Davos sirve para estas cosas; se ha convertido en una pasarela de famosos y famosas en la que la prensa de todo tipo intenta sacar jugo. La prensa seria, jugo económico, la prensa frívola, frivolidad, todo bien mezclado. Lo digo para que no se tómense en serio lo que sale de allí. Draghi se ha puesto de los nervios porque el dólar se ha puesto a caer, y eso le distorsiona su plan de retirar paso a paso estimulas a una economía que está cada vez más dinámica. De momento ha reducido el QE o compras de bonos a 30 mm euros/mes, y piensa suspenderlas en septiembre. Todo iba según lo previsto, pero el dólar se ha puesto a depreciarse frente al euro, y encima un bocazas americano ha dicho, en Davos, que es excelente para la economía USA, que crecerá más aún. El bocazas es el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin,
“Draghi respondió al secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, quien dijo en Davos el miércoles que un dólar más débil era bueno para el comercio estadounidense, rompiendo con la política de dólar fuerte de las administraciones estadounidenses anteriores. La intervención de Mr Mnuchin reavivó las especulaciones de que Washington intentará devaluar el dólar para impulsar las ventas de exportación como parte de su agenda "América Primero". (FT)
Lo menos que se puede decir del Secretario es que es un imprudente. Ha avivado las expectativas de que La Casa Blanca quiere realmente devaluar como sea, en contra de toda lógica económica. La lógica dice que la economía americana está creciendo más, que los tipos de interés están mucho más altos que en la UE, y La Bolsa subiendo, que eso debería movilizar capitales hacia EEUU, no al revés, y, por lo tanto, reforzar al dólar . En el gráfico, la línea roja marca la apreciación de euro frente al dólar, la línea azul, el rendimiento del bono del Tesoro americano. ¿Qué pasa para que vayan al revés de la lógica?
Bueno, primero la sospecha de los mercados de que La Casa Blanca, en su modalidad mostrenca actual, esté encantada con la caída del dólar. Segundo, las dos variables no son independientes, y la caída del dólar puede jugar a favor de la subida de tipos en EEUU, porque aumenta las expectativas de inflación, que, por cierto, va por delante de la de la UE.
Esto de las expectativas es un juego sutil y complejo del que es difícil discernir la dirección de la lógica. No es imposible, pues, que hoy los tipos estén descontando una depreciación del dólar que los hace subir.
Para Draghi es una pesadilla, ahora que Alemania le va a apretar las tuercas para que acelere su retirada de estímulos, que los useños se pongan a tocarle los perendengues con el dólar. La subida del euro es un freno al crecimiento europeo, Justo cuando el BCE quiere retirar los estímulos. Además, parece que no quieren respetar una especie de consenso internacional no escrito de no usar las monedas más allá de donde las lleven la política monetaria de cada país.
Lo peor de todo es que EEUU está creciendo cerca o aún más allá del potencial, lo que va a traducir la devaluación + (el déficit fiscal) en presiones inflacionistas y mayor déficit exterior, aparte del déficit público hinchado por las rebajas fiscales de Trump.
En suma, en EEUU veremos un salto hacia adelante de la demanda interna, mayor presión de precios, devaluación de dólar, y déficit exterior que habrá que financiar con más altos tipos de interés... que es lo que hoy se ve en el gráfico. O sea, que éste puede estar muy bien reflejando las tendencias que se esperan. En Europa, es posible asistir a un enconamiento Draghi-Weidmann por retrasar el calendario de retirada de estímulos... y complicaciones imprevistas pero nada improbables, como una nueva subida de las primas de riesgo entre los bonos nacionales.
Lo peor de la Administración USA es que no puede dejar de meter la mano en el engranaje interno y externo.