Todas las inversiones son arriesgadas, ya que estamos metiendo dinero, ya sea en un plazo fijo, en acciones, en fondos de inversión o en compra de materias primas esperando un comportamiento futuro que ahora mismo nadie nos puede asegurar.
La inversión más segura de las citadas anteriores podría ser una imposición a plazo fijo, pero que le pregunten a los chipriotas cuando hace 3 años sufrieron el rescate bancario los descuentos que les aplicaron. Aquí en España no han tenido descuento, ni los impositores de Bankia, ni los del Banco Popular, pero algunos de los bonistas sí que se han enterado de lo que supone el riesgo futuro.
Por lo tanto, partiendo de que todas las inversiones tienen riesgo, aunque evidentemente unas más que otras, trataremos de aclarar conceptos y que cada cual sepa, según su carácter y sus circunstancias donde se mete.
Empecemos por agrupar a los inversores en dos grupos, ya que todos los inversores no siguen el mismo patrón o jefe indio, sino que según la agilidad con la que se mueven por los mercados, al menos podemos agrupar en los siguientes grupos:
- El inversor sentimental, que invierte como quien tiene un equipo de futbol de toda la vida y no reconoce errores en su equipo, pierda o gane. Su lema es “Mi equipo es el mejor” o pasado a fondos “Mi fondo es el mejor aunque no suba”.
- El inversor preparado con medios informáticos avanzados que le permiten hacer operaciones en los más diferentes mercados, sean materias primas, divisas, ETF, etc, etc. Son inversores que entran y salen varias veces al día o a la semana, tomando tanto posiciones largas como en corto. A este grupo le aparcaremos para más adelante, pues que le vamos a decir si sabe mas que quien escribe estas lineas.
Aquí hablaremos del inversor sentimental que en su momento, por ejemplo, compró el fondo ABC Renta Variable que invertía en acciones del IBEX 35 y con pequeñas diferencias sobre la evolución del índice de referencia va replicando los que hace el IBEX en este caso.
Este inversor sentimental me recuerda, ahora que arranca la Liga, al aficionado que sigue a su equipo de toda la vida y que duerme en sabanas con sus colores y hasta la ropa interior es respetuosa con sus colores. Jamás reconoce que el equipo ha jugado mal y puede que recientemente haya ganado algo, pero también hay otros equipos, que por sus tamaños o su gestión no han ganado nada en su vida, ni se les espera pero juegan mejor que los contrarios.
Las gestoras de los fondos no dejan de repetir que rentabilidades pasadas no presuponen rentabilidades venideras, y esto que es de cajón, cuesta entenderlo pues al final la composición que este inversor se suele hacer es que si el año pasado su fondo sacó el 15%, este año estará alrededor de esa cifra y tiene el 50% de posibilidades de acertar.
Variables a tener en cuenta de cara a las rentabilidades futuras:
- El momento del ciclo de la economía.
- La zona geográfica donde invierte.
- La composición y distribución de los sectores.
- Las empresas con más inversión.
En nuestro supuesto fondo de inversión, que nos ha dado buen o mal rendimiento, cualquiera de las 4 variables anteriores son diferentes en el año 2017 de las que ese fondo tenía, por ejemplo en el año 2014 y seguro que el gestor del fondo ha variado de sectores y empresas que le componen y en sus nuevas elecciones habrá acertado o no habrá acertado. Por eso nos encontramos que cualquier fondo de inversión que el 2013 subió un 10%, en el 2014 bajó un -3%, en el 2015 subió 18%, en 2016 hizo -12%, etc, etc. No encontramos fondos de renta variable con rentabilidades iguales año tras año, ni incluso parecidas porque las circunstancias van variando.
Hace dos años fue un analista español de prestigio a contestar por un chat las preguntas que le hacían diferentes inversores. Pues alguien preguntaba por comprar más acciones del Banco Popular que este inversor había comprado hacía varios años y que después de haber subido desde la compra, entonces estaban bajando. Pues bien, el analista le contestó que no comprara más acciones porque la situación de la banca era confusa. Pues a continuación este inversor replicaba diciendo que seguiría comprando acciones del Banco Popular porque era el mejor banco del mundo y ya no iba a bajar más.
En fin, traigo la anécdota para referirme que ese inversor no había hecho un estudio de los balances del Popular o de cualquier otra acción que tuviera, ya que esto nadie lo hace, pero es que tampoco había visto un gráfico de ese u otro valor. Toda su buena voluntad estaba basada en un seguimiento dentro del valor o de un enamoramiento que nos llevan a no ver cuando tenemos que salir de una acción o de un fondo de inversión mobiliaria o de un plan de pensiones.
Por último el rendimiento de nuestro hipotético fondo de inversión ABC Renta Variable a largo plazo no es el mismo, si nos quedamos anclado al mismo contra viento y marea, que si nos vamos saliendo cuando vienen bajadas y volvemos a entrar, incluso en el mismo o en otro fondo cuando llegan las subidas, ya que no tenemos ningún compromiso de seguir en el mismo fondo.
Como los dientes de sierra han existido siempre y seguirán existiendo podéis entrar en el siguiente enlace y ver un artículo que publicamos recientemente sobre el tema, que también apareció en Inbestia:
https://www.zonadebolsa.es/divulgacion/3-benditos-dientes-de-sierra
En próximos artículos iremos hablando de algunos fondos concretos, sin ánimo de recomendar, ni su compra, ni su venta, sino como ejemplos para que veáis que hay fondos con una volatilidad y rentabilidad bastante aceptable, como también los hay con mucha volatilidad y rendimientos escasos y que también presentaremos.
Aclaramos que www.zonadebolsa.es ni gestiona, ni comercializa ningún fondo de inversión mobiliaria. Tan solo publicamos los cambios de tendencia que detecta nuestro sistema, que hemos bautizado como LUMAGA SYSTEM (https://www.zonadebolsa.es/divulgacion/1-nuestro-sistema-de-prediccion) para quien quiera aplicarlo a los traspasos de sus fondos.
Seguimos con nuestro lema: La Bolsa es impredecible, pero no anárquica.