Los movimientos de las divisas a corto plazo vienen determinados por diferente factores. Entre ellos, podríamos destacar los intereses de los llamados especuladores, las decisiones de Gobiernos y políticos y, como no, la intervención de los Bancos Centrales. Pero dejando a un lado todo este ruido trataremos de explicar el funcionamiento, en mi opinión, del mercado de divisas. Para ello, vamos a recurrir una vez más al pasado para explicar el presente.
Imperio romano
Como todos sabéis dinero deriva de término denario o denarius procedente del latín, que era una moneda romana. Inicialmente, todo era muy lógico y el valor de las monedas emitidas, denario y resto de monedas, estaba determinado por el valor del metal que contenía. Así, a más riqueza del pueblo romano mayor cantidad de moneda del mismo valor se podía emitir. Sin embargo, finalmente la voracidad del Estado y sus políticos para el dispendio público y privado terminó por corromper el sistema. Con el fin de poder gastar más y más dinero y financiar más y más obra pública y sostener el elevado nivel de vida privado de ciertos políticos, comenzaron a reducir la cantidad de metal empleado y a emplear aleaciones con metales menos valiosos. En cambio, intentaron mantener el valor nominal de la moneda aunque el valor intrínseco a los metales que lo contenían era menor. Conociendo este hecho, mercenarios sólo aceptaban pago en oro, no en monedas de metales envilecidos. A tal punto de desvergüenza llegó el tema que parece ser que algunos impuestos se pagaban en especie. Los ciudadanos sufrieron cada vez mayores tasa e impuestos. Finalmente, tras un largo proceso el imperio romano cayó.
Imperio español
Oro, plata, tabaco, tomates, patata, cacao... productos que convirtieron a España en un país rico. Todo empezó con el descubrimiento del continente americano por los españoles y siguió con la conquista de gran parte del continente. Las monedas acuñadas de oro representaban la riqueza de un país transformado en potencia mundial. Sin embargo, la decadencia llegó y el oro dio paso a otros metales que no hacían honor al valor de la moneda emitida.
Siglo XX
El oro respaldaba la moneda emitida. A más rico el país más oro en posesión de los bancos centrales y, por tanto, más moneda emitida o mayor valor de cada moneda frente a las otras divisas. Finalmente, el patrón oro se abandono por considerarlo obsoleto y gran parte de las reservas de oro fueron vendidas.
Actualmente
Ahora que no existe algo físico que respalde la fortaleza o debilidad de una moneda. Debemos manejarnos con un cuadro más complejo de dibujar. Elementos como riqueza de un país, crecimiento económico, deuda, emisiones de moneda, etc. son necesarios. En realidad no ha cambiado nada, lo que sucede es que antes todo ello convergía en algo físico más fácil de cuantificar. Aunque realmente la deuda no satisfecha debía tenerse en cuenta siempre ya que si tienes mucho oro pero debes mucho más ¿de qué sirve tener muchas reservas?
América
La situación de EEUU se puede explicar fácilmente con un ejemplo. Supongamos que disponemos de un pastel que representa la riqueza de Estados Unidos. Partimos el pastel en cuatro trozos y asignamos el valor correspondiente a cada trozo, es decir, 1/4. Pero, de repente, el Gobierno norteamericano decide dividir cada trozo en 2 partes, o sea, emitir más moneda. Ahora cada parte supondrá 1/8 del valor de la riqueza total del país.
Por otro lado, supongamos que el valor del pastel, alias riqueza de EEUU, aumenta como consecuencia del aumento del precio de los pasteles, es decir, hay un ligero crecimiento de su economía. Debido a este efecto, cada trozo tendrá un valor ligeramente superior pero sin llegar al valor de 1/4 inicial.
Por último, supongamos que un trozo del pastel tenemos que regalarlo como pago de alguna deuda. Con ello, dividiremos el pastel en 9 trozos con lo que una parte no será para nosotros y las otras 8 sí lo serán. Pero el valor de cada trozo nuestro habrá disminuido desde 1/8 a 1/9.
La situación del Yen se puede explicar en los mismos términos.
Europa
Aunque la riqueza europea no aumenta significativamente al no poner la maquina de inventar dinero como lo está haciendo EEUU el efecto es una moneda más fuerte que el todopoderoso dólar.
Conclusión
En mi humilde opinión, a largo plazo sólo la riqueza de un país, la marcha de su economía y la cantidad de moneda emitida determinan el valor de una divisa. Mientras la economía estadounidense continúe con un leve crecimiento y sigan las políticas de estímulo el riesgo de debilitamiento del dólar persistirá. Cuando está situación cambie la situación del dólar también lo hará. Es cierto que la inflación no parece ser un problema actualmente en la economía norteamericana y es un elemento clave para determinar el rumbo de una moneda pero también lo es que la inflación lleva siendo manipulada durante mucho tiempo por demasiados Gobiernos. A tal fin se sacan y meten productos en la cesta para determinar la inflación, se toman marcas de referencia obviando marcas blancas, no se da el peso que debería a productos básicos y además se manipulan los datos con trucos estadísticos.
En cuanto al Euro, si bien el crecimiento de Europa también es débil, la máquina de hacer dinero no está en marcha y, por tanto, existe un riesgo menor de debilitamiento de esta moneda hasta que la situación cambie.
Bueno, hay un pequeño detalle que es importante mencionar y es que el mercado de divisas podría anticiparse en sus movimientos a situaciones futuras al igual que lo hacen los mercados bursátiles.
