Los bancos de Wall Street, los cuales nunca dejaron de rastrillar dinero a pesar de su papel clave en la causa del colapso financiero mundial del 2008, están de nuevo causando alborotos.
La última ronda de grandes travesuras de estos bancos esta perjudicando al consumidor estadounidense donde mas le duele, justo en sus bolsillos. Grandes bancos de Wall Street están manipulando los precios de materias primas como el aluminio y el cobre, y sus actividades de manipulación de precios y estrategias macabras de negociación están provocando una suba en los precios de los productos básicos que millones de estadounidenses promedio usan todos los días.
Un informe del senado estadounidense sobre las actividades de los productos básicos publicado en el diario The Wall Street Journal plantea que estos bancos están distorsionando los mercados de materias primas a su favor. El informe acusa a grandes bancos como Goldman Sachs, JPMorgan y Morgan Stanley de ser tan poderosos que son capaces de influir en los precios, obtener ventajas comerciales y poner al sistema financiero en general en riesgo de entrar en negociaciones demasiado volátiles como el comercio de uranio y la producción de carbón.
Situaciones más delicadas expuestas por el senador Carl Levin, demócrata de Michigan, quien preside el subcomité permanente de investigaciones del senado de Estados Unidos dijo que había encontrado evidencia sustancial de que estas actividades realizadas por estos bancos expusieron a riesgos catastróficos los cuales no se entienden. Ellos están elevando los costos y la incertidumbre para los usuarios finales de materias primas, lo que perjudica a los fabricantes y a los consumidores estadounidenses.
Los bancos de Wall Street acumularon inventarios voluminosos de aluminio, cobre y otras materias primas que exceden los límites reglamentarios sobre el tamaño de las propiedades de estas. El informe también habla de los negocios lucrativos con un alto nivel de riesgo que, desde el punto de vista del senado, plantean amenazas legales y financieras para las empresas.
El informe del senado citó que Morgan Stanley realizó transacciones por 55 millones de dólares en petróleo, suficiente suministro para un valor de consumo en Estados Unidos por cerca de tres días, y Goldman Sachs se dedica a transacciones "merry go round" de aluminio para obtener un beneficio económico propio.
El metal simplemente se transfiere de bodega a bodega en dichas operaciones, lo que eleva el precio por estar fuera del mercado y lejos del consumidor. Mientras tanto, Goldman, conocido por la creación de "sistemas" con los que juega a ambos lados de un comercio, también genera ingresos a través de una subsidiaria que pertenece a los almacenes que contienen los metales.
El informe del senado también citó que el Deutsche Bank, en septiembre de 2010, solicitó la entrega de un depósito de 100 mil toneladas de aluminio en una sola transacción. Eso fue la retirada más grande en la historia del mercado mundial de metal físico en ese momento. El tiempo de espera para los clientes de obtener su metal se disparó de 20 días a cuatro meses.
De nuevo Wall Street sigue con sus imprudencias, las cuales hace ya 7 años le costos a millones de estadounidenses pérdidas en sus ahorros y cuentas de jubilación. Ahora, estas entidades se están beneficiando a través de los productos básicos a expensas del estadounidense promedio, y la creación de una tensión increíble en una economía todavía frágil.
Quién podrá detener a estos tipos?
Los lectores que quieran profundizar en el tema dejo este link para que tengan un mayor conocimiento del mismo.