no solamente con minilotes sino con microlotes, y ya habrá tiempo de aumentar nuestro riesgo a medida que aumente nuestra experiencia y nuestra confianza...).
-El mercado hará lo que quiera en cualquier momento, pero nosotros debemos siempre tener un plan de trading, comprometernos a cumplir a rajatabla las reglas de nuestro sistema de trading, del que apliquemos o hayamos aprendido, y sin ponernos excusas.
De nada vale improvisar, ni apostar, ni saltarnos las normas, ni comprar o vender en base a noticias o a rumores...
El trading y la inversión financiera y la especulación puede darte muchísimo más de lo que imaginas si haces las cosas bien, con cabeza, responsabilidad, paciencia, y conocimientos...pero darte también muchos disgustos.
Si lo haces mal, puedes fundirte no solamente la cuenta, sino la ilusión. Y éso no se puede permitir. Se puede evitar. Hay que comprometerse para que no ocurra.
Mi compañero tardará unos días en recuperarse, pero estoy seguro que esta experiencia le hará mucho más fuerte y (ahora sí), acabará siendo un buen trader,y se levantará de este bache y empezará a recorrer un nuevo camino, herido pero mucho más sabio y con más prudencia y ganas de aprender y sin saltarse las normas ni las reglas,nunca.
Igual que yo tropecé unas cuantas veces, y tuve que levantarme una más, él también lo hará, sin duda, y triunfará. Al fin y al cabo, y como dijo áquel, que es el éxito sino que un continuo "ir de fracaso en fracaso sin desesperarse ni perder el entusiasmo..." ¿O no?