A veces me gusta analizar los gráficos alcistas desde la perspectiva contraria; fueron muchos los años que pasé, equivocadamente, persiguiendo cambios de tendencia en valores con tendencia bajista acusada. Finalmente me di cuenta de que seguir las tendencias es mucho más rentable, pero todavía me ha quedado ese poso, y como de todo se aprende, me resulta más fácil determinar un objetivo de subida que uno caída.
Dicho esto, para analizar el Ibex suelo recurrir al gráfico del Ibex Inverso porque lo veo mucho más claro, sobre todo cuando combino la información que me dan ambos. Este índice, que no cuenta con una larga historia, refleja, como su nombre indica, los movimientos del Ibex 35 en sentido contrario.
El gráfico muestra la perspectiva alcista de corto plazo dentro de una tendencia bajista de medio plazo.
Pues bien, tal y como se puede apreciar en el mismo, tras romper la tendencia bajista iniciada en 2012, a día de hoy se habría cumplido el objetivo de subida de la figura HCH invertida cuya proyección coincide con la media móvil exponencial de 200 sesiones (MME200). Esta es una buena zona para poner freno a la sangría que está sufriendo el Ibex porque además confluye con el primer objetivo de rebote correspondiente al primer retroceso de fibonacci.
Estos tres factores deberían ser lo suficientemente consistentes como para que las caídas del Ibex (o subidas del Ibex inverso) hagan un parón. Según la fuerza o el impulso que lleve el movimiento, que estará muy ligado a lo que hagan los índices americanos, el Ibex Inverso podría extender la subida más alla de la MME200 pero, si no acaba en las inmediaciones de la misma en el cierre semanal, tarde o temprano hará un throwback a esa zona. Por consiguiente, podría considerarse una buena zona para abrir largos en el Ibex y aprovechar un eventual rebote.
El punto débil de este análisis, que está muy particularizado en un índice, es que desde una perspectiva más global no hay ninguna señal técnica en el resto de índices que refuerce esta hipótesis. Tal vez las dos velas blancas descolgadas que ha dejado el Nasdaq 100 en las dos últimas sesiones, o el potente gráfico del Dow Jones Utility que ya comenté en este otro post acompañen este movimiento.