Hoy me ha preguntado el primo de mi vecino (no va con segunda intención...), si podríamos comentar públicamente el caso real de una persona que nos había escrito a finales de la semana pasada, en una lógica y evidente situación de desesperación, y sobre todo, para evitar que vuelvan a suceder situaciones similares...
Resumiendo brevemente el email, y aunque el título del post ya anticipa parte de lo que vamos a desarrollar ahora, se trataba de alguien que solicitaba "ayuda u opinión urgente" porque, animado y espoleado por supuestos sondeos, rumores y de nuevo, por dañinos vaticinios y predicciones (de las que siempre insistimos en esta web que hay que huir y aislarse siempre), y esperando dar "el pelotazo de su vida" (literalmente), al comienzo de la tarde del día 23 de Junio, en mitad de la jornada en la que se celebraba el referéndum en la que el Reino Unido decidía si abandonaba ó no la Unión Europea, se atrevió a comprar un determinado número de contratos en la plataforma de su bróker (aparentemente no mucha cantidad), en un índice bursátil de referencia tan importante como es el alemán, el Dax.
Por supuesto, lo hizo por cuenta y voluntad propia, sin seguir normas, ni sistema, ni reglas...y saltándose las advertencias y "llamadas a la calma y a la prudencia", lanzadas también desde aquí y por parte también de mucha gente sensata y razonable, en el sentido de la obligatoriedad de alejarse un poco de los mercados esos días, de no operar durantes esas sesiones , y al menos, esperar a que pasara un poco toda la tormenta, al ser situaciones en las que la lógica incertidumbre reinante podría provocar movimientos erráticos en las cotizaciones, tanto al alza como a la baja (incluso desde los propios brókers también lo advertían, tanto de modo directo, como de forma indirecta al aumentar los márgenes y garantías requeridos para operar, como las condiciones mínimas).
Parece a veces que nos repetimos siempre reincidiendo en temas como la necesidad del autocontrol, de ser disciplinados y prudentes, de formarse, de aprender, de tener y seguir sí ó sí nuestro propio sistema de trading, de no saltarse las reglas y no "improvisar", de actuar y ejecutar las entradas con decisión cuando hay que hacerlo...pero de la obligatoriedad de ser prudentes, de como mínimo, haber hecho nuestros "deberes previos" y saber qué días se puede operar y cuáles no, y entender, que si bien es totalmente cierto que "no hay viento favorable para el que no sabe a qué puerto se dirige", de nada vale tampoco situar nuestras naves en pleno huracán...
Pero, claro, también aparecen los propios "enemigos" que no deberían sentarse nunca con nosotros a operar: la avaricia, el ego, la codicia, la impaciencia...las terribles de ganas de ganar mucho, y de hacerlo rápidamente, sin calcular lo que se puede perder a cambio...Esta buena persona se fió de las encuestas que indicaban que aparentemente el resultado de dicho referéndum iba a salir favorable a la no salida de dicho país de la Unión Europea, se dejó tentar por los "cantos de sirena" que le anunciaban que todo iba a subir mucho en la sesión siguiente, y que era un "dinero fácil y sencilo", una magnífica y clara oportunidad para ganar mucho, y que no debía dejar escapar.
No hizo trading, ni siguió hábitos, ni pautas, ni reglas, ni sistema alguno de inversión: simplemente apostó, jugó, lanzó una moneda al aire y éste era el saldo a la hora de redactar este post...
Pérdida Brexit 4.000 Euros.jpg
Y claro, ya se sabe y ya lo hemos podido comprobar personalmente y en nuestras cuentas desde hace miles de horas: tanto en la vida como siempre, siempre, puede pasar cualquier cosa en cualquier momento... sin duda.
El mercado hará lo que quiera, y no hay nada seguro ni nada que podamos determinar ni fijar como antemano como algo inmutable, irrefutable y cierto. El trading es una actividad y una ocupación de riesgo, por supuesto, y lo importante no es lo que haga el mercado, sino cómo nos comportemos y reaccionemos nosotros frente a éso que haga el mercado: no improvisar, ni vaticinar, ni pronosticar...no jugar ni apostar, sino seguir siempre nuestras reglas y nuestro sistema (el que sea, el que hayamos aprendido, pero como solemos decir a nuestros alumnos y compañeros, siempre con cabeza, paciencia, conciencia y prudencia...sin saltarnos nunca las normas, y sin prisas ni exceso de euforia ni imprudencias).
Sobra decir que es obvio que cuando se lanza una moneda al aire (y éso fué lo que hizo la persona que compró y "se puso largo" antes de tiempo y basándose en rumores), puede salir cara ó puede salir cruz... y en este caso, salió el lado de la moneda presuntamente inesperado, y la apuesta (que no inversión), le ha resultado demasiado costosa y dolorosa, tanto para su cuenta económica, como para su moral, sus ánimos e ilusiones...
El viernes fué perdiendo mucho más de esos 4.000.-€ (estamos hablando de una bajada de más de 1.000 puntos...y sin que se atreviera a actuar ni hacer nada al respecto, porque al no tener reglas ni sistema, tanto había previsto dónde salirse, cuál sería su stop, qué hacer si el precio se daba la vuelta y los pronósticos no se cumplían...y evidentemente, el único consejo que se le puede dar (y por desgracia nos tememos que no será un caso aislado...) es que por muy amarga que haya sido esta lección, que aprenda de ella, que se compromete a hacer las cosas de otro modo (que se puede, que sí...), que no pretenda ir ni contra el mercado, ni contra la tendencia, ni contra su cuenta, ni contra sí mismo...
Que siempre es ocasión de reiniciarse, de cambiar, de mejorar, de dejar de pasarlo mal, de entender el trading como algo serio, que exigirá lo mejor de nosotr@s mism@s y que, si lo tratamos con respeto, vocación, concentración y dedicación, nos podrá dar absolutamente todo... pero que por desgracia, también podrá dañarnos y quitarnos muchos si lo entendemos como un simple juego de azar, y acudimos a los mercados y a la plataforma en la que operemos sin haber aprendido y sin habernos formado, sin aceptar que hemos de saber también controlarnos, y que hemos de tomar nuestras decisiones basándonos en algo objetivo, y nunca en algo subjetivo...Y no, no fué "el maldito Brexit" el que hizo perder ese dinero a nuestro lector (bueno, me consta que aún no ha cerrado la operación, o sea que las pérdidas ahora serán mucho mayores...).
No tuvo la culpa semejante término (por cierto, en confianza ¿alguien se ha molestado tan sólo en saber qué significa exactamente la susodicha palabra? Me temo que no, ¿verdad?), sino quién metió la orden al mercado... Duela o no reconocerlo, la culpa es suya.Y en la mayor parte de nuestros errores y de nuestras equivocaciones (tanto en nuestra vida como en nuestro trading), la culpa también es nuestra...
Aceptar eso, asumirlo con responsabilidad, en lugar de "tirar balones y operaciones fuera", es ya el primer paso para empezar a corregir ese comportamiento... y para empezar a cambiar y a hacer las cosas de un modo diferente).