sobre lo que ayer llamé “Curiosidades” (Lars Christensen demostrando que un Presidente USA NUNCA ha repetido victoria si la curva de rendimientos era negativa en el segundo año de mandato), es digno de tenerse en cuenta y reflexionar sobre ello.
Lars cita los años en los que eso se ha producido - la derrota del presidentes en sus segundas elecciones -. Vamos a repetirlos: (1968 Humphrey) 1980 (Bush padre), 2000 (Al Gore contra Bush hijo) y 2008 (Obama vence a McCain).
Esto, obviamente, no se produce porque los votantes están siguiendo la evolución de la curva de 10-2 años escrupulosamente. Seguramente no saben ni lo que es. Se produce porque la curva tiene un alto poder predictivo y cuando se hace negativa, al cabo de unos meses, en plenas elecciones, viene una recesión que derrota al candidato de las Casa Blanca). Ergo, no es casual ni baladí que el fenómeno curva invertida vaya seguido de una recesión. Ya hemos explicado en otros blogs las causas de esto.
Luego, vamos a pasar unos meses interesantes. La FED amenaza subir tipos y darle otra vuelta de tuerca a la inversión de la curva, que está a punto de cocerse. Trump, diciendo trumpadas cada vez más desaforadas y buscando enemigos a quien culpar por sus descensos en las encuestas, aparte de presionar a la FED para que no suba los tipos, en un momento en que su expansión fiscal estará pidiendo al a gritos que la FED suba tipos.
En fin, un mejunje de política típicamente sucia, de enfrentamiento entre instituciones, mientras en el resto del mundo no se ve precisamente más que unas altas probabilidades de que los mercados se vean tocados por Argentina, Turquía, Italia (no sé en qué orden).
Así expuesto, ¿ganarán Trump su segundo mandato? A lo mejor ha sido él mismo, con sus locuras de guerra comercial etc, el que se ha disparado el tiro en el pie.