Una de las cosas que más me llamaron la atención cuando comencé con esto de los indicadores de amplitud es el hecho de que lo que buscan es diagnosticar cómo está el conjunto del mercado en lugar de quedarse en el análisis de los índices que en teoría representan a los mercados. Dado que soy un absoluto creyente en la capacidad de los grandes para manipular los índices, cualquiera que sea el índice, me fue muy atractiva la idea de preguntar directamente a los mercados.
Y eso es lo que me propongo hoy, preguntar a cada mercado. ya sabemos que el Dax es el índice más potente en Europa, el que tira del carro y el que está en máximos históricos. Hace poco hablé de un pulso entre el Dax y Wall Street. ¿Estoy siendo injusto con el resto de mercados europeos? ¿Son tan lastre como cabe pensar al ver algunos de sus índices? ¿Es el mercado alemán el más fuerte en Europa?
Pues vamos a ello, que es muy fácil:
Aquí tenemos, por su orden de arriba a abajo, el Dax, el Eurostoxx, el CAC y el Ibex. A cada uno de ellos se le hace corresponder el mercado al que representan (todo el mercado, no solo los valores del índice) y al Eurostoxx se le hace corresponder la totalidad de los mercados denominados en euros.
Los indicadores presentados para ver cómo está cada mercado son el Oscilador McClellan, de sobra conocido para los seguidores de la amplitud pero que presentaré para quienes lo desconozcan. El Oscilador McClellan está formado como la diferencia entre las medias exponenciales del 5 y el 10% de los valores que suben y bajan cada día en el conjunto del mercado, sin ponderaciones.
El segundo indicador es algo más novedoso, aunque parte de otro realmente conocido. Se trata del valor periodificado del Momento Weinstein, es decir, convertir el Momento Weinstein en un oscilador.. El Momento Weinstein es la media simple de 200 periodos de los valores que suben y bajan cada día en un mercado, que lo representamos con la línea roja. La verde corresponde al mismo concepto pero con la media exponencial. Como todo oscilador que se precie, tiene niveles de alerta de sobrecomprado y de sobrevendido, que se han reflejado en los gráficos.
¿Y qué vemos? Que en realidad tira el Dax, pero no el mercado alemán. Todos los mercados del euro vienen a estar más o menos en el mismo nivel de fortaleza. Todos saliendo del nivel de sobrecomprado que nos marca la linea roja del Momento Weinstein periodificado y todos con el Oscilador McClellan más o menos en las mismas zonas ligeramente negativas.
Por tanto, los indicadores de amplitud nos hacen terminar con un mito, el de la fortaleza excepcional del mercado alemán. Lo que existe es una fortaleza excepcional de su índice de referencia y tiene toda la lógica del mundo porque está compuesto de buena parte de las mayores empresas exportadoras alemanas, las más beneficiadas por la caída del valor del euro.
Pero también contribuye a terminar con otro mito no menos potente, el de la debilidad del mercado español. El mercado español en su conjunto no está ni mejor ni peor que el mercado alemán en su conjunto. Lo que está más débil es un Ibex muy afectado por las ampliaciones de capital pendientes en Santander y Telefónica, dos de los cuatro valores que en realidad componen el índice, porque el resto es puro acompañamiento.