Quien invirtió en las grandes cotizadas europeas en 2000 aún está plano, casi 20 años después. Que se produzcan largos periodos de pérdidas no es algo extraño, ya que ocurre con todos los mercados, incluso en la bolsa americana, que estuvo 11 años en negativo entre 2000 y 2011 (con un breve periodo en positivo en 2007).
Sí, las bolsas tienden a subir a largo plazo, pero los inversores se olvidan de que cuando compran caro puede pasar más de una década -a veces más- en ver el original de su inversión en sus cuentas.
El caso del Euro Stoxx 50, incluyendo dividendos, es paradigmático porque prácticamente se encuentra en los mismos niveles del año 2000 (y del 2007). ¿Podrá por fin superar esta cota con holgura y dejar atrás las dos décadas perdidas?
La otra pregunta que cabría hacerse es ¿vale la pena estar invertido siempre a cualquier precio?