Desde hace varias jornadas estamos comentando que los mercados no siempre han de responder a corto plazo a la evolución de la economía ni a los fundamentales de las acciones. La mayoría de las veces se mueven en base a expectativas y otras muchas, es el componente psicológico lo que suele mover las cotizaciones de corto plazo. Las de medio y largo plazo sí que responden más a la coyuntura económica. Así, tras el fortísimo varapalo de la mayoría de activos de los mercados financieros (materias primas, renta variable, renta fija, etc…), el componente psicológico es el que está dominando los mercados. Hablaba hace unos días con un asesor y coincidíamos en que el suelo se produciría en cuanto hubiese dos cierres positivos de las bolsas chinas.
Muchos analistas dicen que los índices de renta variable chinos son un mercado muy manipulado por las autoridades chinas. No vamos a negarlo, pero tampoco podemos decir que la FED no ha ayudado a la recuperación del S&P500 de la crisis de Lehman y ahí tenemos hoy al S&P500 subiendo más de 6 años sin parar. Que el banco central chino y el estado harían todo lo que pudieran para evitar el colapso de sus bolsas y que tienen herramientas y dinero de sobra para hacerlo era evidente. Esta madrugada el gobierno chino ha dicho que acelerará la reforma del sistema tributario, aumentando el gasto en infraestructura y acelerando el uso del modelo público-privado para apoyar el crecimiento económico y reducirá los impuestos sobre los dividendos para los accionistas que tengan la acción con más de 12 meses de antigüedad.
Evolución del Hang Seng de Hong Kong. La vela semanal anula por completo la vela negativa de la semana anterior y recupera la media de 500 semanas. No obstante, quedan dos días para acabar la semana y de momento el Hang Seng sigue moviéndose en el mismo rango de precios que marcó la semana del 24 de agosto en la que se perdió la importante zona de soporte de 22.500 puntos. Si esta semana cerramos por encima o comenzamos la semana que viene sobre esta cifra de 22.500 puntos, entonces sí que podemos decir que el índice Hang Seng ha hecho un suelo de medio plazo y dar por concluida la corrección. Las ventas de estas semanas se tornarán rápidamente en compras y las bolsas volverán a regirse por los fundamentales y datos macro en vez de por la psicología de las masas.
Toda Asia ha subido con fuerza, pero el índice que más se ha beneficiado ha sido el Nikkei. Ayer se publicó que el PIB se contrajo un 0.3% en el trimestre frente a una contracción del 0.5% estimado. (-1.2% vs -1.8% estimado anual) y hoy un mejor dato de confianza del consumidor (41.7 vs 40.5), unido a los dos cierres positivos de China, han sido suficientes para que el nikkei rebotase más de un 7% en un solo día. En el gráfico se observa que la fortísima sobreventa marcada por el RSI en la parte inferior ha favorecido claramente el rebote.
Y cómo es normal, Europa se está contagiando de la euforia de los mercados asiáticos. En el gráfico del Eurostoxx 600 podemos observar que la vela de esta semana sí que está superando al alza el rango de preciso dibujado en la semana del 24 de agosto. Un cierre esta semana por encima de los niveles actuales podría certificar el suelo del Eurostoxx 600 en la zona de 350 puntos, que era clara zona de soporte (máximos del año pasado y línea que une los mínimos desde 2011). Pero claro, el componente psicológico no nos hacía ver hace dos semanas que podíamos estar ante una oportunidad de compra. Al menos, dimos argumentos suficientes como para no reducir riesgos.
Evolución del Eurostoxx 600.
Para completar el estudio de los principales índices y sus tendencias de largo plazo, tenemos que el MSCI World que vimos la semana pasada que estaba en clara zona de soporte, esta semana está rebotando.
Y el S&P500 en velas semanales también está intentando generar un rebote en la línea que une los mínimos desde el año 2009. No obstante se necesita que se supere al alza el rango de la semana del 24 de agosto. Es decir, que el S&P500 supere nivel de 2.000 puntos y 1.660 puntos del MSCI World.
Por tanto, los mínimos de agosto pueden ser una clara zona de suelo a medio plazo. Se necesita una confirmación del mismo con un cierre por encima de los niveles comentados y una reducción de la volatilidad existente ahora mismo, Para ello, tal y como venimos comentando se necesita que los datos macro que se vayan publicando no sean tan desastrosos cómo se está descontando por el mercado. Esta misma semana los datos de exportaciones e importaciones de Alemania han superado con creces las expectativas, demostrando que el pánico vendedor de agosto podría no estar tan justificado.